Recuperando mi vida de ensueño

Capítulo X - Sabíamos que iba a pasar

Nos faltó razón, nos sobró la ropa 

Nos venció el alcohol todo se incendió,

 bajo aquella luz de una noche loca,

Las mentiras sabían mejor, sabían mejor.

Nos sobró la ropa - Malú

Estaba en mi aula, las clases habían terminado hace un rato, pero yo tenía que quedarme a preparar algunas cosas para el próximo día de clase. Me encontraba en mi escritorio mirando unos libros cuando escuché que alguien llamaba a la puerta.

- Adelante. – Dije poniendo un lápiz entre las hojas para no perder el punto donde estaba.

- Hola, soy el abuelo de Alba Barrios.

- Ah sí, pase ¿Ha ocurrido algo?

- No, es solo porque quería hablar de ella, he visto que no saca muy buenas notas a pesar de que sea una niña excelente.

- Lo es, Alba es una niña buenísima, pero se distrae mucho y por esa razón nunca llega a terminar sus tareas de clase y las entrega sin terminar, esa es la causa.

- Ya, pero si ve que lo hace, creo que necesita una mejor nota, ella sabe hacer las cosas, simplemente no lo termina.

- Ya, pero si le pongo una nota alta, aunque no termine su trabajo va a aprender que, aunque no termine las cosas, puede conseguirlo todo.

- No es así señorita.

- Sí, es así.

- Mire... mi nieta merece una mejor nota y se la debe poner.

- ¿Disculpe? Yo debo poner la nota que consiguen mis alumnos, si alguno de ellos por muy bien que sepa hacer las cosas, me entrega los trabajos incompletos no le voy a poner mayor nota.

- Discúlpeme usted a mí, pero le recuerdo que parte de su sueldo sale de mi bolsillo, así que, si yo le digo que tiene que poner más nota a mi nieta, ha de hacerlo.

- No me venga con eso, porque mi sueldo no sale solo de su bolsillo y yo hago lo que debo, poner una nota más alta no va a ayudar a su nieta.

- ¡¡Le vengo con verdades!! Estoy diciéndole que le ponga la nota que se merece ¡Mi nieta!

- No me levante la voz.

- ¡¡Se la levanto porque puedo!!

- ¡¡¿Y por qué puede?!! ¡¿Por qué paga parte de mi sueldo?!

- ¡¡Pues claro!!

- Oh por favor, No voy a tolerar esto en mi aula, ¡¡Váyase!!

- ¡¡No me pienso ir hasta que no le ponga la nota que se merece mi nieta!!

- Su nieta tiene la nota que se merece, ahora por favor fuera.

- ¡¡No!!

- ¡¡He dicho que se vaya!!

- Si fuese un profesor hubiese recapacitado y aceptado lo que he dicho, pero la modernidad manda... ¡En casa esperando a tu marido tendrías que estar!

- ¡¡Ahora sí!! – Me levanté y fui hacia la puerta. - ¡¡Fuera de mi aula!!

- ¡¡No pienso irme!!

- ¿Alice pasa algo? – Dijo Fran apareciendo por la puerta.

- Este señor que no quiere irse.