Capítulo 2

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Especial por mi cumpleaños
Cinco años después.

Odiaba sus ojos.

Esos ojos fastidiosos y fríos. Odiaba que un día fueran tan claros que parecieran dorados, un dorado brillante y que otros días parecieran verdes. Odiaba no saber de que color eran los ojos de mi esposo.

Jhon tomo mi mano entre las sabanas.

-Esto funcionara, Clarisse- Dijo Jhon al ver como retiraba mi mano de la suya.

Sabía que funcionaría,  siempre era así. Pero ahora presentía que todo era diferente y que algo estaba por cambiar entre nosotros.

-Espero- Dije, volviendome hacía él y clavando mis ojos en los suyos.

Lo odiaba tanto.

Sus ojos de un color indefinido estaban posados sobre los míos. Espere con ansias ver ese brillo especial que tenía tanto tiempo sin ver. Pero ahora estaba apagado, y sabía que era mi culpa.

Mantener nuestra vida separada de los medios era una tarea difícil. Tuvimos que dejar de vernos en público, agotar las salidas fuera de casa y Jhon se refugio en su trabajo. Sabía que el trabajo lo estaba consumiendo como a mí, que nuestro trabajo nos quitaba el tiempo más importante que era con nuestra família y sabía que mi esposo estaba haciendo lo que se prometio nunca hacer. Descuidar a sus hijos por un estúpido trabajo.

No solo eras mis hijos, sino también Miranda ella necesitaba tanto a su padre, lo necesito tanto cuando Chloe tomo la decisión de mandarla a New York a una escuela de danza.

Chloe penso en lo mejor para ella a futuro, pero no lo que su hija sentía en esos momentos. Yo ya sabía lo que sentía cuando te separaban de tu família. Tuve toda una vida para sentirlo y la pequeña de Miranda lo estaba viviendo.

Jhon me abrazo por la cintura y cuando lo hizo sentimos dos enormes pesos caer sobre nostros. Caleb y Mark.

Mark cayo sobre mí y Caleb sobre Jhon. Era una vieja costumbre de mis bebés. Cada mañana ellos y Miranda llegaban a despertarnos para llevarlos al colegio o solo por molestar. Odiaba y amaba su costumbre de años.

-Mark- llame al más pequeño. Sus hermosos ojos castaños se posaron en mí - pasame mi bata, por favor.

Mark bajo de mi y camino a mi armario por mi bata.

Pase una mano por el rostro de Caleb y este me miro.

-"Ve a lavarte los dientes para llevarte a clases"

Caleb asintio y me lanzo un beso en el aire y sonreí.

-Habíamos quedado en no llevarlo hoy, es sábado- Dijo Jhon al ver a Caleb salir.

-Sí, por eso he pedido pase para llevarlo con nosotros al medio día, he pedido boletos para el partido de Baseball de esta tarde.

-Aquí esta- Mark me paso la bata -¿Y Caleb?

-Fue a lavarse los dientes, tu deberías hacer los mismo.

Hizo un pequeño puchero.

-Pero, mami...

-Hazle caso a tu mamá, Mark- Dijo Jhon y Mark salio sin rechistar de la habitación.

*

Cuando llegamos al colegio Caleb me miro desde el asiento trasero.

Froto la mano contra su pecho y me miro suplicante.

-"Por favor"

Nege con la cabeza y baje del auto.

Tras Las SombrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora