Las practicas de básquet son tabú para mi desde que Estefan esta implicado en el equipo, pero no es de esperarse que las espectadoras femeninas aumentaran. Aunque me duela admitirlo, es Estefan solo él.
A un mes de nuestro encuentro donde me llegaron muchos mensajes de él preguntándome si podíamos encontrarnos para hablar. Claro que no conteste, ¿recuerdan la parte de que maduré? Así que acá sigo en la biblioteca vagando hasta que mis amigos salgan de la cancha.
La hora se hace y los espero en la vereda veo a Estefan y como se acerca así que miro a mis amigos y nos marchamos. Cobarde ¿Donde?
Luego de una semana ya Estefan no es mi prioridad, intento no pensarle y me evoco en mi madre. Esta demasiada extraña, entre sus raras propuestas de salir de paseo y sus noches de series me preocupa que algo le preocupe. Mi padre no ha escrito, y creo que de eso deriva su extraño comportamiento.
Entro a mi habitación después de escuchar a mi madre hablarme sobre su día de trabajo. Me desplomo en mi cama y escucho un ruido que me hace sobresaltar. Prendo mi lámpara de mesa y me encuentro con Estefan, siempre me ha parecido seductor su nombre.
_ ¿Se puede saber que esta haciendo?
_ No conteste mi mensaje, no te he visto en las practicas ni a la salida, solo me preocupe.- Asume como si eso fuera justificativo de cualquier acoso.
_ ¿No se te habrá ocurrido que estoy con otro chico?- intento sonar igual que el aquel día.
_ Nai.- su tono expresa peligro. Me pongo de pie y me le acerco, no se que hago pero evidentemente el no va a venir a intimidarme en mi casa.
_ ¿Si Estefan?- mi voz es casi un susurro receloso que hasta yo me sorprendo.
_ Que complicadas que son las mujeres.- suspira y da un paso atrás dandome la espalda.
_ ¿Las mujeres Estefan? Será que no estas acostumbrado a que no todas se abran de piernas por vos, o tal vez es que ya te aburriste de las faciles y venis a probar suerte conmigo. Porque si ese es el caso ya te voy advirtiendo que estas perdiendo tu tiempo...- me corta antes de que pueda decir más.
_ No entiendes, es todo culpa tuya...- casi grita.
_ Claro Estefan, siempre es la culpa de otro ¿No? En tu mundo, en el mundo de Estefan todos son culpables menos Estefan ¿No te preguntaste alguna vez si sos vos el equivocado?
_ Es tu culpa Nai.- su voz es un susurro y se gira para mirarme, me pierdo en sus ojos, no puedo sostenerle la mirada.- Es tu culpa por ser tan dulce.- da un paso y yo retrocedo otro.- Es tu culpa por hacer que quiera estar a tu lado cuando no puedo hacerlo.- da un paso y yo retrocedo otro.- Es tu culpa por sonreír como lo haces.- da un paso y yo retrocedo otro.- Es tu culpa por hacerme desearte sin siquiera hacerlo intencionalmente, porque se que no te merezco que mereces algo mejor, que estar cerca mío te va causar dolor, es tu culpa...
_ Tenes razón es mi culpa.- se detiene en seco y me mira anonadado, ahora soy yo la que avanzo.- Es mi culpa por creerte distinto, por verte como alguien que no teme, es mi culpa por no hacerte sentir que sos exactamente lo que necesito Estefan, te quiero en mi vida, pero no estoy segura si vos en la tuya, o en realidad no estoy segura de que sea solo a mi a la que querés en tu vida.- murmuro lo ultimo, me siento totalmente a la deriva en este momento. El silencio se expande y yo solo puedo mantener su mirada con la mía. Y en menos de lo que pienso y espero Estefan me esta besando, Dios no dejes que este momento termine.
_ Nai, quiero que seas la única mujer en mi vida, no aguanto esto de ignorar lo que siento, seré egoísta pero quiero que seas solo mía.- Y el beso vuelve y la verdad no se si creerle, pero quiero estar así con el durando lo que tenga que durar.
_ Tengo que decirte algo.- recuerdo la lista.
_ Ya se lo de la lista.- asume sonriendo.- No me importa como fue que esto empezó pero no quiero que termine mi bella Nai.
Mi madre me llama en el piso de abajo y corro asustada arrastrando a Estefan de la mano, pero lo suelto abruptamente cuando veo la puerta y corro a abrazar a mi padre con lágrimas en los ojos.
_ ¿Quién es ese muchacho hija?- pregunta cuando dejamos de abrazarnos y el rubor no tarda en teñirme las mejillas. Oh oh, creo que estoy en problemas.
FIN
ESTÁS LEYENDO
Superando a mi ex
Teen FictionPensé que el era mi todo, pensé que seriamos el clásico "Felices para siempre", pensé que nunca terminaría de la forma en que lo hacen adolescentes constantemente, pensé que mi corazón jamás seria dañado, roto,hecho pedazos... cabe decir q...