Caminaba a paso lento de vuelta a la casa de Rukia, se sentía más tranquilo y en paz ahora que había hablado con toda la verdad; no se sentía orgulloso de haber lastimado a Orihime pero a la larga sería lo mejor. Pero no era tiempo de pensar en algo así, ahora Renji no estaba tendría a Rukia solo para el durante una semana, y aunque no pudiera estar más junto a Rukia después de esos 7 días se encargaría de que ella supiera que sus sentimientos siempre fueron correspondidos y que aunque pasara el tiempo el jamás la olvidaría
Se podría decir que las cosas comenzaban a mejorar poco a poco pero había algo que por más vueltas que le diera y por más que deseara desviar sus pensamientos no podía olvidar y ese algo o más bien alguien era Renji: Su amigo, a quien estimaba y apreciaba; Aunque nunca fuera admitirlo o a decirlo en voz alta.
Al principio no le agradaba para nada; presumiendo que era teniente, que conocía a Rukia desde hace años y ese extraño cabello que le daba una apariencia a su cabeza de piña lo hacían alguien insoportable pero conforme pasaba el tiempo se dio cuenta que el mayor aspecto que le causaba tanta molestia eran tan solo celos, de que Renji hubiera conocido a Rukia desde que eran unos niños, y si tomaba en cuenta que la edad de los shinigamis se manejaba de diferente manera resultaban ser muchísimos años
Y aunque hasta hace poco se había dado cuenta que eran celos lo que tenía, había aprendido a reconocer a Renji como un amigo, incluso él le había pedido que rescatara a Rukia la segunda vez que pelearon.
Habían pasado por muchas situaciones y peleas juntos, se habían ayudado mutuamente para sobrevivir en momentos en los que parecía imposible, como era que ahora estuviera dispuesto a conquistar a su mujer. Podía fingir que nada pasaba e ignorarlo , al fin y al cabo Renji no se enteraría, al menos no por ahora, pero jamás podría hacer algo así, él no era así, y antes de traicionar o lastimar a Renji de esa manera prefería mantenerse solo.
Debía pensar en alguna manera, en que Renji aceptara que Rukia no era feliz con él y decidiera dejarla libre pero la clave para lograrlo era que Rukia aceptara que lo amaba y que estaba dispuesta a corregir el error que en cierta parte habían cometido los dos
De tanto ir sumergido en sus pensamientos no se dio cuenta que había llegado a la casa hasta que casi se estrella con la puerta, solo unas cuantas vefes de haber ido a visitarla habían bastado para que automáticamente llegara.
Tomo suficiente aire y lo expulso tratando de renovar sus emociones, quería quitarse aquel semblante serio que había tomado en la casa de Tatski al hablar con Orihime, le preocupa contagiar de tristeza a Rukia o aun peor que pareciera que en verdad quería a su futura ex esposa.
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Final Erróneo
RomanceTodos llevaban sus vidas de forma normal, cada quien con su pareja, cada quien con su familia.Pero no, aquello no era felicidad, aquello no era correcto.Las cosas no debieron terminar de aquella manera, pero ahora mas que nunca es difícil seguir apa...