Dentro de la época Joseon, el valiente príncipe Kim Mingyu finalmente se encuentra con su primer amor de una forma poco común, las familias se ambos los comprometen en matrimonio, Jeon Wonwoo aquel chico al que amo hace mucho tiempo volvio de manera...
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Wonwoo no podía dormir, esperaba a que Mingyu volviera, tenía la esperanza de que volviera, estaba inquieto, odia sentirse así.
-puedo enojarme, es mi esposo...- intentaba calmarse pensando en un sinfín de escusas, pero finalmente cedió a sus malas ideas, tomo su bata, y sus lentes paras salir, pensó decir que iba a la cocina si alguien lo miraba, justo cuando dio la última vuelta en el pasillo, se topó con Jeonghan de frente.
-santo dios! ¡Me asustaste! - dijo Jeonghan al ver a Wonwoo, venía con una bandeja con dos vasos de agua, al mirar su vestimenta mal arreglada, Wonwoo comenzó a imaginar lo que estaba haciendo. Sin poder controlarse soltó una dolorosa cachetada al chico de cabello largo.
-qué te pasa!!!! ¿¡Estás loco!?-Jeonghan había tirado la bandeja al suelo.
-eres un sinvergüenza! -
-no sé de qué demonios hablas! ¡Pero no puedes golpearme así!!- dijo Jeonghan empujando a Wonwoo y apretando sus muñecas.
-hey, que pasa!?- Seungcheol llegaba sosteniendo a Mingyu por los hombros ya que como siempre bebió de más y estaba ebrio.
-esta estúpida princesa que me golpeo! - Jeonghan seguía lastimando a Wonwoo.
-wonnie, eres tú? - Mingyu dirigió sus ojos a Wonwoo, tambaleante, mareado, con las mejillas rosas por el alcohol se acercó a el- oye déjalo- dijo apartando a Jeonghan.
-pues el empezó!!!-
-cheol? - el pequeño Jihoon asomaba la cabeza por la puerta, los gritos lo habían despertado. - que pasa aquí? - dijo al ver a Jeonghan en la escena, salió aprisa para llegar alado de Seungcheol.
-nada, ellos tienen un problema, venia ayudando al capitán- respondió tomando la pequeña mano de este entre las suyas, y alejarse de los revoltosos. - vamos a dormir- ambos desaparecieron por el pasillo.
-llévate a tu estúpido esposo, traía agua para Jisoo y me hiciste tirarla! ¡Debo volver! -
-está bien así Jeonghan- dijo una voz detrás de él.
-Jisoo! -
-algún problema? - Jeonghan y Wonwoo se miraron por un instante, Mingyu estaba increíblemente desubicado y mareado.
-no, luego te cuento, vámonos- respondió Jeonghan aferrándose al brazo de Jisoo.
-necesitas que lo lleve a su habitación? ¿O puedes tu solo? - pregunto antes de irse por completo.
-estoy bien, gracias- dijo Wonwoo serio. Al ver que ya estaban solos, Wonwoo miro como Mingyu estaba recargado en la pared con los ojos cerrados- ¡hey! Vámonos-
-mmm...a dónde? -
-como que a donde idiota, a que duermas, apestas a alcohol, donde estabas!?-
-en el jardín- Wonwoo dejaba que Mingyu de apoyará en sus hombros y comenzaban a caminar hacia la habitación.
-eres un idiota-
-y me odias, nada que no me hayas dicho ya Wonnie-
Como odiaba que Mingyu le llamara Wonnie, como odiaba esa cara de niño pequeño que ponía cuando lo hacía, era verdad que Mingyu era un año menor que el, pero odiaba verlo tan inocente, lo odiaba porque hacía que su pulso se acelerara.
Al entrar en el cuarto, dejo a Mingyu en un pequeño mueble y le lanzo una almohada y una sábana.
-que? - dijo Mingyu viéndolas
-dormirás ahí, no te quiero aquí hoy-
-qué? ...tssk buscare donde dormir- Mingyu aun mareado se levantó para salir, pero Wonwoo corrió interponiéndose en su camino.
-no te iras-
-oh Wonnie, eres tan bello como complicado...un día, me voy a cansar de tus juegos...-
-haa!? ¡De que hablas! Estas completamente ebrio-
-imaginas que...pasaría si me harto? No creo que te guste, en realidad no te gusto ahora, porque ¿no te gusto verdad? - dijo Mingyu acercando su rostro al de Wonwoo.
-por supuesto que no! ¡Te odio! ¡Te detesto! - respondía Wonwoo intentando escapar. Mingyu rio levemente, y algo sarcástico, paso su mano por la cabeza de Wonwoo, y finalmente dejo un beso en su frente. Después de eso, se dirigió al mueble se cubrió con la sabana y se dispuso a dormir.
-wonu!!!- un Mingyu de escasos 5 años de edad corría por el jardín de la gran casa de los Jeon. El pequeño Wonwoo estaba sentado en el pasto, jugando con las plantas.
-Min! ¿A qué hora llegaste? -
-llegamos hace un rato, mi mamá está dentro- respondió con una sorprendente sonrisa. Wonwoo siempre había sido un niño muy serio, casi no convivía con los demás niños, casi no salía de la casa, todo hasta que su madre le presentó a Mingyu, desde antes de que ambos nacieran sus madres eran cercanas, aunque Wonwoo no recordaba el nombre de ese pequeño niño, tenía él la vaga memoria de un juguetón niño de colmillos afilados con el que solía jugar.
Para Mingyu era distinto, el recordaba todo, cada detalle de lo que habían pasado juntos. Después de un tiempo, Mingyu se fue a estudiar al extranjero, y tiempo después coincidentemente Wonwoo igual; Mingyu ya no era el mismo niño pequeño, ahora era un hombre increíblemente guapo e increíblemente alto.
-lo siento- decía Wonwoo al haber tropezado con Mingyu en los pasillos del instituto. Este estaba ayudando a Wonwoo a levantar sus libros, le anti sus lentes y los dejo en la delgada mano de Wonwoo. Al verlo detenida mente, supo que era el, esa filosa y amenazante mirada de la que era dueño lo delataba. Simplemente se quedó mirándolo, prefería no decirle nada.
-gracias- dijo Wonwoo pasando por un lado de Mingyu son siquiera haberlo mirado.
Acostado en el sofá mirando hacia la pared, los recuerdos lo invadían, le dolía que Wonwoo le dijera esas cosas, estaba acostumbrado, sí, pero dentro de su corazón todo aquello lo hería, cuantas veces no pensó dejarlo en libertad, anular el matrimonio y dejar que se valla, Wonwoo siempre era estrictamente serio con él, eran nulas las ocasiones en las que se veía relajado, así que de la misma forma se comportaba Mingyu.
