Capítulo 6

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¡Hola Lectores!
Muchas muchas gracias por su apoyo y por seguir leyendo mi historia.
Ya al fin es el esperado capítulo de Maxon!!! Salió muchisimo mas largo que los otros. Espero que lo disfruten.
Tambien espero sus comentarios y votaciones, ya que es de mucha importancia para mi saber si les está gustando la historia o sus opiniones personales. Enserio se los agradecería infinitamente, también eso me motiva mucho.
Cada día me esfuerzo para traerles un capítulo muy bien redactado, ojala les guste el camino que tomará la historia.
Los dejo leer.


VI

MAXON

Después de que America se marchó me quedé pensando en sus palabras. ¡No! Eso no podía ser, ella me mintió y lo que me dijo que entre ellla y ese guardia no había nada era solo una más de sus mentiras.
La vi marcharse mientras bajaba por la escaleras, y entonces vi algo que me dio una punzada en el estómago. Ella había abrazado a ese guardia, y se dijeron muchas cosas más. Solo me pude dar la vuelta para ya no verlos. Pero la curiosidad me ganó, y voltee de nuevo, pero ella ya estaba en la limusina. Nuestras miradas se encontraron, fueron segundos, por que ella evitó el contacto y sé volteó.
Ahora si ya la veía marcharse, cada vez estaba más y más lejos. No quité la mirada de la puerta hasta que perdí de vista la limusina.

—Maxon ¿Todo bien? —me exalté al escuchar la voz, ya que todavía seguía viendo hacia la salida del Palacio. Ruedo los ojos, al escuchar que es Kriss.

—Si Querida, todo bien —le digo mientras volteo hacia con ella, acaricio su mejilla. Y despues doy vuelta para irme.

—¡Espera! —me dice Kriss deteniéndome del brazo.

—¿Qué pasa Kriss? —le digo ya un poco molesto.

—Es que el Rey me dijo que tenemos que ponerle una fecha a la boda, y me pidió que le dijera lo más rápido que pueda —me dice con un tono de voz muy entusiasmada.

—Cariño mañana hablamos ¿si? Ahorita tengo unas cosas que hacer, y después quiero irme a descansar —le explico.

—Está bien —me dice con un tono muy triste y agachando la cabeza.
No me gustaba portarme así con ella, pero aún seguía muy molesto por todo lo de America.

—Mañana nos vemos —le digo, y me acerco para darle un beso.
Fue un beso corto, pero hizo que ella se pusiera muy feliz.

—Te quiero Maxon —me dice y me da una abrazo.
Yo lo le pude contestar nada, solo le correspondí el abrazo y me di la vuelta para irme.

Entré a la oficina, y empecé hacer unos reportes y terminar con los pendientes que tenía.
Las horas se ma pasaron muy rápido, cuando vi el reloj ya era de noche, y tenía que cenar. Pero estaba muy cansado, y no tenía ánimos de ver a Kriss y ni a mi Padre; entonces mandé a pedir la cena a mi habitación.

Cuando llegué a la habitación ya estaba la cena, entonces comencé a cenar. Después me di un baño y me acosté en la cama. A los pocos minutos me quedé dormido.

...

Al día siguiente me levanté muy temprano, había tenido muy mala noche, ya que no dejaba de pensar en las últimas palabras de America.
Así que decidí bajar a caminar un rato por los jardines, necesitaba un poco de tranquilidad, y como era muy temprano, nadie de mi familia ni Kriss estaban despiertos.

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