SIN SALIDA 2

-Capitulo 37-

-Martes, Enero-

_ ¿Estás listo hijo?_ entando a mi habitación.

_No puedo cerrar el bolso_ tenso. _ ¿Me ayudas? _.

Mi papá se me acerco y me ayudó a cerrar el bolso. Cargue mi mochila y bajamos las escaleras.

_ ¿Cómo estamos con el tiempo? _le preguntó mi papá a mi mamá.

_Estamos bien. Es temprano todavía _ mirando el reloj de su celular. _ ¿Seguro que no vas a desayunar nada? _.

_Seguro ma_ dejando mi mochila en el piso. _Tengo miedo de que me caiga mal en el viaje_.

_Bueno, es mejor que vayamos yendo_.

No voy a negar que siempre me gustó la idea que Palo había tenido de llevarnos al Campo de su abuela, a la que ella iba los fines de semana. Ambos habíamos organizado la mayor parte de las cosas. Tuvimos ayuda por parte de sus padres, eso sí. Las actividades y todos los recorridos nos encargamos nosotros.

Una nueva experiencia, la íbamos a pasar genial. Después de que organizáramos todo, Ro armó un grupo de padres en el chat y comento la propuesta, a muchos padres les gustó como a todos les disgustó pero se sacaron todas las dudad y la mayoría accedió.

Todos teníamos en mente que la íbamos a pasar bien, estar alejados de la ciudad por dos días. Además de estar desconectados del colegio, ya que eran vacaciones, también de la tecnología y el sonido de los autos, camiones. Todo eso remplazado por el sonido del viento y los pájaros.

Llegamos al colegio veinte minutos antes de que el micro llegara. Bajamos del auto, la mayoría de los chicos habían llegado, mis papás me ayudaron a bajar el bolso mientras caminaba con la mochila. Veo a algunos de mis compañeros y me dirijo a ellos.

_Allá esta Palo_ les digo a mis padres. _Después vuelvo_.

_Hola chicas_ entrando a su ronda.

_Viniste Fran_ suelta Flor, abrazándome.

_No me lo iba a perder por nada_ entre risas.

_Ya quiero estar en el micro_ comenta Lula.

_ ¿Ya tienen los grupos de las carpas? _pregunta Palo. _Los tengo que anotar_.

_ ¿Se acordaron? _preguntó Celes.

_Me olvide_ frustrado. _Tenía que hablar con Eze y se me pasó. Poneme con el_.

_Ya tiene grupo Fran_ con una mueca en su rostro.

_Está bien_ buscando otra alternativa. _Voy a hablar con los chicos. Espérenme_.

Eso sí que no lo podía creer. Estaba con Palo, comiéndonos las uñas de las manos y de los pies, tratando de organizar todo para que saliera de la mejor manera y el no me había incluido en su carpa. Esto si me había enojado un poco. Por ahí se olvido y se le pasó. No quería preocuparme por nada, estos días era para reamar amistades y fortalecer otras. Relajarse y no pensar en nada malo.

_Agus_ viéndolo con su grupo de amigos.

_ ¿Cómo estás amigo? _sonriente.

_Bien_ contento de verlo. _ ¿Tenes grupos para las carpas? _.

_Llegaste justo_ me dice, dejándome tranquilo. _Recién se bajo uno de los chicos_.

_Genial ¿Puedo entrar? _tenso.

_ ¿Pero Eze? _confundido.

_Ya tiene grupo con sus "amigos"_ haciéndole señas con los dedos, como lo hacía en Primaria. _Espero que podamos volver a lo de antes_.

_Yo también_ con un leve gesto.

El micro había llegado. Todos salimos corriendo hacía el, emocionados y eufóricos. El día había llegado y al ver el micro había caído en la cuenta de la realidad. Dos días de pura diversión.

Mientras los padres se ayudaban a cargar los bolsos, nosotros nos despedíamos de nuestras familias. Algunas emocionados y otros no tanto, sabían que íbamos a estar en buenas manos, pero igual se preocupaban y angustiaban.

_Gracias por dejarme ir_ después de abrazarlos. _Los amo_.

_Divertite_ me dijo mi madre, con una sonrisa.

_Ya sabes_ me dice mi padre, en broma. _Si escuchas un ruido a la noche, son las vacas_.

Me rio.

Trato de buscar a alguien con quien sentarme, la mayoría estaban ocupados, pero no le daba mucha importancia. Me siento con uno de los amigos de Ezequiel, no lo conocía. Lo saludo y me pongo los auriculares, esperando a que el viaje se pasara rápido.

No hablaba con nadie, veía que algunos hablaban con sus compañeros de asiento. Eso me pasa por subir último, pude haber subido antes y sentarme con otra persona y poder hablar. Pero como ya había dicho, no me molestaba.

_Estamos llegando_ nos avisa Ro.

Todos comenzamos a aplaudir y a gritar. El mejor momento de nuestras vidas estaba llegando, era como si nos fuéramos de viaje de egresados otra vez. Llegamos al establecimiento, era un lugar enorme, pasto desde que empezaba hasta que terminaba. Repleto de arboles y animales. Nada que ver con la ciudad, todo lo contrario y todo más tranquilo. Desde lejos se veía un gran molino, me encantaba. Por el otro lado unas extensas vías del tren. Quien sabía a qué hora pasaba.

El micro estaciona, abren las puertas y nos hacen bajar.

_Bienvenidos chicos_ nos recibe una mujer de mayor edad.

_Chicos quiero presentarles a mi mamá_ nos die Ro, después de abrazarla. _La abuela de Palo_.

_Díganme Oti chicos_ sonriente.

_Gracias por dejar que nos quedáramos Oti_ dice Celes.

_Es hermoso_ comenta Lula.

_No hay problema chicos_ agradecida. _Espero que se diviertan_.

La mayoría había tomado sus bolsos y mochila y las bajaban del micro. Estábamos asombrados por el lugar en el que nos íbamos a quedar. No podía creerlo, con solo verlo lo disfrutaba.

_Que paz, ¿No? _ me dice Mili.

_Es impresionante_ afirmo.

_ ¿Al final tenes grupo de carpa? _pregunta.

_Con Agus y otros chicos_.

_ ¿Qué pasó con Eze? _curiosa.

_Mejor hablemos de otra cosa_ con risas irónicas.

_Si quieren pueden empezar a hacer las carpas acá_ nos enseña Ro. _Después están libres_.