16. Tornado warning.

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El clima estaba comenzando a templarse un poco y ese día estaba lloviznando copiosamente. El verano se estaba retirando lentamente para dar paso a la temporada otoñal. El tiempo pasaba con lentitud y la somnolencia se apoderaba de la mayoría.

Valentina estaba sentada perezosamente en el último asiento. En su pequeña libreta trazaba algunos pequeños dibujos para poder combatir el aburrimiento y letargo que estaban haciéndose presentes en el salón. María y Dmitry hablaban cómodamente a un lado del salón y en el otro Kai y Sujin hacían lo mismo.

La Srita. Wilson había tenido problemas con su auto, por lo que había llamado para excusarse y anunciar que no podía asistir a clase. Ese había sido el detonante para salir del salón sin explicaciones y dedicarse a vagar por el lugar. El edificio estudiantil no contaba siquiera con dos plantas, así que no le tomó mucho recorrerlo por completo. Sin embargo, al darse vuelta en uno de los pasillos, escuchó una triste melodía en piano proveniente del auditorio.

Se detuvo y escuchó algunos acordes más justo antes de darse y vuelta para caminar rumbo hacia el lugar de donde provenía la música. La puerta del auditorio estaba entreabierta y ella entró silenciosamente por allí. El piano de cola estaba a un costado en la parte de adelante y, debido a la tapa abierta y al ángulo, no se veía con claridad al intérprete. A pesar de que Valentina no quería interrumpir, se aventuró a ir aun más cerca.

Bruce alzó la mirada de las teclas y la miró sin de dejar de tocar, aunque lentamente la música se extinguió. Valentina se dirigió hacia él y le sonrió.

-Se escucha precioso-dijo ella en forma de disculpa. Bruce se movió un poco hacia la izquierda para que ella también se pudiera sentar en la butaca del piano con él. -Continúa tocando-pidió al ver que había detenido.

-Como ordene-murmuró él, interpretando ésta vez una balada rápida. Era bastante ágil y sus dedos viajaban por el piano con facilidad. Valentina cerró los ojos por unos segundos para disfrutar mejor la música. Al finalizar la canción, ella aplaudió un poco. Bruce rio negando con la cabeza e hizo una venia como si estuviera frente a una multitud de personas.

-Eres bastante bueno-lo felicitó la chica empujándole el brazo juguetonamente para intentar que se equivocara en la nueva canción. Valentina reconoció la melodía de "Bailando" y sonrió inevitablemente, mientras el muchacho la tocaba magistralmente. La chica la tarareó en voz baja mientras, con su pie, golpeteaba el suelo con el ritmo de la canción. Eso había estado asombroso.

La temperatura allí adentro estaba un poco más baja que en el resto del edificio, de modo que Valentina había comenzado a sentir algo de frío. Cruzó los brazos para tratar de mantenerlos calientes y habló un poco más con Bruce, que de hecho era un chico bastante gracioso e interesante. Sin embargo, en cierto momento sus manos se juntaron en el piano, cuando el chico le estaba enseñando a tocar "twinkle, twinkle, little star" y él se dio cuenta de cuán helada ella estaba.

Era natural, pues en Colombia no existían temperaturas tan extremas, y ella no había pensado en que dentro del edificio pudiese necesitarlo, dado que tenían calefacción, pero se había equivocado.

Bruce, como un buen caballero, se despojó del saco gris que usaba y se lo ofreció a Valentina. Ella lo aceptó gustosa y se lo puso por encima de la cabeza, desordenando un poco su cabello. Olía demasiado bien y le quedaba tan grande que le llegaba hasta por debajo de los muslos. Sonrió en agradecimiento y el castaño le acomodó un rizo que se había salido de su lugar.

Krisna, acompañado de Leigh, había entrado al auditorio totalmente distraído, pues había olvidado su folder en una de las bancas traseras del auditorio la última vez que había estado allí. No obstante, su mirada se dirigió hacia adelante en el momento justo en el que Bruce se enderezaba en la banca del piano y una chica se separaba un poco. Cuando ésta se volteó, pudo reconocer el rostro que había tenido en su cabeza por los últimos días. Se sintió mareado.

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