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La tire a la cama y seguí penetrándola.

-T-te gusta eh!?- dije gimiendo un poco.

Solo me respondió con un gemido y enterrando sus uñas en mi espalda.

Al otro día ...

Ok, primer día de trabajo... Y para ser sincero no lo pase nada mal la noche anterior. Ojala que no se lo tome como que estamos saliendo o algo... Solo un polvo rápido y ya

Me puse algo simple y salí rumbo al metro porque como aun no tengo un muy buen estado económico debo de viajar en metro.

Ya dentro del metro, unas cuantas estaciones mas y llego, mientras tanto jugaba a no-se-que en mi móvil... Un maldito Alcatel.

La pobreza no da para un iPhone hermano.

Llegue a la estación y baje, otra vez caminar las interminables diez cuadras para llegar a mi nuevo trabajo. Pero la ansiedad no ayuda mucho que digamos.

Compre un café para mantenerme caliente, ya que el frío no servía de mucho. Después de que me lo dieran, camine lo poco que faltaba hasta el edificio "Jobs". Una vez que entre me sentí extraño... Como si mi vida cambiaría con tan solo entrar a este edificio.

-Vaya vaya azulita - dije riendo mientras veía a la chica

-Que quieres imbécil?- respondió de mala manera.

-Pense que una cría como tu debería de estar en la escuela o jugando con barbies. - dije burlón.

-Pense que los retrasados mentales estaban en lugares especiales - dicho eso, se fue a no se donde.

Ganas enormes me dieron de darle un golpe en la cara... Pero como me enseñó la put... Mi madre "-no debes de golpear a las mujeres o seras un maricón de mierda-"

Subí por el ascensor hasta el piso 69, donde estaba mi oficina si se le puede llamar hací. Salí y fui hasta la mi oficina que la verdad era mas grande que mi casa... Y unas vistas de la ostia.

-Wow...- dije una vez que cerré la puerta.

Reí al ver todo lo que tenia, todas mis cosas para hacer mis animaciones y la mejor vista de todas... Un gimnasio que dejaba ver unos culos de las tías que dios... Me ponen en un instante.

Me senté en mi silla y aun no puedo creer todo lo que tengo delante de mi.

Siempre había querido tener uno de estos, y al fin lo tengo, delante de mi y todo mio

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Siempre había querido tener uno de estos, y al fin lo tengo, delante de mi y todo mio.

Busque los informes y no había ninguno. Busque nuevamente en esa mesa y ningún papel.

Tome el teléfono y llame al señor Jobs.

-Jobs- respondió

-Hola señor Jobs, soy Ruben Doblas y le llamaba porque no tengo ningún informe en mi mesa y hací no puedo hacer mis animaciones

-_______ te los ira a dejar en un momento, que tengas un buen día

-Igual señor. - dicho eso corte.

_______ era la chica de pelo azul verdad? No me jodas que también trabaja aquí...

Con la sillas me di vuelta para mirara por la ventana el gimnasio, específicamente los culos y a decir verdad son muy buenos.

-Deja de mirarles los culos y ponte a hacer tu trabajo Señor Doblas - dijo una voz femenina

Me di vuelta y me encontré con azulita que ya no era azulita, solo las puntas nada mas

Me di vuelta y me encontré con azulita que ya no era azulita, solo las puntas nada mas

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-Acaso te pintaste el cabello de café?- le mire con los ojos abiertos

-Noooo me lo pinte rosaaaa que no vez cuanto rosa tiene mi cabello?- tomó un mechón de su pelo y me lo mostró - pensé que podías ser mas inteligente - dijo ya yéndose

-Y yo que no cambiarias por un hombre - Sonreí de lado

-No cambie por nadie, acaso ya no puedo cambiar de estilo sin que la gente me diga que cambié por alguien?!- dijo un poco furiosa

-No te enojes enana, que fue una broma... Si estas con la regla y por eso estas enojada...- bromeé

Se acerco a mi de una manera agresiva, me iba a levantar pero me empujo. Se quedo parada frente mio y con un dedo me señalo.

-No es necesario para una mujer que para cuando se enoje específicamente tenga que tener la regla, hací que mejor cierra esa boquita y si vuelves a hablarme hací te daré el golpe de tu vida y jamas en tu mierda de vida podrás tener hijos. Entendido? - lo ultimo lo dijo con una sonrisa amigable

Asiento rápido con un poco de miedo.

-Muy bien - aún parada solo bajo su espalda quedando cara a cara - no te conviene tratarme mal Doblas...

Yo no le escuchaba, solo veía por dentro de su camiseta su sostén y un poco sus pechos.

-... Entendiste?-

Asiento otra vez y ella se levanta, rápidamente cubrí mi erección y ella con una risa burlona se me quedo viendo

-Se que no me escuchabas y que solí veías dentro de mi camiseta, al parecer la misión ponerte duro funcionó - dicho eso se fue

Hija de...

Cerré mis ojos y respire profundo. No me pajeare por culpa de esa putilla, sólo me calentó por querer.

-Ah y por cierto!- apareció nuevamente en mi puerta - que tengas unos bonitos días aquí en la empresa - sonrió y se fue.

Que bipolar esta tía.

Cuando me calme ya, comencé a hacer las animaciones por como me decía.

-Una serie animada para niños de tres años...- pensé en voz alta.

Comencé a hacer el boceto por mientras, veía la hermosa vista que tenia... Amo mi oficina.



®La Hija De Mi Jefe [Rubius Y Tu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora