-¿Lo dices en serio?- Pregunta preocupada. Él sonríe y le da un pequeño beso.
-No se que pasará con los demás. Lo único que se, y que me importa es estar contigo- Ella sonríe y lo besa.
-Entonces tendremos que ser amantes. -Le muerde la oreja.- A escondidas por un tiempo.- Dice sentándose sobre su estómago con cada pierna a un lado. Ella aun estaba completamente desnuda.
-Eso se nos da bien.- La acerca más a él-¿Te he dicho que eres extraordinariamente preciosa?
- Mm, creo que hoy no.- Acaricia su pecho y luego roza los labios contra el. Draco desliza los dedos por el cabello color caramelo de ella. Un color que le quedaba perfecto y combinaba con su personalidad. -¿Aun más?- Pregunta sonriendo. -¿Que crees? ¿Que soy como un conejo?
-Eres malvada ¿sabes?- Hace un puchero. Él, Draco Malfoy haciendo un puchero. -¿Como se te ocurre subirte así encima de mí y dejarme con las ganas? - De pronto ella pudo sentirlo.
-Ja, mira nada más. - Acerca su rostro al de él, rozándose levemente estómago y besa sus labios de una forma juguetona. -¿Que quieres Draquito? -Dice levantando su cuerpo y deslizándose sobre la erección de él, que gimió al sentirla en su interior. -¿Esto?- Murmura ella, moviendo sus caderas despacio.
-Eres.. increi..
-¡Draco! -Grita Blaise desde fuera haciendo que ambos se sobresalten.- ¿Estás en casa?
-¡Si!
-Bueno me voy, es tarde, mañana hablamos.- Dice al ver que no salía a recibirlo.- Buenas noches Malfoy.
-Gracias Zabini. -Escuchan como los pasos se alejan, y suspiran aliviados.-¡Otra vez!- Dice sonriendo. Hermione le devuelve la sonrisa y recuesta su cuerpo sobre el pecho de él, quien aun se encontraba dentro de ella.
-Draco- La castaña cierra los ojos y abraza su cuerpo-Te amo. -Él besa su pelo mientras le acaricia la espalda.
-No mas que yo a ti. - Toma una sabana y cubre sus cuerpos. Ella levanta las caderas un poco para que él pudiera salirse.- Buenas noches Granger. -Sonríe en su oreja.
-Buenas noches Malfoy.- Dice acostada aun sobre su pecho y quedando profundamente dormida.
-o-
Luna entra a la cocina donde se encontraba Hermione preparando desayuno.
-Veo que hoy estas mejor Herms.- Ella se da la vuelta, sonríe y la abraza.
-Si Lunita, gracias por todo.
-No hay de que.- Va dando saltitos a la mesa.- Esa conversación también me ayudó mucho a mi.- Ve que ella ha preparado varios platos.
-¿Nos preparaste el desayuno?-Pregunta con alegría.
-Este.. no, es para Draco.
La rubia la mira extrañada, pero la relación entre ella y Draco había cambiado bastante y ella ha madurado. Así no que no le da importancia y sigue a la suya, en sus mundos, como siempre. ¿Algún día cambiaría esa Luna? Igual ya lo había echo y nadie se había dado cuenta.
-Bueno, voy a salir de compras con Theo.- Sonríe ampliamente.- No vueltas loco a Draco durante ese tiempo, ¿vale? -Dice saliendo de la cocina.
Será difícil amiga, eso era justo lo que tenía planeado para el día de hoy. Piensa Hermione mientras le da un mordisco a su tostada y vuelve a centrarse en terminar el otro desayuno.
-o-
Él iba saliendo de su habitación después de vestirse, pero el sonido del teléfono de la casa lo detiene. Al ver el número él se pone serio de repente, como un acto reflejo y duda en contestar. ¡Maldita sea! Tengo que deshacerme de ti, piensa Draco
-¿Hola?
-Buenos días Draco.- Él suspira.
-Hola Pansy. -Dice sin muchos ánimos.
-¿Que te parece si salimos hoy?
-Em, no creo que sea buena idea.
-Ah, ¿Ya tienes planes?
-Si, pero también creo que.. deberíamos dejar de vernos.- Hubo silencio en la línea.- ¡Lo que pasó anoche fue una locura! No debió ocurrir.- Se queda callado esperando una respuesta, pero de nuevo solo se escucha silencio.- ¿Estas ahí?
-¡Muerete Malfoy! - Grita fuertemente y cuelga.
Draco tira el teléfono a un lado, no quiere saber nada de él, y se queda pensativo. Esto no me gusta nada. Creo que es capaz de..., piensa. pero Hermione lo interrumpe abrazándolo por atrás.
-¿Con quien hablabas? - Pregunta dulcemente. Él la mira por unos segundos, sin saber que responder. No puede decirle la verdad, aunque le duela mentirle.- ¿Y? -Suspira y sonríe.
-Quería esperar y darte la sorpresa.- La toma por la cintura y le da un pequeño beso.- Nos vamos de vacaciones, tu y yo solos.
-¡¿Que?! Estamos aquí por la escuela, no podemos irnos. No estamos de vacaciones.- Habla muy rápido.- ¡No está permitido! Además ¿No crees que seria como sospechoso?
-No, de hecho es McGonagall la que nos envía a Francia, a Beuxbatons, algo sobre una charla de como es la vida muggle. - Hace una mueca.- En realidad no son unas vacaciones, pero así suena mucho mejor. Y tú vendrás conmigo- Sonríe.- ¿Que mejor compañía que mi perfecta... -La besa.- Hermosa,- besa su nariz.- Increíble,- Besa sus labios de nuevo.- compañera de casa?
-Que se preparen las Estiradas como intenten tocarte un pelo. - Dice en tono posesivo, para después pasar a seductora y mordiendo los labios de Draco suavemente.
Ella se despega para alejarse, pero él la detiene por un brazo. Su expresión de lujuria hace mas que claro lo que desea en ese instante, también ayudaba el bulto en sus pantalones, claro está.
-Te he preparado un desayuno riquisimo y debe estar enfriándose. Así que mejor lo dejamos para después.
-Gracias , pero comer es lo ultimo que tengo pensado en este momento.. - Hermione levanta una ceja. -Bueno, eso lo rectifico. Porque comer me suena como una excelente idea. - El pega su cuerpo al de ella y desliza una mano hacia su entrepierna.-Pero no precisamente comida.-Susurra él en su oído.
La castaña sonríe y coge el rostro de Draco con las dos manos, plantándole un beso que dejaría sin aliento a cualquira.
-Después, confía en mi.
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Hace mucho calor, Draco.
RomanceDespués de muchos años siendo la estudiante perfecta, la sabelotodo, la que nadie veía.. Tras su ruptura con Ron, Hermione se convierte en una verdadera mujer de armas tomar que lleva a más de uno de cabeza. ¿Y que pasa con Draco? él sigue igual de...