Cuestión de tiempo

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Pov Lexa. 

No podia creerlo, Cosita estaba muerta, la nación del hielo me había enviado su cabeza, pero como? ella estaba parada frente a mi viéndome con esos enormes ojos color avellana, examinándome mientras caminaba de un lado a otro por el enorme salón, Titus había decidido dejarnos solas y yo no había podido pronunciar ni una palabra desde que se fue, ella estaba sentada en uno de los escalones al pie de mi trono. Soltó un suspiros y se decidió a hablarme.

-Lexa, podrías parar, vas a hacer un agujero en el piso.- Dijo mientras se ponía de pie y caminaba hasta donde yo estaba.-tranquila si?-dijo tomando mi mano.

Sentí una ligera descarga y me pare en seco observando su mano que sostenía la mía, salte una bocanada de aire y me dispuse a hablar.

-Como es que estas viva?, Nia me envió tu cabeza tras capturarte.-dije mirándola a los ojos por fin.

-No era yo- fue todo lo que respondió.

-Créeme que esa parte ya la tenia clara Cosita-dije algo irritada, puesto que esperaba que me contase algo menos evidente.

-A lo que me refiero Lexa-Dijo soltando mi mano y caminando a el escalón de nuevo y sentandose- Es que lo que Nia hizo fue mantenerme en una celda por los últimos años.-dijo bajando la mirada al suelo.

-Que fue lo que te hizo?.- dije acercándome a donde ella estaba y sentando a su lado. 

-Ella...Me torturo los primeros días, me hizo cosas horribles Lexa.- Se tapo la cara con las manos para que no viera las lagrimas que salían de sus ojos en esos momentos.

-Hey, ya paso bien?, estas a salvo ahora-puse mi mano en su hombro para demostrarle que estaba con ella, quito las manos de su rostro y limpio sus mejillas, me dedico una tierna sonrisa y comenzó a hablar de nuevo.

-Los primeros dos dias me tuvo sin agua y sin comida, después enviaba a uno de sus guardias y me llevaba a una sala de torturas donde...-su voz se quebró en ese instante, dejándome ver como después de todo este tiempo aun sentia el vivido recuerdo de lo que le había sucedido.

-Hey, esta bien-dije mientras con mi mano derecha tomaba una de sus manos y con la otra le limpiaba las lagrimas- esta bien, no tienes por que contármelo si no estas preparada, ordenare que te preparen una habitación y te lleven algo de comer bien?.- ella aprecio sorprendida ante esto. asintió levemente y solo mi mano para secar sus lagrimas e intentar reponer la compostura.

Me levante y camine a la puerta y ordene a uno de los guardias que preparara una de las habitaciones en la plata de invitados, ya que la planta donde nos encontrabamos solo era para la comandante y la que estaba 1 planta mas abajo era para los embajadores, la planta que estaba debajo de la mía estaba vacía pero esa planta solo la compartir con Clarke. Dios Clarke, me había sorprendido tanto el regreso de Costia que había olvidado ordenarle a Titus que consiguiera algún tipo de información de como se encontraba Clarke. Sentí como Costia se paraba a mi lado y enseguida le dije que siguiera al guardia, el la llevaría a su habitación en una de las plantas inferiores, ella asintió con la cabeza y salió tras el guardia, se detuvo y volteo a verme, abrir la boca como si quisiera decirme algo pero tras unos segundos lo pensó mejor y solo dijo un:

-Gracias Heda- y continuo su camino. 

Me di la vuelta para encaminarme a mi trono y el guardia que quedaba cerro las puertas tras de mi, esto había sido demasiado, me senté en mi trono y lleve mi mano a la sien para frotarmela, se estaba haciendo tarde y decidí mejor ir a mi habitación, tenia el presentimiento que el regreso de Costia me traería uno que otro prolema.



La vida es más que sobrevivirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora