Capítulo 26

449 37 5
                                    

Max se encontraba en su habitación hablando con Alexia, hablaba bastante seguido con su ex novia y actualmente su mejor amiga. Con el pasar de los días no ha pasado nada raro a su al rededor, ya pareciera que todo iba mejorando para él, las noches eran tranquilas y no tenía problemas al dormir, sus días transcurrían normales y no había visto ni escuchado nada raro en los últimos días.

-Y resultó ser cierto todo lo que hizo, y pues Antonio la mandó a volar. -Dijo Alexia entre risas al otro lado de la pantalla-

-Esa víbora, pensó que se saldría con la suya, y que no se daría cuenta. -Dijo Max con ganas de reír- Al menos se dio cuenta.

-Lo más chistoso fue que le andaba rogando. -La expresión de Alexia cambió de risa a terror- Max, ¿Quién es ella?

Max frunció el ceño, giró la cabeza y al lado de su cama había una niña mirándolo con una mirada neutra, comenzó a sudar y volvió su mirada a la pantalla.

-¿Max? -Dijo Alexia con mucho miedo-

-Max, haz roto nuestra promesa, me has olvidado. -Dijo la niña mirándolo con pena-

Max quedó mirando a la niña, mientras Alexia miraba con terror a través de la pantalla.
Max reconocía a esa niña, estaba seguro de haberla visto en alguna parte, pero no recordaba donde. De pronto se escuchó un grito proveniente del otro lado de la computadora, era Alexia, Max volvió en si y miró la computadora, que rápidamente se apagó.

-¿Qué haz hecho? -Dijo gritando a la nada, con la imagen de la niña en su cabeza dando vueltas-

Aparentemente la niña había desaparecido, pero pronto comenzó a sonar la radio con una canción de Linkin Park...

"In these promises broken,
Deep below
Each word gets lost in the echo..."

****
-Y pues no sabemos cómo hacer para que esta pesadilla termine, no sé porque de todas las casas que hay aquí tuvimos que escoger esa -Dijo Tiffany con ganas de llorar- Estoy cansada de esto Joel, mis hermanos y yo estamos cansados, mi hermanita menor es la que más ha cambiado, eh llegado a pensar que... -Tiffany guardó silencio-

-¿Qué cosa? -Preguntó Joel von intriga-

-No, nada, es muy estúpido, no me tomes en cuenta.

-Pero dime, no creo que sea estúpido, puede ser probable que lo que piensas sea la causa de lo que le pase a tu hermanita.

-Me tomarás por loca Joel. -Dijo Tiffany cabizbaja-

-No te tomaré por loca, me has contado lo que te pasa y no te tomo por loca, soy una persona de mente abierta, además te creo. -Dijo Joel abrazando a Tiffany- Desde ahora tienes todo mi apollo.

-Gracias Joel, aunque no me conozcas muchísimas gracias, necesitaba desahogarme. -Tiffany lo abrazó de vuelta-

-De nada Fany, puedes contar conmigo, y si necesitas apoyarte en alguien, aquí estoy yo. Te acompaño a casa.

Ambos se dirigieron hasta la parada del bus para ir a casa de Tiffany, mientras esperaban el bus aprovecharon de hablar y conocerse.
****
Graciela había llegado a casa con el mandado y se dirigió al comedor a dejar las bolsas, cuando de repente cae una nota de la mesa, extrañada la toma y comienza a leer....

"Familia, quiero que me perdonen por lo que voy a hacer, la desición está tomada, eh decidido acabar con todo, no soporto vivir con miedo, echo de menos mi verdadera vida en Texas donde vivía tranquila y feliz, mi adolescencia se ha basado en miedo, no soy feliz, por favor perdónenme por ser una cobarde pero no puedo más, los amo y espero puedan seguir adelante y sean felices.
Tiffany."

Los ojos de Graciela se tornaron rojos, dejó el mandado y subió rápidamente a la habitación de Tiffany con la esperanza de que fuera una broma y que ella estuviera ahí. Al entrar se encontró con la habitación vacía. Inmediatamente fue a la habitación de Jeremy, pero también estaba vacía. Fue a la habitación de Max y se encontró a este denasiado pensativo...

-Max, ¿Qué pasa?

-Nada, ¿Pero a ti te pasa algo? -Preguntó Max-

-Es Tiffany, no está en la casa y dejó esto. -Dijo Graciela extendiéndole una nota-

Max tomó la nota e inmediatamente se levantó.

-Vamos a buscarla, rápido.

Ambos salieron y fueron a la habitación de Melissa quién estaba con Elisa.

-¿Qué pasa? -preguntaron las chicas al mismo tiempo-

Max les pasó la nota a las chicas. Melissa tomó la nota y junto a Elisa comenzaron a leer.
Pronto ambas se quedaron mirando y se levantaron de golpe.

-No puede ser, hay que buscarla inmediatamente. -Dijo Melissa con los ojos llorosos-

Los 4 salieron corriendo de la habitación y mientras bajaban las escaleras se dieron cuenta de que alguien venía entrando a la casa, era Tiffany acompañada de un joven como de 15 años.

Inmediatamente los 3 corrieron a abrazarla...

-Dios mío Tiffany, ¿Dónde estabas? ¿Qué diablos pensabas hacer? -Preguntó Melissa casi llorando-

-Lo siento -Dijo Tiffany llorando a mares- No aguantaba más esta situación.

-Pero nos tienes a nosotras Tiffany, no estás sola. -Dijo Elisa abrazando a su hermana-

-Gracias a Dios estás bien. -Dijo Max con una expresión de felicidad-

-Estoy bien gracias a Joel -Dijo Tiffany mirando al chico que estaba parado en la puerta- Él me salvó y me hizo comprender que no debo huír de los problemas, si no enfrentarlos.

-Muchas gracias Joel, si tu no hubieras aparecido, no sé que le habría pasado a mi hermanita. -Dijo Max extendiéndole la mano en forma de agradecimiento-

-No te preocupes, hize lo que me pareció correcto. -Dijo Joel estrechando la mano con Max-

-¿Y mis papás? -Preguntó Tiffany a sus hermanas-

-Trabajando como siempre. -Respondió Elisa-

-No puede ser que nuestros padres nunca estén en casa, siempre en el trabajo, nos han descuidado demasiado. -Dijo Melissa enojada-

-Es verdad Meli. -Dijo Max apoyando a sylu hermana- Nunca se dan cuenta de nuestros problemas, ya es hora de poner un alto, desde que llegamos están cada vez más ausentes.

-Hasta Graciela está mas presente que nuestros padres, tenemos que hablar con ellos, no podemos dejar que se destruya cada vez más, tenemos que fortificarnos como familia. -Dijo Tiffany de brazos cruzados-

-Pero también tenemos que parar con lo que nos atormenta, y ello son esas almas en pena que andan vagando en esta casa.

****








La Casa De Enfrente Donde viven las historias. Descúbrelo ahora