Reencuentros

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Ryan
Cuando entré al recinto de carreras que se celebraban cada sábado no encontraba a mis amigos.Generalmente solían asistir a este tipo de sitios,aunque han pasado varios meses.Me metí en el centro de la gente buscando alguna cara conocida.
-¿Ryan?
Una voz me hizo girarme sobre mis talones y pude ver el rostro conocido de Harrys,uno de mis mejores amigos de Wisconsin.
-Hola tío.-dije mientras le estrechaba la mano-Tienes un aspecto horrible.
Tenía bolsas bajo los ojos y estos estaban inyectados en sangre.
-Gracias,yo también te quiero-dijo con humor-las drogas tío.Cada día estoy más enganchado.Ven,les hará ilusión verte.
Me llevó fuera del conjunto hacia un grupo de gente que se apilaba sentada en el suelo.
-Eh,tíos,a que no sabéis quién está de vuelta.
Todos se voltearon para ver de quién se trataba y varios de ellos exclamaron con sorpresa.
-¡Ryan!-gritaron todos.
Me apretaron entre sus brazos y me sentí como en casa.
-¿Has venido desde Washington hasta aquí?-me preguntó Savannah,una de las zorras que solía follarme.
-Nos han dado vacaciones de mierda.
-¿Sigues con tus rollo de una noche?-me preguntó un viejo amigo.Maldije por pensar en Helena con esa pregunta.
-Eso ni se pregunta.
Todos estallaron en carcajadas mientras me pasaban una bebida.La tragué dejando que el gusto a alcohol me quemara la garganta.
-¿Vienes a correr?-Negué con la cabeza.-Me voy dentro de un día,y no quiero peleas.
-Joder,vaya mierda.-Soltó uno.Savannah cogió mi brazo y me llevó a un lugar retirado.
-¿Me has echado de menos?-me susurró mientras cruzaba sus brazos,haciendo ver sus pechos más grandes.
-Oh si.-dije mientras la besaba con ansiedad.Sus labios eran finos,no como los de Helena.Ella los tenía más gruesos,y mucho más apetecibles.
Desvié mi atención de ella y lo noto.
-¿Te pasa algo?-dijo mientras tocaba mis abdominales.
¿Por qué tenía que pensar en ella? Realmente no era mi novia y nunca lo sería.Ella podía hacer lo que quisiera y yo también.
La besé de nuevo y le arranqué el top minúsculo que llevaba puesto.Desabroché su sujetador de encaje y lo solté por algún lado.Sobé una de sus tetas mientras ella gemía,y me incitó a seguir adelante.Lamí uno de sus duros pezones y su respiración se agitó.Levantó mi camiseta y consiguió quitármela.Le besé el cuello mientras desataba el cinturón de mis pantalones,y los bajaba con facilidad.Sus ágiles manos bajaron mis bóxers mientras yo le bajaba los pantalones cortos que llevaba.Introduje una mano por debajo de sus bragas y solté un gruñido.Colé un dedo dentro de ella y noté lo mojada que estaba.Bajé sus bragas y sin avisarle,me introduje dentro.
A la mierda Helena,ella no podría decirme con quien liarme o no.

Cuando me reuní con mis amigos ya habían acabado las carreras.Pero sinceramente ya no me interesaba.Por primera vez quería estar en mi casa.Y joder voy a sonar como un necesitado,pero querría estar con Helena.
Si,después del polvazo.Esa estúpida niña estaba en mis pensamientos a todas horas.
Puede que me guste o solo quiera un polvo con ella,el caso es que no me la saco de la cabeza.
-¿En qué piensas?-Savannah me sacó de mis pensamientos.
-En lo de hace unos minutos.-Mentí.Ella sonrió y se fue con otro.Así quería yo una relación.Pero Helena no estaba dispuesta a darme ese gusto.Y yo tampoco lo quería con ella.
Me pasaron unos vasos y bebí de ellos olvidando todo.
Cuando llegué a casa eran las 6 de la mañana. Mi madre seguía dormida y no me preocupó.Ultimamente la notaba rara.Mas feliz desde la última vez que la vi.Y dentro de mí me alegraba.No se mereció nada de lo que ese hijo de puta hizo.
Y pensar que sigue suelto.


