El cazador de demonios

CAPÍTULO 2

El reino de Alvarez estaba sumido en el caos.

Después de proclamarse como rey, el joven Zeref descargo su frustración y su dolor con todo y contra todo.

Los impuestos subieron, los castigos aumentaron y con eso, las muertes y la desesperación.

El pequeño reino, a base de guerras y muertes se convirtió en uno reino grande y próspero, pero sobre todo poderoso.

Aun con su venganza cumplida, con el imperio más grande y poderoso del continente y con un ejército prácticamente invencible, el corazón del joven Zeref no se reparaba.

Quería calmar un poco su tan roto corazón, pero para eso no había nada que hacer.

En un palacio en lo alto de una montaña, en una habitación adornada con bellos cuadros y caros mantos se hallaba un joven de cabellos negros sentado en una silla frente a otro hombre de edad avanzada.

Los dos hombres se encontraban en medio de una partida del clásico juego del ajedrez.

El joven de cabellos negros avanzo el peón hasta estar delante del otro rey

-¿Un simple peón?- pregunto el mayor con incredulidad.

-Un humilde peón puede derrumbar reinos- dijo mientras veía como el mayor movía a su rey y se comía la ficha- Pobre Peón que muere ante el viejo y cruel rey. Qué triste.

El mayor con una sonrisa llena de soberbia consiguió que el joven lo mirara con superioridad disimulada.

-Pero...- siguió diciendo el joven con voz cargada de maldad e ironía haciendo que al mayor se le tensase la espalda por un momento- ...la última palabra...- dijo cogiendo su pieza del rey- ...la tiene mi rey.

De repente el mayor empieza a convulsionar y a salirse sangre de la boca.

Magia negra.

-Tu... éramos, éramos...- dijo con dificultada- éramos aliados ¿Por...? ¿Porque?

-¿Por qué?- dijo riendo un poco- Por poder. Tu reino, ahora sin rey, caerá en mis manos y me haré con tu ejército haciéndome prácticamente invencible. Puro ingenio, querido amigo.

Antes de que pudiera terminar esa frase el mayor había caído muerto al suelo desangrado.

-Y pensabas que esto era solo un juego...

Después de la muerte de su rey, el reino de Stella fue fácil de invadir.

Así fue como el pequeño reino de Alvarez, fue creciendo hasta convertirse en un imperio imponente. Zeref se había convertido en el gobernante de casi toda la parte norte del continente, y sus fronteras cada vez se expandían más.

El reino Alvarez, pasó a ser un gran e imponente imperio.

El imperio Alvarez.

❌❌❌

Lar risas de los niños resonaba por todo el pequeño poblado.

Todos estaban jugando, con lo que podían, por las calles. Algo tan simple como un palo y una piedra podía ser suficiente para ellos.

-¡Corre Natsu!- dijo un chico pelinegro viendo como este estaba apunto ser pillado.

Natsu no dejaba de correr y reír, estaba siendo perseguido por Lisanna, su mejor amiga y compañera de juegos.

-No te escaparas- dijo Lisanna riendo.

De repente se escuchó el sonido de caballos y después los gritos y objetos rompiéndose.