Tu luz (Joel Pimentel, CNCO). >EN EDICIÓN<

CINCO

Un día, en sólo un día veré a Joel nuevamente. Sasha no había parado de hablar sobre él, unas horas atrás Joel me pidió el número de Mamá en un mensaje y eventualmente también convenció a Sasha de no buscar fotos de CNCO. La curiosidad me mataba pero tenía que cumplir mi palabara, tampoco podía fallarle a Joel. Erick me había escrito para desearme un buen día, y su "Nos Vemos Pronto" me alegró temporalmente hasta que me di cuenta que nunca me dijo cuando sería "pronto" ...

Sarah y su familia se habían marchado, Mamá no paraba de repetir lo adorable que nos vimos Joel y yo cantando "Pero Zaphir, la conexión fue tan notoria... Pueden llegar a ser muy buenos amigos, si sabes a que me refiero."  imité su burlona voz en mi cabeza, Mamá de vez en cuando era más una amiga molesta que una Madre, lo cual para mí es perfecto.

Me recosté en mi cama, mirando la puerta. Es increíble la manera en la que tu vida puede cambiar de un día o otro por una persona... O más bien, cinco.

Zabdiel con su sonrisa sincera y su cariño y atención.
Erick con su coqueteo natural, realmente dulce.
Christopher con su atención, y su agradable sentido del humor.

Richard con su chispeante personalidad.

Y Joel... Joel con su sonrisa, su preocupación... Mi corazón se alegraba sólo de mencionar su nombre. 

Tomé mi celular, no tenía mensajes nuevos... Algo en mí se sintío vacío. ¿Los etrañaba? Quizás. ¿A quienes? Era tan obvio... 

—Adoro a Joel, por fin veré a CNCO en persona, gracias a él... Cuando los conozca me aprenderé los nombres. —Musitó Sasha entrando a mi habitación y acostandose a mi lado.

—Eres la peor fan que conozco, no te sabes sus nombres. —me burlé, me miró ofendida y no evité reir. 

—¿Cuántos años tiene Joel? —preguntó. 

—Los mismos que yo, dos más que tú. —algo en mi tono de voz sonaba receloso.

—¿Y si le gusto? 

—No sé. —Contesté molesta, empezó a reir.

—¡Te gusta!—exclamó aplaudiendo. —¡Lo Sabía! 

—Basta. —su burla logró molestarme aún más, sobre todo avergonzarme. 

Sasha no paraba de reir y y eso sinceramente me estaba molestando más y más, salí de mi habitación tal vez botando humo por las orejas. Repasé nuevamente sus palabras, quizás tenía razón.. O quizás era algo del momento, un desorden hormonal. No sé como fui a parar junto al piano de Papá, se veía hermoso, los años vagamente se reflejaban en el. No recordaba a Papá tristemente... Su recuerdo siempre me hacía sonreir. Siempre me he sentido agradecida del tiempo que compartí junto a él, de todos los conocimientos que me brindó, de todo el amor incondicional que me regaló. Toqué algunas teclas del adorado piano, recordando el momento junto a Joel... Jamás lo olvidaría, y ahora siempre lo tendría en mi mente. Suspiré  —ya calmada— y me dirigí a la habitación de Mamá. 

—Es tarde cariño, mañana tienes una cita. —la miré estrechando los ojos. — Perdón, mañana irás a una presentación íntima del grupo que Sasha adora, con tu amigo Joel. — sonrió mostrandome sus cuidados dientes. 

—Como digas, Mama. — alcé las manos. —Creo que estás mayorcita para que te guste Joel. — reproché intentando burlarme. 

—Es a ti que te gusta, cariño. —eso fue totalmente un balde de agua super, hiper, mega fría en mi espalda.

—¡MAMÁ! —abrí los ojos sorprendida, no esperé un segundo más para escapar. 

***

No podía dormir, los nervios invandían mi sistema, asaltando mi tranquilidad. Menos de 24 horas para conocer a un grupo del que no conocía basicamente nada, menos de 2 horas para salir con Joel... Aún las dudas llenaban mi cabeza sobre él, Richard, Erick, Christopher y Zabdiel, supongo que con tiempo sabría todo o por lo menos lo nesario.

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Cortito lo sé, no me mateeeen... LAS AMOOOO 

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