Cuando me desperté solo tenía un poco de dolor de barriga,nada que no pudiera aliviarse.Cuando me dirigí hacia la cocina mamá estaba despierta,y miraba fijamente por la ventana.Parecía estar pensando en algo.
-Hola.-dije.
Se sobresaltó y me miró por unos segundos.
-¿Qué pasa?-le pregunté tras unos minutos en silencio.
-Por favor no me odies.
-¿Por qué?-Esto no sonaba nada bien.
-Sé que odias a las chicas pijas e insoportables,pero...-Helena era la única chica insoportable que soportaba.Aunque eso último a veces fallaba.¿Por qué justamente se me vino ella a la cabeza?
-Helena y tú os vais en el mismo avión.Iréis juntos.
No me sorprendía.Realmente me gustaba la idea.
-Joder.-dije simplemente.
-¿No te molesta?
Me encogí de hombros simplemente.Sé que estaba siendo un poco frío con ella,pero el cambio de humor es incontrolable.Cogí un zumo y fui hacia mi habitación.No me disgustaba su idea.En absoluto...

Últimos minutos en Wisconsin.El aeropuerto estaba vacío a las 5 de la mañana.Estábamos esperando a Helena y su madre,que como siempre tardaban una eternidad en llegar.El avión salía en muy poco e íbamos retrasados.Cuando las vi venir en nuestra dirección corriendo,me irrité.¿Por qué no podían ser puntuales?
-Lo sentimos,el coche se rompió por el camino.-dijo su madre entre respiros.Miré a Helena,que estaba como un tomate por el maratón,y se apoyaba en las rodillas.Me hizo gracia pero la contuve.
En cierto punto no dejaban pasar a los padres,y solo los que viajaban podían seguir adelante.Helena se secó las lágrimas de los ojos y abrazó a su madre,quien intentaba no llorar.
-Helena,sabes que te tengo prohibido llorar.-Era irónico,ya que ella estaba intentando no hacerlo.
-Lo sé.-dijo suspirando mientras se separaba de ella.-Te quiero,lo sabes,¿no?
Esas palabras me revolvieron algo en el interior,aunque claramente no iban dirigidas a mi.
-Cielo,compórtate en el viaje,y ten mucho cuidado en Washington.-Asentí con la cabeza y la envolví entre mis brazos mientras olía su aroma una última vez.-Te quiero mucho.-dijo balbuceando.La apreté contra mi cuerpo y tras unos segundos nos separamos.Los megáfonos nos hicieron avisar de que quedaban 10 minutos para el despegue,y entre lágrimas nos separamos de ellos.Helena mordía su labio inferior intentando contener las lágrimas.Cuando doblamos una esquina y nuestras madres no nos veían,solté las maletas y la besé,necesitada de sus labios.Ella se sorprendió pero respondió a mi beso,con la misma avidez que los míos.Cuánto echaba de menos estos labios.Enrolló sus manos en mi espalda y yo en su cintura.
Cuando nos faltaba el aire nos separamos y ella respiraba intentando recuperar el aire.Sonreí y volví a coger mis maletas mientras nos dirigíamos al avión.Cuando nos sentamos en los asientos la observé fijamente mientras bostezaba.
-Pareces cansada.-Le dije.Ella puso una mano sobre su frente y asintió con la cabeza.
-¿Te puedo contar algo?-me preguntó.Me hacía gracia que no pudiera decir las cosas con soltura,tenía que pedir permiso antes de hacerlo.Asentí con la cabeza y pareció relajarse.¿Pensaba que le iba a decir que no?
-El otro día vi a mi mejor amiga-soltó un suspiro.-¿Es posible que una monja pueda convertirse en una salvaje en la cama?
Estallé en carcajadas mientras me miraba confusa.
-¿Qué hace tanta gracia?-preguntó confundida.Su cara era más motivo aún de risa.
-¿Eso le ha pasado a tu mejor amiga?-le pregunté intentando aguantar la risa.Sonrió ante mi pregunta y asintió con la cabeza.
-Ella era una monja.No quería saber nada de chicos,ni nada relacionado con ellos.¿Tú crees que puede cambiar de opinión tan radicalmente?
Tanteé su pregunta,y por una vez,quise ser serio.Aunque con su ingenuidad sería difícil.
-Yo creo que si.Un día llegará esa persona que te hace darte cuenta de que estabas perdiendo el tiempo,y te hacer abrir los ojos.Muchas veces piensas que estás haciendo lo correcto cuando vas al revés del mundo.Si,realmente puedes cambiar de la noche a la mañana de opinión.Y debe importante mucho esa persona para dejar atrás tus principios.
Sentí que todo lo que dije iba con segundas.No lo negaría.
Ella abrió los ojos un poco y pensó en todo lo que dije.
-Tienes razón.-dijo mientras volvía a bostezar.
-Deberías dormir.
-¿Podrías dejar de tener razón por unos minutos?-Sonreí y ella se acomodó en su asiento.

Y a los minutos quedó dormida sobre mi hombro.
Realmente Ryan no se da cuenta de lo que siente por Helena,eso me desquicia incluso a mi,¡qué soy la escritora!😹😹
Maratón 2/3
Muchas gracias a todos por leer ❤️❤️

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