Capitulo 12

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Pov Daneh

Abrí mis ojos lentamente desconcertada, mire a mi alrededor estaba en mi cuarto, sentí algo frio en mi frente y al pasar mi mano note que tenia una toalla húmeda en ella el cual quite lentamente, intenté recordar lo que había pasado -mis padres, mi carrera, Michelle, Mierda- me levante de golpe sintiendo un dolor de cabeza repentino, me sentí mareada pero necesitaba salir de aquí necesitaba estar sola un momento, salí de mi cuarto con sumo cuidado mientras mi mareo desaparecía lentamente, bajé las escaleras con un poco de dificultad agarrándome del barandal, escuchaba un ruido en la cocina pero no había ninguna voz, me acerque lentamente intentando divisar la figura, veía un poco borroso y otra vez el mareo volvió a mi cabeza, me tambaleé un poco hasta que sentí alguien sujetarme evitando que cayera, intenté observar quien era pero mi visión seguía borrosa debido al mareo, sentí que me alzaron y pude sentir que subían las escaleras, al llegar a mi habitación me acostó en la cama yo seguía con los ojos cerrados esperando que mi cerebro dejara de moverse, sentí que colocaban una toalla mojada en mi frente pero no inmute a esto.

"-No deberías levantarte así cariño, aun estas muy débil"

Escuché perfectamente de quien era la voz, sonreí internamente y mi corazón se aceleró pero seguí sin abrir mis ojos ni responder a lo que me decía, sentí un cálido beso en mis labios, se separo y yo abrí los ojos lentamente.

"-¿Qué haces aquí? Pregunté lenta y dulcemente.

"-Wuao, nunca me reciben así cuando alguien me ve, ya sabes -rie, no me contestaste las llamadas y me preocupe por ti, cuando llegue tus padres me dijeron que te sentías mal, ellos iban de salida y les pedí permiso para quedarme a cuidarte- Dijo Alisha acariciando el borde de mi cara.

Sonreí pero de una vez mi sonrisa se desvaneció al recordar lo sucedido con mis padres, un nudo en mi garganta se hizo presente y no pude evitar soltar un par de lagrimas, Alisha en silencio me abrazo y yo descansé mi cabeza en su pecho empezando a llorar, miles de preguntas pasaban por mi cabeza ¿Por qué yo? Solo quedaba amoldarme a esta vida o solo huir e irme a vivir a Marte. Poco a poco deje de llorar, me separe lentamente limpiando mi rostro. Sentí la mirada de Alisha, subí mi mirada para encontrarme con sus ojos llenos de brillo, una pequeña sonrisa se dibujaba en su rostro.

"-Gracias por estar aquí Alisha" Dije ya mas tranquila, ¿te puedo pedir un favor? Dije

"-Claro cariño, lo que quieras hoy soy tu enfermera" Dijo sonriendo ampliamente, yo le devolví la sonrisa.

"No me preguntes por que estoy llorando, por favor" Dije bajando la mirada. No podía decirle nada de lo sucedido, no podía decirle a nadie. Ahora me sentía la persona mas desconfiada del mundo.

"No preguntare Daneh, iré a traerte sopa que hice mientras dormías ahora sabrás que realmente cocino bien, te enamoraras"- Dijo Alisha levantándose de la cama sonriendo orgullosa.

"-Eso espero porque muero de hambre y cuando esto pasa mi paladar es ¡muy exigente¡" Dije levantando la voz en las ultimas palabras para que Alisha me escuchara mientras bajaba las escaleras.

Pov Alisha

Bajé las escaleras riendo por lo que decía Daneh, llegué a la cocina revisando cada lugar aun no encontraba los platos hasta que los hallé en la gaveta de una encimera, serví con cuidado un poco de sopa el cual estaba segura le gustaría. Estaba un poco preocupada por Daneh ¿Qué le habrá sucedido para que estuviera así? Por mas que quisiera saber no podía preguntarle, me hizo decir que no le preguntaría aunque no podía negar que mi corazón se partió en mil pedazos al verla llorar de esa manera, me estaba rompiendo por dentro y no podía demostrárselo, quiero hacerle sentir que seré su fuerza cuando su mundo se derrumbe. Subí las escaleras con cuidado intentado no derramar el líquido caliente, al entrar vi a Daneh tumbada con los ojos cerrados, ella al escucharme los abrió y le pase el plato de sopa que comió con gusto, sabia que le gustaría. Coloqué el plato sobre su escritorio y me tumbe cuidadosamente a su lado acariciando su cabello,le regale una sonrisa sin dejar de acariciar su cabello.

Nuestro secretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora