Cap 46: Sueños y recuerdos algo disparatados.

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Narra Alistair.

Alistair, corre.

Empecé a correr.

Derecha, izquierda, izquierda, derecha.

Corrí por donde la voz me indicaba.

Bien, has llegado al final. No hay escapatoria.

Mire alrededor, las paredes se cerraban.

Terminaste justo como no lo deseabas.

Todo se volvía oscuro.

Sin aquellos que amas.

De repente una ola de color inundó mis ojos, estaba entre las flores. Todas me miraban de cabeza a pies.

-¡Pero que flor más aburrida!- Exclamó un tulipán

-¡Que tallo tan simple!.- Esta vez fue un lirio, mientras tomaba una de las puntas del abrigo.

-Es que no soy una flor.- Hablé por primera vez.

-¡Ja! Ya lo decía ¡Es una hierba!- Dijo una violeta, para después tirarme al piso.

-A mi me gusta.- Comentó una rosa con voz chillona.

-Calla, rosita.- Está reprendió a la "Rosita".

Otra vez cambió el escenario... Estaba muy borroso y no podía distinguir nada.

-¡Alistair!.- Esa voz tan irritante, la reconocería en cualquier parte.

-¡Maddie!.- No lo podía creer. Escuchaba como repetía mi nombre, pero me costaba enfocar la vista. Cerré los ojos por un segundo, los volví a abrir y allí estaba ella, mi hermani... Digo, la mocosa a la cual no debo llamar hermana. Corrió a abrazarme y ambos nos caímos, como había dicho antes ¡No lo podía creer!. Pero esa pequeña felicidad duraría poco. Sentí como me mojaron el rostro y ahí fue cuando desperté. Bunny tenía rato llamándome y no me despertaba, así que decidió hecharme agua fría en la cara.

-¡Al Fin!, temía haberte perdido.- Dijo la chica entre risas. Luego su cara cambió a una más seria. -¿Por qué nombrabas a Maddie?.- Preguntó con curiosidad.

-Nada... Sólo fue un sueño, Bunny.- le di una sonrisa de lado.

-Ok.- Suspiro aliviada. -¿Me acompañas por una malteada de maravilla?

-¿Con este tiempo?- señale hacia donde se encontraba el maleficio.

Rodó sus ojos de forma divertida y luego me miró de esa forma tan linda, amo que me mire así.

****************
Narra Maddie

Llovía como si nunca fuera a acabar, el sonido de los truenos retumbaba en todo el lugar, también se podía observar como el destello de los rayos entraban por la ventana de aquella habitación.

Temblaba a causa del miedo, no me gustan las tormentas.

Me levanté despacio y lentamente camine hasta una mesita en donde se encontraba una lámpara. La prendí, -Algo de luz me ayudara a sentirme más segura.- pensé. Ese sentimiento de "seguridad" no duró mucho, la electricidad se cortó al instante. Me tiré al suelo, así como si alguien me hubiera empujado, pero yo estaba sola en el cuarto, ¿Me auto empuje yo sola?.

 Me tiré al suelo, así como si alguien me hubiera empujado, pero yo estaba sola en el cuarto, ¿Me auto empuje yo sola?

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