-Desiree eres fuerte. Te necesito, eres mi hermana pequeña, la que me molesta cuando cometo algún error, pero que también me apoya. Necesito molestar a alguien. Necesito un blanco fácil. O sea tú. Despierta Desii, Livi quiere jugar contigo...
Liam, mi hermano de 30 años estaba ahí.
Nunca lo había visto de esa manera.
Tenía ojeras bajo sus ojos, y sus ojos de color negro que normalmente tenían una chispa de humor, estaban tristes y ligeramente empañados por las lágrimas.
-Liam... yo también extraño tus bromas. Y extraño a Livi, jugar con Livi.
-A veces, desearía haberle hecho caso a nuestra madre aquella mañana. Si tan solo nuestra terquedad no hubiera hecho acto de presencia...
-Liam... ¿a qué te refieres? ¿Qué es lo que paso?
Necesitaba que Liam hablara de lo que había sucedido, pero no sabía de qué manera.
-Bien Desii, Iselin quiere entrar y verte... despierta tonta. –me dio un apretón en mi mano y se dio la vuelta.
Sin embargo antes de poder salir, se dio la vuelta y regreso hasta donde había estado hace un par de segundos. Se inclinó hasta mí y me dio un beso en la mejilla.
Abrí mis ojos desmesuradamente.
Él nunca había tenido un gesto de cariño así para conmigo.
Lo vi tomar un respiro y salir de la habitación.
Y así una vez más me quede sola en la habitación, mire fijamente por la pequeña ventana que estaba en la habitación.
Afuera se veía un cálido día.
Y una pregunta surgió en mí.
¿Podría salir?
Me voltee al escuchar la puerta abrirse una vez más.
Esta vez entro mi cuñada. Iselin era la esposa de Liam, desde hace 6 años.
Llevaba consigo un ramo de flores. Pero no era cualquier tipo de flores.
Eran flores de lavanda.
Solo una persona en toda mi vida me había dado flores de lavanda.
Aaron.
-Tonta. Te mandaron esto... su mamá de Aaron me lo dio, dijo que eran de él, pero que ella no los podía traer... Desiree, todo es un desastre desde que tu estas así.
Mi cuñada una vez más, como a lo largo de todo el tiempo que llevaba en esta situación, me infundo la duda, ¿Qué había pasado?
Todo lo que sabía hasta el momento era que Liam también había estado involucrado en el accidente, pero no sabía más que eso.
Quería respuestas y tal vez la única manera en la que las conseguiría seria por mi cuenta.
Iselin dejo el ramo de lavanda en un buró junto a mi camilla.
-¿Sabes? He hablado con él y me he dado cuenta que no es tan engreído como lo creía, hasta me empieza a caer bien... Liam y tu padre ya me dijeron.... Estúpida tienes que despertar y ¡YA! –después de que pronunciara las últimas palabras, el muro que mi cuñada solía tener, se derrumbó. Y se soltó a llorar.
-Lo lamento Ise, trataré de volver, lo prometo... lo haré por mis padres, Liam y tu, Claire, Aaron; por todos ustedes sé que saldré adelante a todo esto...
Pero conformé mis palabras eran pensadas en mi subconsciente, por fuera comencé a morir.
Mis palabras fueron consumidas por el incesante pitido que marcaba mi muerte.
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A La Sombra Del Viento
Novela Juvenil"Encuentra lo que amas y deja que te mate. Deja que consuma de ti tu todo. Porque de todas las cosas que te matarán, lenta o rápidamente, es mucho mejor asesinado por un amante." -CHARLES BUKOWSKI