Observador. [LUMIN/XIUHAN]

Anécdotas

Todo era perfecto en su relación. Iban juntos a todas partes, tomados de la mano, besos y abrazos. Pasaban las tardes bajo el árbol leyéndose libros, uno leía en voz alta mientras en otro descansaba en sus piernas. Mensajes de "buenas noches", "te extraño", "ten un bonito día"... 

Se la estaban pasando de maravilla juntos, como siempre pero ahora aún más. 

Un domingo como cualquiera, Luhan luego de recibir un mensaje de vuelta de su novio que decía "buenas noches Lu, descansa", con una sonrisa dejó su celular en la cómoda junto a su cama y se enrolló en sus blancas sábanas pensando en lo feliz que era.

Después de todo esperar tanto si que valió la pena... 

La semana anterior habían ido al río Han, donde disfrutaron de las luces de colores silenciosamente. Rieron como dos típicos idiotas enamorados. Risas que terminaron en dulces besos y suaves caricias. 

También fueron a la playa, donde Minseok llenó a Luhan de protector solar. Esparcía con cuidado por la espalda, cuello y hombros de su novio. 

-¿No crees que ya es suficiente?-Sonriente- Ya casi te acabas la botella, también debes ponerte tú.

-No, no, no. ¿Qué haremos si te quemas? Te dolerá mucho.

Por supuesto, el rubio llenó de besos al pequeño como correspondía después de hacer ese acto tan adorable.  

Ese día Minseok descubrió que Luhan no sabía nadar así decidió ser su entrenador. 

Minseok sosteniendo las manos de Luhan mientras este trataba de patalear, imaginen esa escena. Parecía un padre enseñando a su hijo, o más bien un hijo enseñando a su padre. De cualquier manera era fascinante. 

También fueron a clases de piano juntos. Querían a fin de año ya poder tocar hermosas canciones con 4 manos. 

Para el cumpleaños de Luhan, Minseok le cantó "Stronger". 

"Tu siempre estuviste ahí para mi, 

sostuviste mi mano,

cada vez que falle, cada vez que caiga

dame fuerzas y me volveré más fuerte"

Y le regaló una pequeña caja donde había un plateado anillo con las letras L y M grabadas. 

También fueron al parque de diversiones. Se subieron a la montaña rusa, donde Minseok quedó algo pálido debido a las vueltas, de igual forma lo pasó bien ya que tomó con fuerza la mano del rubio todo el viaje. 

Al minuto de la rueda de la fortuna, Luhan parecía asustado ya que odiaba las alturas pero el rostro sonriente de Minseok lo incitó a subirse. Evidentemente adentro no hubo muchas palabras luego de que se cerrara la puerta. Al principio fue para distraer al alto de su miedo pero continuó solo fue porque deseaba hacerlo. 

Habían tenido muchas peleas como cualquier pareja, pero ninguna pudo con ellos.

En el cumpleaños de Minseok, Luhan preparó una linda sorpresa. El pelinaranjo una vez había dicho que que le encantaría ir a la nieve con él y pues deseo concedido. Junto a los padres de Luhan, fueron a unas bonitas cabañas que no se hallaban tan lejos. Sus padres en una, ellos en otra. 

Fue como un sueño hecho realidad el estar juntos frente a la típica estufa tomando chocolate caliente. ¿No era un sueño, verdad? Minseok varias veces se pellizco las mejillas para cerciorarse de que no lo era. 

Todo era tan cuento de hadas, simplemente increíble para ambos. Se preguntaban si merecían tanta felicidad, seguramente no, pero aún así disfrutarían. 

Con enormes abrigos salieron a jugar. Hicieron ángeles y muñecos de nieve, guerra de bolas de nieve, trataron de hacer ski pero ambos fallaron. Terminaron dando mil vueltas pero felices.

Al final del día, era hora de dormir. No iba a hacer la primera vez que dormían juntos pero aún así era especial. Sinceramente, Luhan odiaba compartir la cama pero cuando se trataba de Minseok esto se contorsionaba. 

-Gracias por todo...

De vez en cuando se juntaban con los amigos que habían hecho juntos en el instituto, Yixing, Jongdae, Kyungsoo y Jongin. Pasaban una buena tarde de vídeojuegos o de fútbol. 

La navidad no impidió que estuvieran juntos. La tía de Minseok fue donde sus hermanas mientras este se quedó con los Xiao. Después de la cena, ambos salieron a dar una vuelta. Se fueron a su árbol a ver las estrellas. Se tiraron al pasto mirando el cielo.

-Que rápido pasa el tiempo cuando estoy contigo...-Susurró Minseok

-Demasiado rápido... ¿Qué haremos? Nos queda poco tiempo. -

El pequeño se acercó a su novio y comenzó a acariciar su rostro mientras lo miraba con pena.

Luhan realmente odiaba que le tocaran el rostro pero cuando Minseok lo hacía era completamente placentero. ¿Qué clase de magia usa? 

El rubio quiso borrar esa triste mirada jugando un poco. 

-No pensemos en eso, no ahora. ¿Si?

-Está bien... Luhan.

-Dime.

-Si te dijera que creo que te amo... ¿que pasaría? 

-Te diría que le quites la palabra "creo".

-Te amo. 

...

-También te amo.