Capítulo 119- Thomas, El Borracho.

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Ya habíamos matado a todos menos a los empleados del bar, que los obligamos a servirnos tragos y al DJ, lo dejamos vivo, para que ponga buena música.

Seguimos tomando y bailando.

-Aixaaa, voyyy irrrr caaaassssa- me dijo Thomas, estando ebrio.

-Ok. Te acompaño- dije.

-Noooo- me dijo y balbuceó algo que no entendí.

-Sally, vigila todo, ya vuelvo- dije.

-Si señora- dijo e hizo una seña al estilo militar.

-¿Puedes con esta misión?- dije.

-Si. No te preocupes- dijo Sally.

-Ok. Vuelvo en unos minutos- dije.

-No hay problema. Yo tengo todo controlado- dijo la pequeña.

Agarré a Thomas de un brazo, para ayudarlo a caminar y lo guié a la casa de sus padres.

Al llegar, agarré las llaves que están detrás de una maceta contra la pared y abrí la puerta.

Ayudé a mi amigo a ir al baño, le lavé los dientes y lo llevé a su habitación, donde él se tiró a la cama y dejó de moverse, por lo que supongo que se durmió.

Tapé a mi amigo, con sus sábanas y salí de la habitación.

En silencio, fui hacia la puerta, pero el el living, me detuvo la madre de Thomas.

-Hola Aiza. Feliz cumpleaños- me dijo.

-Gracias- dije-. Te dejo a tu hijo, dormido en su habitación.

-¿Otra vez borracho?- preguntó.

-Sip. Como siempre- dije.

-¿Cuanto bebió?

-Poco- mentí.

-No me mientas-  dijo, algo enojada.

-La verdad es que no lo se, eramos muchos amigos y perdí la cuenta, de cuanto bebió cada uno- dije.

-Está bien- me dijo.

-Hasta pronto- dije.

-Hasta pronto- dijo.

Salí de la casa y volví al boliche, donde seguí vigilando, junto a Sally, que bailaba (estando sobria) con Ben.


Continuará...

La Chica WafflesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora