Sentimientos

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Y el sábado llegó. Eran las 10:35 a.m. y Luhan estaba enredado entre sus sábanas. Recién había despertado. La razón del termino de su sueño fue una corta vibración que vino de su celular. Paso sus manos por sus ojos, se estiró y dio un largo bostezo para luego agarrar el móvil que se encontraba al lado, en una cajonera. Con notable pereza pone el patrón y lee: Mensaje de Kim Minseok~

Casi le da un infarto. Lo aprieta y dice:

Hola, lamento si es muy temprano, pero quería decirte que estoy muy agradecido contigo por esta semana.
Espero que no te moleste este mensaje...
Bueno, adiós, ten un bonito día...

Estaba realmente conmovido. Su corazón latía fuertemente. ¿Por qué sólo un mensaje lo ponía así?

No hay por qué, yo te agradezco de vuelta. Obvio no me molesta, puedes hablarme cuando quieras. :) ten un bonito día también...
Y enviar.

Luego de mandar el mensaje, su pregunta volvió. ¿Por qué se siente así?

Minseok de repente apareció en su vida y alborotó todo, su cabeza, su corazón... 5 días bastaron para que Luhan cayera totalmente por aquel pequeño ser, aunque la verdad aún no podía creerlo. Antes era sólo chico aburrido de su vida, sin emoción alguna. ¿Serán solo las hormonas? Pensaba. El realmente era inexperto en estos temas, sin embargo no quería ayuda. Al parecer era su "primer amor", o tal vez no, tal vez era demasiado pronto. Pero comenzó pensar... ¿No será que Minseok es endemoniadamente bonito la razón de que le cause estos sentimientos? Es decir, que quizá cause el mismo efecto en muchas personas. Eso debe ser. Trató de convencerse a sí mismo. O sea, esos ojos de gato y esos diminutos labios ponen nervioso a cualquiera.

Su cabeza estaba a punto de explotar. Había pensado demasiado en el tema. Se sentía raro, hacía movimientos raros con sus manos que mostraban su inquietud. Necesitaba aire, por lo que decidió salir un rato. Después de desayunar, agarró su gastada mochila, puso como siempre, sus libros, sus llaves y su billetera y partió.
Automáticamente fue rumbo al árbol, aquel árbol donde conoció a Minseok. El día estaba soleado pero había mucho viento. Perfecto para leer.
Iba prácticamente corriendo puesto a que estaba acelerado. Al llegar y ver el árbol vacío soltó un suspiro. Por alguna razón pensó que Minseok podría estar ahí.
Quizás se preguntarán por qué fue directo hacia allá existiendo la posibilidad de que Minseok estuviera ahí, siendo que este quería calmarse, cosa que era imposible estando la presencia del bajo. Podríamos pensar que ese día la lógica simplemente había abandonado el cerebro de Luhan, pero la única verdad es que moría por verlo. Lo extrañaba monstruosamente.

Decepcionado, tira su mochila en el húmedo pasto y se sienta para recuperar un poco el aliento. Después de calmarse, coge su mochila y elige leer uno de los textos que Minseok le había recomendado. Como de costumbre, apoyó su espalda en el tronco y posteriormente comenzó a leer, o al menos eso pretendía. Minseok atacaba su mente distrayéndolo de las amarillentas páginas. Empezó a recordar lo ocurrido en casa del pequeño, en el clóset. Sus mejillas se volvieron rojas en menos de dos segundos, junto a sus orejas. Recordó su olor, su respiración, el tacto entre sus piernas... Luhan se rindió. Puso el libro en su mochila y colocó todo su cuerpo en el pasto, mirando las hojas del árbol y el cielo. Entre cerrando los ojos, miró al sol. Inmediatamente por su cabeza pasó la sonrisa de Minseok, era más radiante que el sol. Sentía presión en su pecho, como agujas en el corazón.

Minseok... ¿Es que acaso me he enamorado de ti? ¿Por qué me has hechizado tan rápidamente?

Con lentitud, sus párpados fueron subiendo y bajando hasta que dejaron de moverse. Se había dormido.

Para cuando despertó, no solo el cielo estaba oscureciendo, si no que estaba acompañado. Asustado, Luhan se levantó de un salto y vio a Minseok, en la misma posición que el, observando las nubes a su lado.

Eres lindo cuando duermes.









Observador.  [LUMIN/XIUHAN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora