Capítulo 41: Internados

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Capítulo 41: Internados

Baekhyun sostenía la mano de Chanyeol como si se aferrara a través de él a la realidad y ala cordura. El gigante temblaba incluso más que él. Estaba a punto de tomar la mano de su pareja y salir corriendo para esconderse en algún lugar, donde nadie pudiera encontrarlos. Pero eso no era posible, Baek necesitaba cuidados. Era por su bien. 

–¿Cuánto tiempo estaré aquí?– quiso saber el chico. 

–El médico te explicó que depende de ti, amor. Si ven una mejoría constante, podrían ser un par de meses. Si no pones de tu parte, no lo sabemos– explicó Chanyeol con seriedad. 

–Entonces, me portaré bien– aseguró Baek con una media sonrisa, un poco nostálgica. 

–Sé que lo harás– Chanyeol se aguantó las ganas de llorar. 

Si Baekhyun avanzaba bien, tendría que desaparecer más rápido. El resto de sus amigos nunca se enteraron sobre sus planes de desaparecer. Quiso avisarle a Kyungsoo, pero no tuvo la valentía. Lo único que les dijo, fue que estaría fuera mientras Baek estaba internado, porque no quería interferir en el proceso. Aún así, Kyungsoo le dijo que era infame, que no podía alejarse en un momento tan crítico incluso si pensaba que era por su bien, pero no fue escuchado. Chanyeol no quería darles falsas esperanzas a nadie. 

–Yo...– Chanyeol suspiró y tomó aire antes de elegir las palabras que quería decir. –Realmente estoy agradecido con tus padres. Sólo una persona puede venir a dejarte, son las reglas, y ellos me cedieron esta oportunidad.– Baek le interrumpió con un corto beso. –Realmente, Baek, no tienes idea de cuánto te amo. No quiero perderte, pero prefiero que vivas una vida más tranquila, al lado de alguien que pueda hacerte realmente feliz. Yo sólo te hago daño. Preferiría morir con la culpa antes de ver que te enfermas por mi causa. No soy perfecto, hay miles de personas en este mundo que podrían hacerte más feliz que yo. 

–Ya te dije que me voy a portar bien, Park– Baekhyun parecía fastidiado. –No te despidas como si me fuera a quedar en este lugar para siempre. Eres un idiota, nada de esto es tu culpa. No es tu culpa tener hemofilia y no es tu culpa que yo me esté volviendo loco. Lo que voy a decir es asquerosamente cursi pero, incluso si estuviera bien, yo... igual estaría loco por ti. 

–Baek– ambos estaban llorando en ese momento, pero el más bajo de los dos se limpió sus lágrimas con violencia. 

–Tú, tonto. No entiendes que mi única felicidad verdadera es estar contigo. Si no estás tú, no funciona. Y, otra cosa, si vuelves a decir de nuevo la palabra "muerto" o "morir" te voy a dar una buena razón para que lo estés. En la corte puedo alegar que estoy loco. 

–Baek, en serio te amo como a nada y a nadie en este mundo. 

–Lo sé, idiota. 

Chanyeol se acercó y lo atrapó en un intenso beso, uno de los más largos, tristes y apasionados que habían tenido, sin importarle las miradas reprobadoras y curiosas de algunas personas, incluyendo enfermeras. Finalmente, cuando Baek se despidió con la mano, gritando que serían una vacaciones de locura, Chanyeol no pudo evitar reír. 

EL gigante salió del hospital y corrió hasta encontrar un parque deshabitado. Gritó y desahogó todo el dolor que había acumulado. Gritó hasta quedarse ronco y sólo reaccionó cuando recibió la llamada de Kris: el padre de Jongin estaba en el hospital. Rápidamente, tuvo que regresar al auto de sus padres, que le habían prestado para dejar a Baek, y aceleró para poder ir rápidamente. Las cosas no podían empeorar. 

***

Suho daba vueltas mientras Jongin se mordía los nudillos. La gente empezó a acumularse en la sala de espera del hospital para darles apoyo. Estuvieron horas, esperando con ansiedad e incertidumbre, hasta que finalmente un médico salió preguntando por ellos. 

Time's up (OT12)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora