-Capitulo 22-

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Todo era muy similar, con la diferencia que la habitación no era la dirección y estaba recostado en un diván.

_Decime Franco_ empieza a decirme, seleccionando unas imágenes antes de enseñármelas. _ ¿Qué ves? _.

_Nada_ sincero, tragándome la risa. _Absolutamente nada_.

_Tranquilo_ sin mover la imagen. _Cerra los ojos, respira profundo y volvelo a intentar_.

Le hago caso. Cierro mis ojos, respiro profundo y libero mi mente de cualquier pensamiento. Abro los ojos y vuelvo a ver la imagen.

_ ¿Ahora? _.

_Una mancha_ sin saber lo que significaba.

_Está bien_ mirándome a los ojos. _ ¿Qué significa para vos esa mancha? _.

_ ¿Algo que está mal en mi vida? _intento adivinar. _ ¿Un problema? _.

_Bien_ anotando en su libreta. _ ¿Hay algo que haya pasado en tu vida, algo que tengas que arreglar o ayudar a alguien? _.

_No se_ esforzándome demasiado. _Pienso es todas las cosas que pasaron estos días y no encuentro nada malo_.

_Entonces puede que esté por pasar_ me explica. _Algo que tengas que solucionar_.

Mira el reloj y se sorprende por el horario.

_Creo que terminamos por hoy_ guardando las cartas en su bolso. _Gracias por haberme llamado_.

_Gracias Silvia. Por haberme aceptado_.

_Hasta la semana que viene_ sonriente.

Salgo del consultorio, mi madre había llegado a tiempo para buscarme.

_ ¿Cómo estuvo? _.

_Estaba nervioso, pero salió todo bien_ con una leve sonrisa en mi rostro. _Gracias_.

_Si te hace sentir cómodo_ me dice, guiñándome un ojo.

No era mi primera vez con Silvia, pero esta vez sentía que las piezas empezaban a encajar en el rompecabezas. Tenía que agradecerle a Flor por haberme convencido. No era un momento en el que estabas en tu casa, solo y escuchabas música para tranquilizarte. Hablar con alguien que no te conoce y te ayuda a derribar todos los obstáculos era mejor que ver la lluvia desde mi ventana.

_ ¿Cuándo vamos de la abuela? _pregunté.

_Hoy me llamó_ mientras manejaba hasta casa. _Nos espera el Sábado_.

_Genial_ sonriente. _La extraño_.

_Yo también hijo_ doblando en la esquina. _Yo también_.

Era mi mejor amiga, no podía dejar de verla nunca. Los momentos con los abuelos eran aquellos que nunca quería borrar de mi mente. Aquellos abrazos, juegos y risas. Hasta cuando me retaban si rompía algo. Todo recuerdo valía la pena.

(CHAT DE FLOR)

En línea

-Flor, ¿Cómo estás?-

-Fran. Qué bueno que me escribís-

-Todo bien. ¿Cómo te fue con Silvia?-

-Creo que bien-

-Contame-

-Ya sé que queres saber todo, pero me dijo que no puedo contar lo que pasa en las sesiones-

-Perdón-

-No te preocupes, con que me digas que todo salió bien me quedo tranquila-

-Sí, ahora tengo que reflexionar, pensar y solucionar un par de cosas para sentirme mejor-

-Es bueno saberlo-

-Se que te lo dije miles de veces, pero gracias por convencerme-

-Es lo poco que podía hacer. Espero que las cosas mejoren de a poco-

-Espero lo mismo-

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SIN SALIDA 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora