Assassin's Creed: Holocaust

Secuencia de memoria 13

Actualidad, instalaciones de Abstergo Entertainment; 04 de Enero del 2014.

Era un día más para Alexa, ella despertaba ya acostumbrada al encierro, sus mañanas sólo eran mañanas y no se tomaba el tiempo para arreglarse, lo único que hacía era levantarse y dirigirse al Animus, ella se colocaba en el mismo esperando a la llegada de Melanie o Violet, las horas pasaban pues la chica se había despertado muy temprano, ella sólo miraba al techo en un perfecto y ruidoso silencio, el lugar comenzaba a iluminarse con los focos de la sala y junto a ello, Violet hizo presencia desde los altavoces.

— ¿Es que tan desesperada estás por trabajar? 

Alexa respondió rápidamente — Sólo haga su trabajo, yo sólo quiero terminar con esto. 

Desconcertada — Está bien.

De repente, alguien irrumpió en la sala, se trataba de Melanie que se acercó hasta Alexa — Señorita Aldrich, ¿sucede algo?

La joven ni siquiera miró a la señorita Lemay — No, señora.

— He escuchado cómo le respondiste a Violet — tomándole la mano — de verdad, cuando esto acabe podrás ir a casa.

Mirando a la pelirroja — Yo no creo eso — retirando la mano de ella — creo que van a intentar sacar más cosas de mis "recuerdos".

Lemay quedó callada ante ello para levantarse, después de unos segundos de silencio — Accede de nuevo a sus recuerdos.

La pelirroja se retiró de la habitación mientras que Alexa cerraba sus ojos para continuar con la sincronización de sus memorias antepasadas.

Harbin, Manchukuo (China ocupada por Japón); 05 de Febrero de 1945. 

A mitad de una insaciable tormenta, el viejo avión de aquel piloto asesino que llevaba consigo a Carl aterrizó a las afueras de una ciudad extensa, el lugar estaba lleno de estandartes y tropas japonesas, al bajar del avión, el piloto intentó seguir a Carl.

Deteniendo a su compañero — No, me han dicho que éste lugar es peligroso, si te llegase a pasar algo, nadie podría sacarme de aquí, no me llevaré mucho tiempo, voy a por Ishii y regresaré.

Dudoso — Señor Richtofen, entiendo, pero, ¿cómo pretende encontrarlo? 

El asesino tomó de entre sus prendas el distintivo templario de Rommel para ponerlo en su lugar correspondiente — Me identificaré como miembro templario para dar con el japonés.

— Ve, suerte, hermano.

Carl dio media vuelta para adentrarse en aquel poblado de China; su recorrido se vio interrumpido por un grupo de asaltantes que vestían muy mal y se veían muy descuidados, el asesino combatió contra ellos para dejarlos noqueados para no manchar sus manos de sangre, él continuó su camino por las solitarias calles de Harbin, hubo un momento en el que apareció un grupo de soldados japoneses que al ver a Carl apuntaron contra él, pero uno de ellos identificó el símbolo del distintivo de Carl para ordenar a sus compañeros que bajasen sus armas, Carl no entendía sus palabras y miró que aquel japonés se acercó hablando pero éste se percató que Carl no entendía, él señaló a uno de sus hombres hablándole en su idioma, aquel.hbre elegido llegó hasta Marlington para saludarle.

— Bienvenido, señor de la orden.

Carl se tranquilizó al ver a alguien con quien poder comunicarse — Acabo de llegar a esta parte del mundo, he venido a ver a alguien de la orden.

— ¿Al teniente Ishii? — preguntó aquel.

Sonriendo — Así es, ¿podría llevarme a él?

El soldado miró a su líder de escuadrón y le platicó de ello, éste le respondió un poco serio, cosa que inquietaba al asesino, el soldado que hablaba con Carl regresó la mirada a él.