Dentro de la época Joseon, el valiente príncipe Kim Mingyu finalmente se encuentra con su primer amor de una forma poco común, las familias se ambos los comprometen en matrimonio, Jeon Wonwoo aquel chico al que amo hace mucho tiempo volvio de manera...
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-entonces quieres matarme? Hazlo, mátame si es lo que quieres, si es para proteger a Mingyu estoy dispuesto...es lo menos que puedo hacer por el...-
-ohhh Wonwoo, siempre tan valiente, gracias por tu sugerencia, lo anotare, pero no, no quiero eso, lo quiero todo, su palacio, su poder, todo...quiero que sienta lo que yo, el desamparo, el abandono, la desesperación, esa soledad que te consume todos los días...al inicio me costó pensar que tendría que atacarte a ti...siempre te quise sinceramente, eres alguien muy importante para mí, así que tal vez te permita vivir como mi esclavo o algo-
-no deberías involucrar a más personas...Minghao, ese chico no tiene la culpa de nada...se meterá en problemas por ti-
-quiero lo mismo para él, quiero que comparta conmigo todo el poder, que vuelva a sentir que es alguien y no solo un sirviente más, él sabe que le conviene, así que con él no te metas-
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-hemos acordonado la costa su majestad- avisaba Soonyoon a Mingyu quien estaba vistiéndose con su traje de combate.
-prepara mi caballo, y dile a Seungcheol que esté preparado-
-como ordene...en el pueblo aún no se ha dicho nada, todos piensan que es seguridad de rutina...tampoco le hemos dado parte a la familia Jeon-
-no habrá necesidad...no demoraremos nada, no dejare que ponga un pie fuera- Mingyu hablaba de forma segura, si ya había perdido a sus padres, nada en el mundo le haría perder a Wonwoo también. - busquen en cada rincón de la cuidad, en cada casa si es necesario, no debe estar lejos. –
Una vez Mingyu había salido a buscar a Wonwoo con todo su equipo, no sin antes dejar muy bien asegurado el palacio, sabía que Jun deseaba el poder, así que no iba a arrojar a sus manos el patrimonio que su padre creo para ellos.
Dentro de la vieja y abandonada casa sobre la colina donde Jun tenia a Wonwoo, este había salido a vigilar que nadie se acercara, Minghao fue hasta Wonwoo para darle un poco de agua.
-esto no tiene que ser así Minghao...-
-lo se...lo siento mucho...- las manos del chico eran temblorosas.
-sabes que cuando esto termine estarás en problemas...-
-claro que sí, pero no encuentro como detener a Jun...el ya no escucha razones, el ya no es consciente de las cosas...pero no quiero abandonarlo-
-tu si, tu si puedes hacer la diferencia...el hermano de Jun ataco a Mingyu, lo torturo, casi lo mata...y todo porque, por la ambición... el hermano de Jun estaba mal... puede que tuviera sus motivos, pero hubo un momento en el que se perdió a si mismo...al igual que Jun...yo...yo quise mucho a Jun...sé que él no es así...pero también sé que el ya no tiene punto de retorno, si alma esta dañada-
-lo siento mucho Wonwoo...lo siento mucho-Minghao comenzaba a llorar de desesperación. Wonwoo se movió un poco hacia el para poder tomar su mano entre las suyas.
-no, no te preocupes, a mí no me importa lo que pase conmigo, quiero que no le haga nada a Mingyu...Mingyu es lo que más amo en la vida...solo quiero que el este a salvo...-
-yo...-Minghao aun con lágrimas en sus ojos observo a su alrededor para asegurarse de que Jun no estuviera cerca- quiero que te vayas...te ayudare-
-si me dejas ir, así como así, tú serás quien esté en peligro...tengo una idea, préstame un pedazo de papel...buscaras a Soonyoon, es la mano derecha de Mingyu, es un chico algo bajito, con los ojos muy rasgados, lo reconocerás en seguida, le darás esto...- Wonwoo escribía lo más rápido que podía con las manos atadas, le entrego la hoja a Minghao y este la escondió entre sus ropas.
-ya son amigos? Me alegra, pasaremos mucho tiempo juntos- decía Jun entrando a la habitación. - desde este lugar tengo muy buena visión del pueblo, parece que te buscan por debajo de las piedras...es una pena-Jun se dejó caer en el suelo, tomo un libro y ahí permaneció junto a Wonwoo, ni siquiera puso atención a Minghao, quien había salido por la parte trasera de la casa.
En la densa noche Minghao no cubría su rostro, sabía que no lo buscaban a él así que podía andar como cualquier persona en las calles, veía pasar los grupos de seguridad del palacio y ninguno era quien Wonwoo le había dicho, casi había recorrido todo el pueblo, y aun no encontraba a Soonyoon. Cansado y muy desesperado sentía que el tiempo se terminaba, hasta que tropezó por ir distraído mirando los rostros de los guardias.
-lo siento mucho, estas bien? - dijo aquella persona.
-lo siento...-Minghao hizo reverencia, al levantar su vista y encontrarse con aquella persona quien lo miraba preocupado supo que era el- tu...-
-yo? -
-tu nombre es Soonyoon?- dijo con un acento muy extraño.
-si...tú no eres de por aquí...- Soonyoon comenzaba a buscar con la mirada a sus compañeros, pues sospechaba de el por su conocido acento chino.
-no, toma...toma esto- extendió el trozo de papel a sus manos. Soonyoon lo tomo curioso.
-es de Wonwoo...yo...yo sé dónde está, vengo de ese lugar-
