ulo 12 ·
-Estoy de acuerdo contigo. Una mesa más y moriré. -agregó la castaña con un poco de drama.
-Aún no desfallezcas, te falta una. -la castaña hizo una mueca y se dirigió a la mesa indicada por la pelinegra, al estar unos metros más cerca Parker quiso salir corriendo, o mejor aún desaparecer. Pensó en desviar su camino pero sería muy evidente. No tuvo más opción, se paró a un lado de la mesa y carraspeó su garganta para atraer la atención de las personas presentes en la mesa redonda.
-Bienvenidos a La Dolce Vita. -la familia Malik y la familia Underwood posaron su mirada en ella y las emociones surgieron, unas de alegría, otras de fastidio y otra de impresión absoluta.
-¡____! -dijeron la señora y el señor Malik al verla.
-Buenas noches. ¿Como están? -añadió con una amplia sonrisa.
-Muy bien ahora que te vemos. ¿Pero, que haces aquí? -preguntó la señora Malik.
-Trabajo aquí. -respondió sin más. La castaña fijó su mirada en el chico frente suyo pero él aún estaba atónito al verla allí, a poca distancia de él.
-¿Y porque? -preguntó ahora el señor Malik.
-Necesito pagarme la universidad, la situación económica de mis padres no es la mejor ahora. -Lisa soltó una risita audible para la castaña.
-Oh eso es una pena, yo... -el señor Underwood interrumpió a la señora Malik.
-¿En que trabajan tus padres?
-Bienes raíces. -respondió seca. Él señor comentó algo en el oído de su esposa provocando que riera. ____ no entendía que era tan gracioso.
-Si alguna vez nos necesitas no dudes en llamarnos. -dijo el señor Malik brindándole una cálida sonrisa, que ____ devolvió de inmediato.
-Muchas gracias, apreció su preocupación.
-¿Porque no cenas con nosotros? -sugirió la señora Malik, tan gentil como siempre, pero la castaña no quería ser un infortunio para su noche.
-No lo creo, debo trabajar. -Zayn no podía parar de mirarla, la ropa que llevaba le resultaba familiar, entonces Malik pudo comprender, por fin todas las piezas de su rompecabezas encajaron, ____ fue la que lo llevó a casa aquel día.
-Un día de estos deberías ir a casa y horneamos un pastel, como en los viejos tiempos. ¿Recuerdas? -una sonrisa amarga naufragó en aquel momento. Eso era lo que ella siempre hacía, o mas bien de lo que vivía, de los recuerdos.
-De acuerdo. -sonrió- Ahora, ¿que van a ordenar?
-¿Que nos recomiendas? -preguntaron.
-Todo en el menú es sensacional. -aseguró la castaña.
-Esta bien entonces nosotros queremos dos Tiella Di Risco. -dijo el señor Malik. Parker apuntó en la libretita, dio unos pasos y se acercó hasta donde se encontraban el señor y la señora Underwood.
-Nosotros pediremos un Spinaci alla piemontese y una ensalada Caprese. -tomó nota y se acercó a Lisa, esta la miró de una manera arrogante.
-Yo pediré Fettuccine al ragù. -la morena trató de controlarse y no estrellar a la rubia contra la mesa. Avanzó un poco más hasta que estuvo frente a él. No estaban tan cerca desde aquel día que lo llevó a casa. Él la miró y desvió su vista rápidamente.
-¿Y tú? -preguntó Parker.
-Decide tú por mi. -la castaña sonrió y Malik sintió morir.
-¿Algún vino en especial?
-Merlot. -el señor Underwood se apresuró a decir. La castaña tomó todas las indicaciones y se desplazó a la cocina a dejar las órdenes, en el camino se encontró a Angelina.
-Necesito que me ayudes con la mesa ocho.
-¿Que? ¿Porque?
-Solo hazlo. Yo te diré que hacer. -las dos chicas continuaron su trabajo con las demás mesas, al cabo de unos minutos el pedido ya estaba listo. ____ tomó los platos de la familia Malik y Angelina la de los Underwood. Parker se adelantó y llegó a la mesa.
-Y ____, ¿a que universidad piensas asistir? -preguntó la señora Malik. Zayn escuchaba atentamente.
-Aún no lo sé, necesito ver los costos de cada una.
-Zayn y yo iremos a la misma universidad. ¿No es grandioso? -exclamó la rubia, con la marcada intención de hacer sentir miserable a la morena.
-Es genial. -sonrió la chica sin ninguna señal de abatimiento. Fingir tanto la hace una experta. Puso el plato frente a Zayn rogando que le gustara.
-Buon appetito. -dijo con un perfecto acento italiano mientras se marchaba. En el camino vio a la pelinegra, esta le pasó una bandeja con copas de vino.
-Llévalas a la mesa diez mientras yo te cubro. -Parker asintió, se dirigió a la mesa, de repente Lisa se cruzó por su camino provocando que las copas se voltearan derramando todo el vino sobre su vestimenta.
-Fíjate por donde vas, casi arruinas mi Versace. -todo el mundo fue testigo del penoso momento, la castaña con la frente en alto acomodó las copas en su lugar y se desplazó hasta la cocina.
-¿Que sucedió? -preguntó Angelina alterada.
-Fue la rubia. -respondió triste.
-Espera aquí. -Parker miró de nuevo su ropa, en su camisa blanca había quedado un parche enorme color carmín, se dirigió al baño con intención de mejorar ese desastre. Al llegar se miró al espejo, se sentía tan patética. Lagrimas se acumularon en sus ojos y no se contuvieron. ¿Por que esto le ocurría a ella? Era lo que se preguntaba todas las noches. Sollozos acompañaban al llanto, la castaña trató de tranquilizarse y tomar un poco de agua. Al mirarse al espejo vio un reflejo que no era el suyo. Dio media vuelta y Zayn se acercó a ella.