Te diste cuenta de que podía vivir sin ti... aunque no era del todo cierto... ¿Recuerdas nuestras charlas? Yo era esa chica depresiva que vivía en si misma, con una autoestima pésima, un corazón hecho añicos y un mundo cruel que la lastimaba con su fría indiferencia, pero... apareciste tú, como un caballero de cuento, te quitaste tu armadura y me la diste. Desde entonces, siento que resisto los golpes, que no me cuesta andar, que puedo blandir mi espada y luchar por un futuro... Por eso sé que no puedo vivir sin ti... porque tú me proteges del mundo sin darte cuenta...
El problema viene... cuando la armadura se rompe, se astilla y te clavas los picos que sobre salen, haciéndote cortes, heridas y hasta cicatrices...
¿Ahora me comprendes, Dy?
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La chica depresiva. #Wattys2017
Short StoryDecías que eran mis manías las que me hacían especial, mis gustos diferente, y mi personalidad única... Decías que había que comprenderme, que era una gran amiga, y que necesitaba de alguien que supiera tenerme. Decías que era bonita, intelige...