Doce

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Desperté asustada, no reconocía el lugar donde había despertado, pero pronto llegaron a mi los recuerdos de la noche pasada. Suga no estaba por ningún lado y me sentí agradecida por no tener que mostrarle mi cara de recién levantada, aunque por otro lado me lastimaba que no se haya preocupado por mi. Di una llamada a mi hermana para que me llevara una muda de ropa y me metí a la ducha de los camerinos. Cuando salí tomé mis pastillas y me dirigí a conseguir una nueva víctima, teniendo éxito al encontrarme con Namjoon en un pasillo, le expliqué la situación y accedió de inmediato a colaborar. Tomé fotografías excelentes y otras muy divertidas, nos llevábamos perfectamente al contrario de lo que hubiese pensado hace unos días atrás principalmente por su ruda apariencia. Me sorprendí de su sentido del humor, cuando estábamos en la sala de ensayos y alguno de los otros chicos se querían unir a la conversación nosotros dos comenzábamos a hablar en Inglés para despistarlos, cada vez que hacíamos esto soltabamos fuertes carcajadas y al parecer a Suga no le agradaba que lo molestaramos con nuestros gritos ya que nos miraba furioso. Pronto Namjoon se comenzó a interesar por mi historia, y cuando se enteró de que hablaba español fluido me pidió que le enseñara algunas palabras para cuando viajaran a sus conciertos en Latino américa y España. Accedí y partí con lo básico.

— Hola... ¿Cómo estás?— le dije para que repitiera conmigo y al tercer intento lo dijo perfectamente. Este chico era muy inteligente.— Gracias.— seguí con mi lección.

—Gracias.— dijo Namjoon de inmediato sorprendiéndome.  

—Grachias.— escuché detrás de mi. V estaba tratando de imitarnos. 

— V se dice "Gracias", la "C" debe sonar suave.— intenté explicarle.

— Graaachiaaas.— dijo lentamente. Me di por vencida con el.

—Al parecer los idiomas no son lo tuyo.—dije con expresión divertida, por lo que los tres reímos.

Cuando volvimos a quedar solos con Namjoon le pregunté sobre sus días como Trainee y curiosamente dijo que es de los miembros que llegaron antes junto con Suga.

—Ohh... ¿Que edad tenía Suga en ese entonces?— pregunté tratando de parecer menos curiosa de lo que de verdad estaba.

—No lo recuerdo, como 17 o 18 años creo.— mierda, o sea que cuando me conoció ya había comenzado a ser trainee y no me lo había dicho... que hijo de puta...

—Ah, ya veo.— soné decepcionada.

— La verdad nadie conoce el pasado de Suga.— continuó hablando Namjoon.— cuando el grupo se formó Suga casi no hablaba, solo estaba inmerso en su música. No le gustaba estar con muchas personas, se ponía nervioso a si que comprenderás lo dificil que era presentarse ante el publico para él, afortunadamente ah cambiado un poco y ahora se ha sincerado sobre algunas cosas con nosotros, en especial con Jimin, todos sabemos que aunque Suga no lo diga él esta profundamente agradecido de que el menor lo escuche. Pero lo malo es que su carácter sigue siendo el de un perro.— ambos reímos. 

El día terminó y así siguieron pasando los días junto a los miembros, fijándome en las cualidades de cada uno. A Jin le gustaba cocinar, por lo que pasamos la tarde compartiendo recetas de cocina y tomando fotografías de Jin cocinando, cuando lo elogiaba tiraba un beso a la cámara haciéndome reír, no podía evitar verlo como la madre le los otros chicos. Con J hope, al igual que con Jimin comenzamos a practicar un baile y logré tomar algunas fotografías de sus volteretas que eran perfectas, su alegría contagiaba a todo el mundo. Kookie era un amor, cada vez que intentaba hacer contacto visual con él desviaba su mirada y se sonrojaba. Al parecer le tenía miedo a las chicas, aún así, al momento de sacar mi cámara transformaba su expresión a la de un chico maduro.  

