La bala mal dada

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Narrador universal

Un auto rojo iba a máxima velocidad por las calles de Toronto, dentro de el, se encontraba la castaña, hecha un desastre sabiendo que corría peligro andar así de noche, sabia que su familia no podía salir de noche, ellos, ellos los encontrarían y así fue.

Una camioneta y un auto iban detrás de Erika, ella sabia de quienes se trataban, eran enviados de la familia Grey para matarla, claro, por parte de el patriarca de aquel apellido. Hombres salían por las ventanas con todo tipo de arma, acelerando para alcanzarla luego de unos segundos de rapidez excesiva, comenzaron los disiparos hacia la castaña. Estaba muerta.

Su presión iba subiendo, el color de sus ojos se aclararon por completo pero recordó: Su hermana, llevaba siempre una pistola con ella en caso de, lo que ahora esta pasando. Buscando mientras conducía, hizo victoriosa su acción , la había encontrado, sabia que era lo correcto, piso el acelerador y saco medio cuerpo, el aire estaba en su contra pero lo volvió a su favor y comenzó a disparar ella también.

Balas. Iban y llegaban, iban y llegaban, ni Erika ni aquellos hombres recibían una sola, hasta que uno de ellos, hizo algo que fue lo mejor (a su parecer), una bala mal dada, provoco que reventará un neumático de la parte trasera del auto de la joven, rápidamente se incorporó al auto y trató de controlarlo, aquellos hombres creyeron haber terminado con el trabajo que su jefe les había ordenado y salineros disparados como flechas.

El auto comenzó a dar vueltas por la calle, estaba apunto de llegar a su destino, faltado un poco, decidió abrir la puerta sabiendo que correría peligro de morir en aquella persecución y se lanzó afuera del auto. Rodó y rodó por la carretera, piedras y demás se enterraron en el cuerpo de la castaña, poco después, sus giros fueron siendo cada vez más lentos hasta que se detuvo, estaba a unos pocos metros de llegar, se levantó y aún así, lastimada, se dirigió con su mejor amiga, el auto explotó, Erika no decidió dirigir la mirada, ella necesitaba ver algo más importante que un auto en llamas, necesitaba ver a su mejor amiga, ver si no se rindió con su amistad, quería ver si no lo había perdido aún.

A unos metros de distancia, se encontraba Natalia esperándola, no fue necesario llamarla ni mandar mensajes, solo se dejo llevar por su corazón, aquel, que le decía que estaba cerca, pero también, que algo malo había pasado.

No resistió más la angustia y decidió salir de la casa, corría como nunca, pero ella no sentía esa velocidad. En medio de la noche, de la carretera vacía, de la oscuridad y de los grandes y majestuosos pinos, encontró a una joven caminando como pudo, a una distancia más atrás, se encontraba un auto incendiándose. Sabía de quien se trataba, corrió más rápido hasta ver que la joven cayó al pavimento, sin darse cuenta de que la ayuda apareció. De que su mejor amiga la había encontrado.

La bailarina masoquista (TERMINADA) #Bubblegum2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora