Nuestra Loca Familia

XIII

Pasaban los días, lentamente. El tiempo de lluvias había acabado y no había muchas noticias de Arssax. La mayoría de los chicos ya podían leer un poco y escribían de vez en cuando para no perder práctica.

Los nuevos -Abril, Alfredo, Arturo y Jesús - ya se sentían como en casa, Abril pasaba algo de tiempo con Noah, ya que resultó ser parte de la tribu a la que ella pertenecía.

- Lee esa parte Noah. -indicó Esteban.

- Bien, pero aún me trabo un poco.
>> TU CAPRICHO Y TU EDAD, SEGÚN SE MIRE...

Tu capricho y tu edad, según se mire,
provocan tus defectos o tu encanto;
y te aman por tu encanto o tus defectos,
pues tus defectos en encanto mudas.

Lo mismo que a la joya más humilde
valor se da en los dedos de una reina,
se truecan tus errores en verdades
y por cosa legítima se tienen.

¡Cómo engañara el lobo a los corderos,
si en cordero pudiera transformarse!
Y ¡a cuánto admirador extraviarías,
si usaras plenamente tu prestigio!

Mas no lo hagas, pues te quiero tanto
que si es mío tu amor, mía es tu fama.<<

- ¿Quien escribió tan lindas palabras?-dudó Lara.

- William Sheakespeare. Es un escritor que ha estado dando mucho de que hablar en estos días.

- ¿Will-lliam Chekspire? -intentó pronunciar Abril.

El chico libero una risa algo baja pues el intento de Abril le había causado gracia. - No, William Sheakespeare.

- ¡Es lo mismo!

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- No importa dónde estés, te encontraré y te arrepentirás de haberte ido.

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Lara y Noah se lo pasaban muy bien juntos, hacían bromas, y eran casi los mejores amigos. Sí, casi. Noah descubrió algo extraño. ¿Qué le pasaba? ¿Estar cerca de Lara le hacía daño? ¿Por que sentía como si los mismos dioses tuvieran una batalla ridículamente colosal dentro de su barriga?

¡Que le quería dar diarrea! Sí, sí. No podía ser otra cosa, no señor. Sí, que la sopa de raíces le hizo algo en la barriga.

- Hace dos meses de tu "diarrea". No, no estás enfermo. Estoy seguro que es algo más.

- ¡Que te digo que es diarrea!

- ¿De qué hablan chicos? -interrumpió Esteban.

- Dice que tiene diarrea, pero eso le pasa desde hace meses. Y sólo le pasa cuando está con Lara. -respondió Jonathan.

Esteban sonrío. - Nunca lo había oído de esa manera. -dijo.

- ¿Qué? ¿La diarrea? Es una enfermedad del estómago que hace que no puedas parar de...

- ¡Ya está bien! ¡Que sí sé lo que es la diarrea!

- ¿Entonces? -preguntaron juntos.

- ¿Sientes algo raro en el estómago, sólo cuando estás con ella? -Noah asintió. - ¿Te pones nervioso al hablar con ella? -volvió a asentir. -¡Ah! ¡Estás enamorado!

¿Enamorado? ¿Él? ¡Pamplinas! ¡No, no, no y no!

- ¡Pero que estás loco! ¡No estoy enamorado! ¡Bah! -respondió Noah. - ¡Jamás me fijaría en alguien como ella! -Justo al decir eso, Jonathan y Esteban hicieron una seña con sus manos, disimulando un corte en el cuello, tratando que Noah cerrara el pico de una vez. - ¿¡Qué tantas musarañas hacen con las manos!?

Un suspiro triste sonó detrás de él. Giró lentamente, para toparse con la mirada triste de Lara.

¡Ups!

- Yo... he... voy a buscar a las chicas...

- ¡Lara no quise...!

- No importa. -y sin más corrió lejos del sitio donde estaban los chicos.

... t(•-•t)...

Hasta aquí el capítulo😉.
Los amo, hasta la siguiente😘