Cuando pasaron 2 semanas, el CEO me llamó a su oficina y me dio nuevas instrucciones, al parecer la producción del nuevo álbum se había retrasado y no saldría hasta el tercer trimestre del año, por lo que ya no me necesitaba hasta nuevo aviso. Le mostré mi avance y quedó muy satisfecho por lo que  decidimos que tomaríamos unas cuantas fotografías grupales más para sacar una especie de "revista" como edición especial.

Cuando le conté a los chicos se sintieron apenados, habíamos creado fuertes lazos en poco tiempo, especialmente con Jimin. Suga se mostraba indiferente, pero ese día en particular estaba más molesto que de costumbre.

Finalmente llegó el día de la última sesión fotográfica, la cual era más profesional por lo que todos estaban usando maquillaje y vestimentas llamativas. No pude contener la risa al ver a Suga con pantalones cortos y delineador de ojos.

— ¿Te estás burlando de mi?¿Te parezco gracioso?— dijo Suga muy molesto.

— Lo siento.— solté otra risita.— años atrás jamás hubiese imaginado verte así.— De pronto comenzó a suavizar su expresión.

— Es la primera vez que te veo reír así.— quitó sus ojos de mi  y se puso en posición con el resto de los chicos. Por primera vez los veía como profesionales y mentalmente me dije que extrañaría a estos chicos. Comencé con las fotografías y paré por un momento debido a la intensa mirada de Suga a través de la cámara, me estaba quemando.

Volvimos a la empresa y comencé a arreglar las cosas para irme, mi trabajo había terminado. Me despedí de los chicos, menos de Suga que miraba desde lejos. Cuando llegué donde Kookie apreté sus mejillas y este se puso rojo, mientras que cuando llegué donde Jimin lo abracé con fuerza, extrañaría las charlas con ese chico que parecía un bebé pero que era más maduro que cualquiera de nosotros juntos. 

Tomé las cosas de mi estudio y de pronto Suga apareció de la nada por la puerta, caminó hacia mi rápido y tomó mis muñecas dejándolas sobre mi cabeza mientras me apretaba contra la pared.

— ¿Qué crees que haces?— le grité enojada.

— ¿No pensabas despedirte de mi?— me miraba con ojos suplicantes.

— Estabas con cara de culo en la parte de atrás, ¿Quién en su sano juicio se acercaría a ti?— cerró sus ojos, pero cuando los abrió su mirada era intensa.

— Al parecer estabas ocupada despidiéndote cariñosamente  de Jimin.— hablaba con ironía.— ¡Me has estado ignorando todos estos días maldita sea!

—No sabía que estábamos en la clase de relación en que teníamos que darle explicaciones al otro.— hablé lo más tranquila que podía, ya me estaba poniendo nerviosa.

—¿Ah no?— Se acercó lentamente, podía sentir su respiración. Tomó mis labios lentamente, olvidé la ira, el enojo, todo el odio que había sentido por el estos últimos años y me dejé llevar. Soltó el agarre de mis muñecas y puso una mano en mi cuello y otra en mi cintura. Yo no me quedé atrás y me abracé a su cuerpo sintiendo como ya no quedaba espacio entre nosotros mientras sus temblorosas manos me indicaban que él estaba casi tan nervioso como yo. Aumentó la profundidad del beso y lo seguí, ya no eramos unos adolescentes maldita sea y mi cuerpo lo sabía. Cuando nos separamos para recuperar el aire y él intentó besarme nuevamente lo aparté, esto estaba mal, tomé mi bolso y corrí por el pasillo, Suga me siguió y a la fuerza me llevó hasta su estudio, intentó cerrar la puerta y en ese momento vi las notas que había intentado ocultar de mi sobre el escritorio. En ellas habían solo tristes y desgarradoras palabras, lo último que alcancé a leer me partió el alma.

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Los doctores me preguntaron si alguna vez había intentado suicidarme...dije sin vacilar que había estado así antes.

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A partir de aquí les recomiendo que escuchen la canción The Last del mixtape de Suga (se las dejaré aquí abajo), ya que tiene gran relación con la personalidad del Suga del fic.

No olviden votar y comentar.

Los amo <3

First Love | Suga | Min Yoongi | BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora