RAPHAEL
Estaba sentada en el sillón leyendo, el libro que había pedido "prestado" de la habitación de Simón, no quería explicarlo pero cuando él había estado esperando al menor mientras se bañaba había sentido una vibración intensa en su pecho, Simón estaba bien, súper bien con esa toalla en su cintura, tanto que había hecho que se quedará embobado viéndolo allí parado casi al desnudo, tanto que su miembro se había entusiasmado otra vez en sus pantalones, recordando que si quería su cuerpo podía recordarle que tenia hormonas dormidas que se podrían alborotar. Pero ahora que había podido controlarse y estaba esperando a Simón, le enseñaría algunas historias de los vampiros u otras cosas importantes para que el novato pudiera aprender. Se estaba sintiendo un poco tenso, Magnus había entrado a la otra sala con el Nephilim y estaban tardando, no podía dejarlo solo en una habitación con un Nephilim, pero la puerta principal fue golpeada, lo curioso es que no estaban esperando a nadie ¿O sí? Raphael alzó los hombros y siguió leyendo, si era algún cliente de Magnus iba a tener que esperar, el brujo no dejaría de hablar con el Nephilim por ellos.
—Raphael Santiago como no dignas a abrirle a tu amigo.
Raphael soltó el libro y se paró de inmediato, Ragnor estaba frente a él, lo abrazó con alegría, nadie más que el brujo merecía un abrazo de su parte.
—Ragnor te has puesto más verde— bromeó Raphael.
Vio como Ragnor caminaba hacia el sillón y se sentaba agarrando el libro con curiosidad en el proceso, esta casa ya era como su casa también.
—Esos chistes tan malos deben ser obra de Magnus—dijo el brujo sin mirarlo—no te contagies Santiago.
El vampiro sonrió, sabía muy bien que su amigo no admiraba mucho el humor de Magnus.
— ¿Ahora lees historias modernas juveniles y romántica ?— preguntó— ¿Desde cuándo Santiago?
—Vivir tanto tiempo, ya no me queda muchos libros para leer—dijo Raphael alzando los hombros—me estaba aburriendo.
Mentira, más que mentira. El quería saber porque Simón sentía tanta fascinación a esos libros y el amor que le tenía que cada vez que hablaba de ellos se escuchaban como grandiosos.
— ¿Me estás diciendo la verdad?— preguntó Ragnor arqueando una de sus cejas.
Raphael empezó a mirar hacia todos lados, lo estaba por descubrir y recién había empezado a hablar ¿Qué iba a decirle? Si pasaba un minuto más Ragnor sospecharía y daría en el punto justo.
—Claro que si, Ragnor.
—Raphael ¿Dónde estás?
El vampiro volteó hacia donde provenía la voz de Simón y se sintió raro, la vibración en su pecho lo decía, ahora se producía con mayor frecuencia y estaba seguro que era algo vinculado con Simón, porque cada vez que se acercaba a él la vibración se hacía más intensa.
—Acá novato—dijo volviendo su vista hacia Ragnor.
Podía sentir el olor agradable de Simón, se susurraba que tenía que mantenerse mirando otra cosa y no voltear la mirada hacia el menor, si no Ragnor lo descubriría, vio como Ragnor inclinaba su cabeza para ver algo detrás de él con más atención, mientras susurraba divertido.
—Oh, entonces es eso.
Ragnor ya había juntado las piezas.
—No sé de lo que hablas— musitó Raphael.
— ¿Estoy interrumpiendo algo? Creo que iré a mi habitación— escuchó a Simón decir.
Raphael volteó a ver a Simón, no lo aguantaba tenía que tenerlo siempre bajo su mirada, llevaba su ropa mundana, una remera negra que en el centro estaba la frase de "Bienvenido a Brooklyn" en letras blancas y un pantalón deportivo gris, su pelo iba desordenado y sus manos estaban moviéndose con rapidez, apretando su remera o rascando su cuello ¿Vergüenza? ¿U otra cosa?
—O no, pequeño vampiro déjame presentarme— dijo Ragnor parándose—Ragnor Fell.
Vio como el menor estrechó su mano con Ragnor cuando se acercaron.
—Simón Lewis.
Raphael por primera vez en su vida se sentía incómodo, no sabía porque, pero sabía que Simón lo estaba y eso lo ponía así a él.
— ¿No eres muy sociable señor Lewis?— preguntó Ragnor.
A Raphael casi se le escapa una carcajada ¿Qué Simón no era sociable? Por favor si el novato hablaba hasta los codos.
—Soy un novato—dijo Simón alzando los hombros—me es difícil.
— ¡Querido pastelito verde! Al fin has llegado—se escuchó Magnus.
Agradeció que apareciera en el lugar y sintió como Simón también, ya no estaba tenso porque Magnus seria el que hablaría desde ahora.
—Magnus déjame de llamar así—se quejó Ragnor— oh espera.
Todos miraron al chico que venía detrás de Magnus, Raphael no se sorprendió tanto ya sabía que Alexander Lightwood estaba acá, pero los demás presentes si lo estaban.
—Un Lightwood aquí contigo e hijo de Maryse—dijo Ragnor—me sorprendes.
—Son negocios mi pequeña rayos de sol verde no te me pongas celoso—dijo Magnus— le mostraré la salida y vuelvo.
Vio como el Nephilim se despedía con un asentimiento de cabeza aunque ninguno le respondió, sentía curiosidad de saber a que había venido y qué precio había puesto Magnus para ayudarlo.
—Iré a mostrarle un libro al novato—dijo Raphael—vuelvo enseguida.
Cuando cambiarlo a la otra sala Raphael comenzó a revisar las estanterías tratando de encontrar algún libro para que se concentrara el menor.
—Quiero seguir leyendo el diario de Will—dijo Simón.
—No eres un Nephilim— contestó Raphael.
—Ni iris in Nephilim—se burló Simón.
Raphael se dio vuelta y lo miró arqueando una de sus cejas, no podía creer que el novato se estuviera burlando de él, volviendo a comportarse de forma irrespetuoso.
— ¿Te estás burlando de mí Simón?— pregunto Raphael.
—No señor de Fell—dijo Simón cruzando los brazos.
Raphael sonrió al escuchar aquello.
— ¿Celoso?— bromeo Raphael.
—Quisieras— musitó Simón.
Nunca se había sentido con tantas ganas de molestar a un novato al saber que podía estar sintiendo algún tipo sentimiento de celos.
—Creo que eso sonaron a celos— dijo Raphael.
—Claro que no.
Se veía tan adorable enojado.
—Está bien quédate aquí y no salgas hasta que aprendas algo—dijo el mayor.
Empezando a caminar hacia la puerta
—O solo quieres que no te vea en algo con Ragnor— agregó Simón sentándose en un sillón.
—Celos—canturreo Raphael saliendo del lugar.
Lo raro que le había pasado en ese momento es que le había gustado que Simón sintiera celos sobre un asunto que no merecía sentirlo, porque lo hacía sentir que ya que no iba a ser el único, y que posiblemente Simón también estaba comenzando a sentir una clase de sentimientos de confusión como el mayor.
![](https://img.wattpad.com/cover/79180592-288-k44741.jpg)
ESTÁS LEYENDO
No Te Enamores Del Novato. • Saphael •
Fanfiction||SAPHAEL|| ||Malec|| ||Fragnor|| Crédito de portada a: @KassandraDeLaRosaBal. ❤️ Raphael Santiago, vampiro segundo al mando del hotel Dumort, con décadas de vida y una gran jerarquía en aquel hotel, lleva la vida más tranquila que alguien pudiera t...