Rompiendo Fronteras {j.b}

11. Juegos infantiles

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(Quien quiera un capítulo dedicado, cite esto y le dedicaré uno)

Justin's POV

Exhale por la nariz mientras empezaba a despertarme. Gemí en silencio dejando que mis ojos se abrieran y parpadeé lentamente, para acostumbrarme a la luz que estaba en la habitación antes de sentir el cosquilleo del pelo de alguien en mi hombro mientras me movía.

Volteé la cabeza al ver la mejilla de Hazel en mi brazo, su cabello caía en su cara mientras dormía con una respiración constante.

Los pensamientos de lo que pasó anoche aparecieron en mi mente cuando mis ojos se perdieron en sus labios y pude sentir una sensación de satisfacción por todo mi cuerpo.

Después de correrme, los dos conciliamos el sueño. Pero cuando empecé a recordar los momentos de ayer por la noche y ponerme cachondo, el golpe de la puerta resonó en la habitación.

Estaba claro que la persona del otro lado de la puerta, no conocía la paciencia.

Miré a Hazel mientras me alejaba, la manta cubría hasta las caderas mostrando su parte superior. Su sostén negro me volvía loco...Como se le adaptaba a sus pechos. Me pasé una mano por el pelo, en un intento de parecer normal mientras caminaba hacia la puerta.

Cuando giré el mango, no esperaba ver su rostro ahí.

-¿Por qué estás aquí?-Me preguntó con el ceño fruncido en su rostro mientras me miraba, llevaba la mandíbula apretada.

-No importa por qué estoy aquí. -Le dije. Me empujó para entrar en la sala de estar.

-¡Hazel!-Gritó.-¡Vamos, levántate!

En uno pocos segundos Hazel asomó su cabeza y luego todo su cuerpo se desplazó a la sala de estar.

-¿Puedes irte y dejarme dormir?-Ella le dijo con los ojos entrecerrados.

-¿Follaron?-Preguntó Trent, Hazel se tensó de nuevo mirando a Trent.

-Tu y tu perra sois tan entrometidos.-Ella le dijo antes de levantarse del sofá, agarrando la manta con sus dedos bien cuidados.

Se alejó pero un podía verla, cuando llegó a su habitación, dejó caer la manta y pude ver su culo redondo con esas bragas de encaje.

Hazel cerró la puerta de su dormitorio por lo que cogí mi móvil de los pantalones que estaban en el suelo. No me molesté en mirar a Trent ya que su presencia me era irritante. La idea de que él tenga la decencia de volver al apartamento que decidió romper hace unos días, era sólo algunas de las razones por las que lo odiaba.

Tal vez su rostro se vería mejor reestructurado.

Exhalé profundamente por la nariz mirando mis mensajes de correo electrónico. Todo estaba bien hasta que habló.

-Entonces, ¿follasteis?-Trent me preguntó, arruinando la paz que había recuperado ya que no estaba hablando, pero él se había movido para sentarse en el sofá, sólo a unos centímetros de mí.

-Si lo hemos hecho, ¿por qué te importa?-Le dije, tratando de hacer desaparecer la sensación de picor y frustración que tenía dentro de mí cuando puse los ojos sobre él.

-Porque ella es mi ex.-Dijo y Pestañeé. ¿Qué acaba de decir?

-Natalia es mi ex, pero no te cuestiono si le has metido la polla o no.-Le aclaré y pude sentir que todo mi cuerpo se llenaba de ira.