Recuperando mi vida de ensueño

Capítulo XXVII - casi todo mejora

pero empiezo a sentir que todo va ir bien 
todo va ir bien 
que todo va ir bien 
si te quedas aquí conmigo  

Todo va a ir bien - Sethler

Un nuevo día comenzaba, hoy tocaba hacerme el test de embarazo, la comida familiar de ayer me había animado bastante, Javi no paraba de decirme que tenía el presentimiento de que esta vez iba a ser positivo pero yo no quería pensar eso, si me creaba más ilusiones y luego resultaba negativo iba a desanimar me mucho más todavía, así que prefería seguir pensando en que seguramente volvía a salir negativo, que aunque me doliente igual no sería lo mismo.

- Buenos días. – Dijo Javi saliendo del baño, secándose el pelo con una toalla.

- Buenos días. – Dije yo esperezándome.

- ¿Cómo has dormido?

- Bien ¿Y tu?

- Bien. – Dijo sonriendo. -¿Nerviosa?

- Un poco... pero tengo ganas ya de ver el resultado.

- Para eso tienes que hacerlo primero así que...

- Voy. – Dije sonriendo y levantándome seguidamente. Hice el proceso que ya había hecho tantas veces y salí con el predictor en la mano, para esperar el resultado.

- ¿Lista? – Dijo Javi cuando pasaron los minutos cogiendo el predictor, suspiré.

- Sí, cuanto antes lo sepa mejor. – Dije esperando la respuesta negativa, cosa que... - Espera... Eso, eso es... ¡Positivo! – Me tiré a los brazos de Javi y este me estrechó entre ellos, nadie decía nada, estábamos procesando todo, después de meses por fin habíamos obtenido el positivo, por fin íbamos a ser padres, por fin tenía algo creado a partir del amor que nos teníamos los dos dentro de mi... Fue imposible contener algunas lágrimas de felicidad que resbalaron por mi mejilla.

- Un hijo o hija de los dos... - Susurró Javi. – Por fin, mi presentimiento era real.

- No me lo creo Javi... al fin. – Dije sonriendo. Este posó una mano en mi vientre y yo la puse sobre la suya.

- Ahora tienes que cuidarte el doble de lo que lo hacías, sobretodo estos primeros meses.

- Lo sé, solo faltaría que con lo que nos ha costado... mejor no pensarlo.

- No, no hay que pensar en eso.

- Sobre decírselo a los demás...

- Cuando tu lo veas mejor.

- He pensado en hacerlo cuando vayamos al médico y nos diga que todo está bien.

- Perfecto.

- Voy a llamar luego para pedir hora, cuanto antes vayamos antes sabremos como va todo.

- Muy bien, pues hasta entonces no diremos nada, así que hay que ser discretos.

- Espero que se nos de mejor que antes. – Dije riéndome.

- Más nos vale. – Dijo riéndose igual que yo.

- ¡Vamos a ser papis! – Dije volviendo a abrazar a Javi, esta vez sin derramar ninguna lágrima de alegría, simplemente con una sonrisa que no cabía en mi cara.

Había pasado una semana, nadie sabía todavía nada, de momento lo llevábamos en secreto. Estábamos de camino al ginecólogo para ver como estaba todo, no sabíamos de cuantas semanas estaba así que queríamos confirmarlo, para poder programar las primera visita de las seis semanas y esas cosas.