Capítulo 23

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Valentina

»¡Buen día, Jade! Reportándonos hoy desde la zona de restricción en el área marítima.«

Subo el volumen y me acomodo en mi cama. Al parecer se dice que hubo alguna especie de ataque, pero en realidad por los alrededores a donde vivo, todo estuvo tranquilo.

—Valentina, el desayuno ya está listo— me avisa Solaris.

—Ya voy, sólo quiero ver esta noticia—. le digo y me hace una seña con su dedo pulgar de que "está bien". Sonrío y vuelvo a prestar atención al noticiero. Ayer me despedí ya un poco tarde de Yuki, estuvo al principio un poco insistente en que le dijera si era verdad que mi novio era Samuel Dante, pero obviamente se lo desmentí. Aunque creo que no me creyó del todo.

»En la madrugada de hoy se reportaron la captura de ciento cinco rebeldes del famoso grupo "libres del ojo de Dante". Algunas personas dicen que tuvieron daños a sus propiedades, así como establecimientos cercanos al área, por estas personas. Afortunadamente seguridad alfa llegó a tiempo y pudieron atrapar a estos perpetradores que en su mayoría son jóvenes. No se reportó daños en las zonas centro del continente. Se dice que llegó una alerta a los pobladores de las orillas del continente, pero no se registraron bajas ni lesionados en pobladores Alfa.«

Quién diría que en la madrugada se perpetuaba un ataque al continente. Aunque la verdad es que ya no me he enterado de las noticias de los rebeldes, pues con eso de que me he metido en problemas por ver páginas prohibidas, pues incluso he tenido conversaciones con el mismísimo Aidan Hakwin y su sargento segundo al mando, Vladimir Jakov. Lo que me recuerda a la petición de Aidan... ¿Qué debería hacer? Aun después de todo lo acontecido el día de ayer, una parte de mí dudaba en si debía empezar a entablar una amistad con Samuel, pero es que sólo de tenerlo cerca me pone nerviosa, aunque no de un mal modo, es como si... ¡Ay, no sé! Es como si me comportará muy torpe frente a él, como si me ruborizara sólo de saber que me observa; además con su visita inesperada, creo que me tomó desprevenida, ni siquiera pude hacer un plan, aunque tal vez sólo debería dejar de lado ese asunto y enfocarme nuevamente en mis problemas.

Suspiro cansada de tantas conjeturas y decido bajar a comer. Se ve todo tan tranquilo, nadie imaginaría que estábamos siendo atacados. Aunque no entiendo con qué fin lo hacían, creo que hicieron más daños a infraestructuras que trasmitir un mensaje de "salvación". «Definitivamente no entiendo lo que quieren, Aidan.» Pienso mientras tomo un poco de fruta y la introduzco en mi boca. «Mmm, sabe rico» Sonrío ya un poco más animada de saborear la primera cosa dulce que probaré en el día.

—Necesito abastecer la alacena, Valentina—. me dice Solaris sacándome de mis pensamientos. Rápidamente busco mi cartera y saco mi tarjeta.

—Procura comprar cosas muy necesarias, lo demás lo compraremos hasta finalizar esta semana— . le digo y después toma una bolsa grande y se va. Sonrío aún más por lo gracioso que es mi Dandro. «Ah, Solaris. No sé qué haría en estos momentos si no estuvieras aquí» Creo que me hacía falta compañía, ya que Gema no era muy hogareña cuando vivíamos juntas, no, a ella le gusta salir a pasear y de compras. Aunque tal vez yo también lo haría, si tuviera la riqueza que ella posee. Lo que me recuerda a que debo ser más cuidadosa con el dinero, pues ahora estoy por mi cuenta.

No pasan ni diez minutos y tocan la puerta. «¿Será que Solaris olvidó algo?» Me apresuro a abrir, pero rápidamente recuerdo quién puede ser. Cierro los ojos y frunzo los labios, es demasiado tarde para arrepentirme de abrir la puerta, porque prácticamente ya está abierta. ¡Mierda!

—Valentina— dice Leandro con voz lastimera. —Necesito hablar contigo, ayer me porté como un odiota—. Yo asiento con mi cabeza, dándole la razón en lo que dice. «Eres un idiota» Lo miro levantando una ceja. Él me observa asombrado, pero después continúa. —Es solo que me sentí molesto, sentí celos de saber que tú ya habías empezado una relación. Yo...— lo detengo colocando mi mano frente a él.

Dandrois HumansDonde viven las historias. Descúbrelo ahora