【CDM】An Innocent Love【YAOI】

【Capítulo 5】

Narra Alexy:

—Eso es pura incertidumbre, simplemente no te das cuenta de lo que sientes —Dije mirando a mi querido hermano, que se encontraba sufriendo debajo de sus sábanas.

—En otra ocasión, seguramente te hubiese negado eso —Suspire, ¿Que se debe hacer cuando tu hermano no sabe lo que siente por alguien? Fácil, ¡Darle un empujón!.

—Armin, dime de quién se trata, tal vez te pueda ayudar —El pobre de mi hermano me miró con algo de pena.

—Esto... —Pausó unos segundos y me miró fijamente. —Primero diré que no se que me hiciste.

—¿Yo? Pero si el amor actúa solo, no me necesita —Sonreí tiernamente, Armin volvió a esconderse abajo de las sábanas.

—No es por eso... —Me quedé confuso ante sus palabras, realmente hay veces que me cuesta leerlo.

—¿Entonces? —Pregunté destapandolo para poder mirarlo, estaba hecho un tomate.

—Yo... —Pausó, se arrepintió. Lo golpeé con la almohada para que siguiese. —¡No puedo decírtelo!

—¡¿Que?! ¡¿Por qué?! —Lo golpeé repetidas veces más, luego el agarró la almohada y simplemente la lanzó lejos.

—Voy abajo, haber si logro concentrarme para jugar —Cerró la puerta con fuerza y sólo se escuchaban sus fuertes pisotones bajando la escalera.

—Bestia... —Murmuré para mí mismo, normalmente, un sábado como este estaría de compras con Sucrette, pero la verdad es que no la he visto... No me atrevo.

—¡Alex! —Sentí a Armin gritarme desde abajo, rodé los ojos y me dispuse a bajar la escalera, pero me llegó un mensaje al teléfono.

—¡Enseguida voy! —Grité para revisar el mensaje, me quedé en blanco cuando lo leí.

"Necesito que me ayudes con Sucrette, por favor, soy un asco en estas cosas del amor y tu eres muy inteligente y bueno en estas cosas. —Kentin."

—¡¿ES ENSERIO?! —Lancé el teléfono lejos, tal fue mi grito que Armin llegó a nuestro cuarto y me miró con preocupación.

—¿Que pasó? —Mis dientes llegaban a rechinar por la rabia que sentía en ese momento.

—¡Nada! —Grité, Armin me miró molesto.

—¡No me grites, idiota! —En ese momento reaccioné, estaba demasiado frenético, muy enfadado.

—Perdón... —Susurré arrepentido, Armin suspiró pesadamente.

—Bueno, quería decirte que están dando ese programa de las niñas que bailan, las mamás pelean y todo eso... ¿Lo quieres ver? —Me quedé algo perplejo, ¿Armin me ofreció ver "Dance Moms"? Definitivamente esa chica lo trae como bobo.

—¡Siii! —Grité infantilmente, él comenzó a reír y bajó las escaleras, eché un último vistazo a la habitación antes de bajar, no había rastro de mi teléfono, da igual. Me senté en el sofá a ver mi precioso programa, Armin estaba pegado a la consola, volvió a ser él.

—¡Oh si bitch! —Gritaba entusiasmado mientras hacía raros "Bailes de victoria". De pronto sentimos un teléfono sonar.

—¿El tuyo? —Pregunté muteando la televisión, Armin negó y siguió con su juego, ósea que es el mío. Subí las escaleras y encontré mi teléfono en el borde de la ventana... ¡Dios mío, casi me quedo sin teléfono! Corrí hasta él y lo abracé como si fuese lo más preciado en mi vida. Vi la pantalla, la cual me avisaba sobre un mensaje. Miré el mensaje.