-¿Cuánto mas piensa tardarse?-murmuró molesto.
El pelirrojo se encontraba en el mismo callejón donde anterioirmente habia peleado con cierto demonio. Estaba arriesgando mucho al pasearse por ahí, lo único que le forzaba a quedarse era la cita en la que ambos habían planeado. Estaba listo para ocupar aquél cuarto que en algún tiempo atrás, fue llenado de cadáveres para esta vez prenderlo de pasión.
Estaba todo arreglado para la ocasión, en mayoría, por su amante, pues este sabia que el menor no gozaba precisamente de tener plata.
-Pense que no ibas a llegar.-reclamó.
-Disculpa la demora.-se acerco al shinigami y le tomó del mentón para besarle.
-Aún no, Sebastian... vayamos adentro primero.
Entraron a la habitación y el pelirrojo pudo ver una cama arreglada que le esperaba pacientemente.
Sebastian comenzó a besarle de manera frenética, juntos caminaron hacia el lecho recostandose para poder continuar con la sesión.
-Estás algo extraño.-comentó.-Pareces tener prisa o algo... te ves ansioso.-el mayordomo se alejó para observarle atento y desafiante.
-¿Te estás viendo con alguien mas?-soltó.
-No, y aunque así fuere, no tienes poder para reclamar, no hay ninguna relacion seria entre nosotros... Aún asi... ¿Porque la pregunta?
-Hoy asistió un shinigami a la mansión y preguntó por ti.
-¿Qué?-dijo desconcertado.-¿Me encontraron?
-No... aunque no sé de dónde pudo sacar la idea de buscar en la mansión, creo que no tiene ni la menor idea de donde estás.
-¿Quién era?
-Un tal William. Me pidió toda la información que tuviera sobre tu paradero... obviamente no le dije nada.
-Oh por dios...-se asustó.-tengo que irme lejos.
-Si haces eso, sería mas facil localizarte debido al movimiento. Es sospechoso que te traslades justo despues de que te buscarán en la mansión.
-¿Tu crees que sepan algo?
-No, pero si llegasen a encontrarte sabes que cuentas con mi apoyo.
-Lo agradezco, pero creo que debiste mencionar todo esto al terminar, se ha salido completamente de contexto y no me siento con el humor para...
-Bien... pienso hacerme responsable...-jugueteo volviendo a besarle para acto seguido quitarle el pantalon al menor, después la ropa interior, y así hasta poder masajear el miembro del ojiverde.
-Tu... tu tambien quitate la ropa.-jadeó.
-Lo que órdenes... mi lindo carmesí.-poco a poco se desnudó ante los ojos del carmín y enseguida volvió a comerlo a besos; solo que, esta vez, sus miembros rozaban entre sí. El luzbel se había puesto duro sin tardía alguna, cosa que para Grell era mas que delicioso.
Pronto levanto las piernas del menor y comenzó a meterlo; su respiración se agitó y ambos comenzaron a sudar frio... Grell se sujetó tan fuerte a la espalda del demonio que terminó rasgando la misma, pues cada vez que este alcanzaba la profundidad dentro del menor el pelirrojo perdía la cabeza en delirios de lujuria.
Gritos y gemidos pidiéndole al mayordomo por mas invadian aquella silenciosa habitación dentro de aquél callejon de las calles de Londres.
Finalmente, ambos llegaron al orgasmo; Grell libero su esperma al sentir la semilla de su amante dentro suyo.
...
-Igual que siempre, cielo.-despidió Grell, quién ya se había apresurado a vestirse.-tengo que irme.
-¿Te veré esta semana?
-No lo se con exactitud... necesito investigar quién es el tal William y porqué me está buscando.
-Pues, para atraparte seria lo mas lógico.
-No, sí te tiene a ti como pista, el hubiese llegado a cuestionarte o a seguirte en compañia de otros shinigamis. Te hubiesen atacado en grupo, cosa que no pasó.
-Te ayudaré con lo que pueda.
-No quiero que te metas. No vayas a involucrarte en todo esto.
-Lo intentaré, aunque no prometo nada.
-Gracias.
-Grell...-le detuvo.-Cuidate mucho.-despidió con una mirada llena de preocupación.
-"Lo intentaré, aunque no prometo nada".-bromeó.-te veré después.
-Hasta entonces.
Grell abandonó el lugar saltando por los tejados. Esta noche daría un largo paseo, su mente necesitaba procesar el millar de cosas que cruzaban con tanta malicia para desesperar al menor.
¿Quién es William? ¿Qué busca de mi? ¿Cómo supo donde buscar? ¿Cuáles eran sus intenciones?
El pelirrojo era obstinado, así que, en sus planes no estaba el quedarse con la duda. Siendo así, se decidió a averiguar todo lo que pudiese sobre William, aquél extraño que de la nada le buscaba sin razón aparente...
De significar un gran peligro, evidentemente tendría que matarle, aunque bien, esto no era nada nuevo para la consciencia del prófugo.
-William...-susurró en medio de la noche fría.-¿De dónde me suena ese nombre?Hey! Que les parece hasta ahora la historia eh? Tratare de actualizar lo mas seguido que pueda y asi satisfacer su lectura.
Se agradece su apoyo, cuidense y que tengan linda noche.