XVII
Ya había pasado una semana, y con Liam seguía todo igual. Las veces en las que nos habíamos encontrado fue muy indiferente conmigo, aunque sí muy amable y educado como siempre, pero ya no se sentía esa confianza que ambos nos teníamos, ya ni siquiera habíamos tenido la oportunidad de hablar a solas porque nunca lo he podido encontrar, como si fuera que él me hubiera estado evitando en todo este tiempo.
Y de Maxon, bueno de él no sé absolutamente nada, ni siquiera me enteré cuando llegó a Ilea y mucho menos de cómo irían las cosas con Kriss. Pero sinceramente eso era lo que menos me importaba, ahora mi única prioridad era arreglar las cosas con Liam, pero no le insistí porque él me pidió tiempo y se lo iba a dar.
Llamaron a mi puerta y al momento salí de mis pensamientos, pero pensé que solo había sido parte de mi imaginación y nuevamente volvieron a tocar. Fui a abrir y me sorprendí tanto al verlo.—¡Liam! —exclamé, quería abrazarlo pero algo me lo impidió y solo me quedé en la puerta.
—Hola America —tomó mi mano y depositó un beso en ella, ambos sonreímos.
Nos quedamos mirándonos por unos instantes y enseguida nos abrazamos. Ambos sentimos la necesidad de hacerlo, nos entendíamos tan bien que con una mirada bastaba para expresar algo. Me pegué en su pecho y Liam me apretó.
—Lo siento mucho —susurré y sentí cómo suspiró.
—Yo lamento tanto que haya pasado eso, me hiciste mucha falta —confesó y me separó de él para poder mirarnos. Su ojos estaban hermosos y podía notar que ya no estaba enojado conmigo, radiaban felicidad al igual que los míos.
Sonrió y con su mano tomó mi cabeza y se fue acercando poco a poco, sentí nuestros alientos chocar y enseguida él junto sus labios con los míos. Lo agarré por el cuello y el beso se volvió más apasionado. Ya extrañaba sus labios, sentir de nuevo esa sensación única y diferente que con él pasaba.
Al poner fin al beso, juntamos nuestras frentes.—Te quiero America —suspiró.
—Y yo a ti Liam —me separé y puse mis manos en su cara —te prometo que ya no volverá a pasar, si me lo pides jamás volveré a hablar con Maxon si en algún momento nos llegáramos a encontrar de nuevo —suspiré
—Jamás te pediría eso —negó con la cabeza —entiendo que Maxon fue alguien especial en tu vida, alguien que siempre estará presente en ti, pero te tendré la suficiente confianza, yo nunca te voy a prohibir nada —sonrío y con eso bastaba para darme cuenta de su sinceridad y comprensión.
—Eres el mejor ¿lo sabías? —solté una risita y él movió la cabeza sonriendo.
—Gracias a ti soy así, tú me haces ser una mejor persona de verdad que jamás con nadie había sido de la forma en la que soy contigo, tú haces que mi vida tenga sentido —me dió un beso rápido en la boca.
—Tardaste mucho eh —me crucé de brazos y levanté la ceja. Al instante ambos reímos.
—Si bueno, he estado ocupado en otras cosas —pasó una mano por su cabello y sabía que trataba de decirme algo —de hecho te tengo una sorpresa para esta noche, esta sorpresa es una de las razones por las que no había podido verte porque sabía que si lo hacía iba a arruinar todo, por lo mismo he estado muy ocupado con eso de los preparativos —levantó los hombros y me tomó de las manos.
—¿Ah si? Y se puede saber de que trata —supliqué y le di varios besos en su cara —ándale dime —rogué.
—Ni con todos los besos del mundo te diré nada, quiero que sea especial para nosotros, perdóname pero no puedo —se alejó de mí e hizo una sonrisa muy burlesca.
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La Reina
Fanfic¿Qué hubiera pasado si los rebeldes nunca habrían atacado el día de la elección del príncipe Maxon? America comenzó una nueva vida... Pero Maxon ¿Podrá olvidarla?