Mi hermano favorito (Más que hermanos 2)

Capítulo 15

Hugo.
Son las dos de la madrugada cuando salgo fuera del motel a fumar. Me apoyo en la baranda y observo todo a mi alrededor. Hace un poco de frío, no tengo nada puesto, entro a la habitación y me pongo los pantalones de algodón negros y una chaqueta gris.

Vuelvo a salir fuera, ahora estoy mucho más cómodo. Una puerta del pasillo de enfrente se abre. De ella sale una chica rubia, en seguida la reconozco, es Emma, la chica que me acaba de presentar Erika.

-¿Tampoco puedes dormir? -me pregunta.
-No, ese colchón me está matando -sonrío.
-Te entiendo, mi espaldas me están jodiendo la noche -se coloca un mechón de pelo detrás de la oreja.
Vuelvo a sonreír.
-¿Qué pasa? -dice sorprendida-¿Tengo algo entre los dientes? -se tapa la boca.
-No, no es eso.
-¿Entonces?
-Me recuerdas a mí.
-Oh vaya -susurra.
-¿No crees que nos parecemos?
-Sí, y creo que demasiado -dice sonriendo.
-Casualidad -doy una calada.
-Supongo -se frota las manos con rapidez por los brazos.
-¿Tienes frío? -pregunto.
-Un poco -susurra.
-Toma -le entrego mi chaqueta.
-¿Qué? No, te dará frío.
-No pasa nada -la ayudo a ponérsela.
-Gracias -susurra.
-¿Por la chaqueta o por las vistas? -me toco el abdomen y sonrío.
-Por ambas -sonríe y se forman dos hoyuelos en sus mejillas perfectas.
Me quedo en blanco, no sé que decir ni que hacer, Dios me recuerda tanto a mi hermana.
-¿Estás bien? -susurra.
-Sí, perfectamente. Solo es que me recuerdas a una persona.
-Espero que esa persona, fuera especial.
-No sabes lo especial que era -susurro.
-Hablas de esa persona como si ya no estuviera...
No contesto.
-Oh Dios, lo...siento, yo... -me abraza. Siento sus brazos rodeándome con cariño y ternura.
-No pasa nada -musito sin soltarla.
-Lo siento -se aparta despacio.
-Te pareces a ella -susurro.
-¿Cómo se llamaba? -pregunta con miedo.
-Emily, era mi hermana y la quería tanto que no hay números para expresar cuanto la quería.

Emma no dice nada, me doy cuenta de que está llorando. Antes de que una lágrima caiga al suelo, la limpio con el dedo. Ella me mira y no digo nada sólo la abrazo.

Emma.
-Tengo que irme -susurro.
Hugo se aparte despacio y me sonríe.

Me doy la vuelta y comienzo a llorar. Algo dentro de mí, me dice que le conozco, no sé de qué. Tal vez hayamos estado juntos en alguna casa de acogida o algo por el estilo, no lo sé, pero le conozco.

Entro a la habitación y Brett sigue dormido como un tronco. Entro al baño. Lleno la bañera de agua caliente y me doy un baño.

Siento el agua y la espuma en mi cuerpo desnudo, es una sensación calidad y maravillosa. Me siento como si estuviera entre algodón. Cierro un momento los ojos, necesito relajarme y pensar y sobre todo relajarme.

Después de un buen rato, abro los ojos poco a poco. Ya sé lo que voy hacer, tal vez, sea una locura pero tengo que intentarlo.

Salgo de la bañera, me seco con la toalla, me pongo ropa limpia y cómoda y luego me acuesto en la cama.

Al día siguiente, hemos recogido todo y estoy esperando a Brett en el coche. Brett entra y me sonríe.

-¿Lista para ir a casa?
-En realidad, no vamos a casa -susurro.
-¿A dónde vamos entonces?
-A buscar a Vicent, le necesitamos.
-¿Par qué? -me mira sorprendido.
-Para encontrar a mis padres biológicos, es hora de que me den respuestas.