Somos De Mundos Distintos ~Ruggarol~

Capitulo 5

Ruggero Pov

Estaba en la casa de Valentina con Mike, Agus y Caro como siempre hacíamos los fin de semanas. La estábamos pasando bien hablando y todo eso pero apareció Karol ¿Genial No? Nótese mi sarcasmo.

No deje de darle miradas amenazadoras durante toda la charla y ella sólo se limitaba a bajar la cabeza. Pero tenia un plan y esta vez no iba a fallar.

Ella sufrirá. Y yo me encargare de eso.

Después de un rato, Karol subió a su habitación. Perfecto.

Cuando Karol fue a su cuarto, después de varios minutos le pregunte a Valentina que iría al baño.

–Valen, iré al baño ya vuelvo.– dije levantandome del asiento.

Subí las escaleras pero no iba presisamente al baño. Iría al cuarto de Karol. La asustare un poco.

Veía varias puertas en aquel pasillo que ya conocía. Estaba la de Valen, la de sus padres, y dos habitaciones de invitados. Entre a la primera y estaba totalmente vacía y obscura, lo que significa que en la otra debe estar Karol.

Fui hacia la otra puerta y gire la perilla.

Ahí se encontraba ella. Estaba recostada en su cama.

Se veía tierna, tengo que admitirlo. Pero con ternura no se gana nada.

Ella al percatarse de mi presencia giro a verme y se tenso.

–Tu y yo tenemos cosas de que hablar. – dije y ella palideció.

–N-no T-tenemos nada de que h-hablar– dijo nerviosa.

–Oh Karol, claro que tenemos que hablar.– dije acercandome a su cama lenta y sigilosamente 

–¡V-vete de m-mi c-cuarto!– se levanto de su cama alejándose. Rápidamente fui hacia donde estaba ella y la tome de los hombros acorralandola contra la pared. Ella forzajeaba conmigo para zafarse de mi agarre pero no podía.

–No te soporto, eres una persona inservible. Le haces mal a la humanidad,–sus ojos se cristalizaron– Nadie te quiere, todos fingen quererte por lastima. Dime algo ¿Quien querría a alguien tan insignificante como tu?– Una lágrima rodó por su mejilla. Reaccioné. ¿Que le estoy haciendo? Ella no me ha hecho nada.

La mire fijamente a los ojos. Tenia unos hermosos ojos verdes que tan solo con verlos te quedas hipnotizado. Era muy bella la verdad. Lágrima tras lágrima caía de sus hermosos ojos esmeraldas. Sentí una opresión en el estomago al darme cuenta que yo fuí quien las causó. Volví a reaccionar. ¿Desde cuando me siento mal por alguna persona? ¿Sobre todo con ella?

Volví a mi plan. Saque una pequeña cajita de mi bolsillo y se la mostré.

–¿Quieres saber lo que es esto?– ella negó – Pues lo sabrás.– dije firmemente. Abrí la cajita donde se encontraba una hojilla. Ella palideció. – Debes conocerla, me supongo que has jugado mucho con ella ¿Verdad?– me reí cínicamente y ella seguía llorando silenciosamente. –Bueno, lastima que tu no jugaras hoy con ella. –Me miro confundida.– Yo jugaré con ella. Y tu seras mi rehén.

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