Su Majestad Y La Chica Plus Size (editada)

¿no te das cuenta?

PDV Gabriela.

Habían pasado varios minutos desde que la gran tormenta comenzó y yo no podía soltar a Erick.
El me abrazaba y cada vez que sonaba un gran trueno me apretaba mas a el.

-Gabi.. me estoy cansando aquí parado. ¿Podemos sentarnos?. Te juro que no te soltare.

Asentí con la cabeza aun en su pecho y caminamos hasta mi cama donde nos sentamos en el borde de esta.

-Gabi... lo.. lo de Fabiola yo...

-esta bien. Es tu novia es claro que vas a protegerla.

El colocó su mejilla  sobre mi cabeza y soltó un suspiro.

-eso es lo que te quiero decir. Ella no es, ni fue y tampoco va a ser mi novia. Solo lo dice para ganar buena fama en vez de que la llamen "zorra" o "princesa fiestera "y tantas otras cosas.

Me aleje un poco de él y lo mire extrañada. Si eso era verdad porque se involucraba el.

-¿y tu que tienes que ver?.

- ella tiene mala reputación pero mis padres creen que con mi ayuda podría cambiar su forma de ser. Pero yo no quiero nada con ella. No me molestó que dijera ser mi novia ya que no tenia a nadie que me importara lo suficiente para ese título.

La tormenta iba en aumento igual que mi cansancio y mi miedo.

-Gabi... estas muy cansada. ¿Por qué no duermes?.

-solo si te quedas conmigo.

PDV Erick.

-claro que si. No puedo salir de aquí aunque quisiera..

-se que no soy la mejor compañía pero aún somos..

-no.

Me apresure a decirle antes de que me dijera la palabra que tanto odio.

Ella bajó la cabeza y se acostó yo la imite.
Estábamos frente a frente mirándonos sin decirnos nada pero a la misma vez todo.

-cuéntame el mejor día de tu vida.

Dije para terminar con el silencio.

-no puedo.

-¿por qué?.

-por que nunca se lo conté a nadie y el mejor día de mi vida sigue por el peor de todos los días. El que nunca podrá borrar mi cabeza

Ya nada me sacaría de este lugar sin antes saber que cosa tan mala tuvo que pasarle a alguien tan buena y linda persona como ella.

- ¿no confías en mí?.

-si lo hago. Ese no es el problema.

-Gabi. Prometo no juzgarte nunca y guardar  tus secretos tan dentro mío como mis sentimientos.

Ella sonrió de lado. Pero esa sonrisa no llegó a sus ojos.
Suspiro y comenzó a contarme su historia.

-mi madre... ella tenía quince años cuando quedo embarazada de mi.. no conocí a mi padre ya que nunca le interese. Según me dijo mama.
Cuando se enteró de su embarazo quiso abortar, pero mis abuelos no la dejaron. Por eso cuando nací, mi madre me alejo de ellos.
Comenzó a beber cuando tenía tres años y siempre me maltrataba por estar borracha.
Odio las tormentas... por.. por que una noche, mi madre salio a tomar con sus amigos y me dejo sola en casa. Tenía cinco años casi cumplía los seis.
Hubo una fuerte tormenta y el viento voló el techo de nuestra pequeña casa.
Llore toda la noche y me escondí debajo de la cama. Así llorando me dormí.
La tormenta pasó y a la mañana siguiente mi abuelos vinieron a vernos y mi madre que había llegado antes que ellos me amenazó diciendo que no habría comida para mi si les contaba que ella no había estado esa noche.
Así que ese día dije mi primera mentira.

-Gabi...
Ella no me dejo terminar de hablar.

-Déjame seguir Erick por que si no saco todo esto dentro de mí voy a explotar... por favor.

Asentí y volví a abrazarla.

-dos meses después ella no había cambiado mucho solo que estos últimos días se veía más pérdida de lo habitual. Se la pasaba en su huerto o junto con sus rosales.
Tomaba menos pero seguía tomando bastante por lo cual se quedaba dormida en el sofá. El 14 de noviembre era mi cumpleaños y estábamos en doce. Solo faltaba dos días para cumplir los seis años.
Eso significaba que podría ver a mis abuelos.
Al día siguiente me desperté por la voz de mi madre.
Creía que estaba enojada o que había echo algo mal, pero no.
Al abrir mis ojos mi madre me sorprendió con una bandeja con un hermoso desayuno.
Me cantó el feliz cumpleaños y luego me dijo que ese día haríamos todo lo que yo quisiera.
Yo sabia que aun faltaba un día para mi cumpleaños pero no quería a la otra mamá. Me gustaba más esa. La de los desayunos y besos en la frente.

>> En la mañana fuimos de compras y ella me compró un vestido muy hermoso de princesa con unos zapatitos a juego y una tiara.
Me dijo que era la princesa más hermosa del mundo.
Almorzamos en un restaurante de la ciudad y de postre pidió una torta de cumpleaños y cantó a todo pulmón el "feliz cumpleaños".
Por la tarde fuimos a las hamacas y nos hamacamos dos horas seguidas entre risas y  chistes.
Mi madre era al fin la madre que siempre quise.

>>Jugamos todo el día y ella repetía cuanto me amaba y que era el amor de su vida. Por la tardecita ya casi noche mi madre me llevó a casa me acostó en la cama y me arropó.
Antes de irse me dio una cajita con el último regalo de la noche.
No lo abrí. Estaba muy cansada, quería esperar para abrirlo el verdadero día de mi cumpleaños...

Se detuvo y quedó pensativa por unos minutos.

-¿sabes por que odio las rosas blancas?.

Negué con la cabeza y ella levantó la vista.

-por que cuando desperté a la mañana siguiente buscando a mi mami buena. Esa con la que pase el mejor día de mi vida. La encontré... la encontré pero no como quería.

Su voz se había roto y comenzó a llorar. Soltando de vez en cuando un hipido.
No podía ya hablar pero no quería interrumpirla por que ella necesitaba esto. Descargarse con alguien y si esa persona era yo. Pues lo sería.

Cuando pudo hablar mi corazón se rompió en mil pedazos.

-la encontré colgada de un árbol y debajo de ella estaban las rosas blancas siendo testigos de su suicidio....

Como pudo haberle hecho eso a Gabriela. Una persona tan hermosa y divertida por fuera pero tan rota por dentro.
Su madre le había dado el mejor día de su vida para luego suicidarse el día de su cumpleaños.

- mis abuelos llegaron antes de que pudiera tocarla y mi abuela me llevó hacia dentro de la casa, mientras que desde fuera escuchaba el grito arrasador de mi abuelo.
Desde entonces festejo mi cumpleaños el 13 y nunca el 14.
Es otra cosa que odio.

La abrase y ella rodeo sus brazos en mi cuerpo.

-Gabi...

-gracias.
Dijo antes de lanzar un largo suspiro y arroparse en mi pecho para quedar completamente dormida.
Sabia por que me daba las gracias. Todo lo que la comía por dentro había podido salir y ahora se sentía un poco más libre.

-me estoy enamorando de ti Gabi.

La abrace y me dormí junto a ella. Abrazados ocultándonos de la tormenta y abrigándonos con solo nuestros brazos.

Mañana te diré que siento lo mismo que tu y mas. Por que de verdad Gabi y ahora más que nunca lo se. Te quiero.

Capítulo.
Jajaj para las que pedían más ahí tienen.
Besos♡♥♡(editado)