El Psicópata (Rubius y tu)[Adaptada]||Terminada||

*19*

Narras Tú:

Rubén se recostó junto a mí. Me empezó a contar como era su vida antes de estar en el manicomio. Me conto que su familia casi nunca estaba en casa y que fue criado pro su prima, unos años apenas mayor que él. Un día ella lo regaño y Rubén estaba enfadado, me dijo que no recordó más que el cuerpo de su prima tirado al final de las escaleras, su cabeza sangraba y parecía tener la pierna y el brazo rotos. Rubén estaba hasta arriba de las escaleras, y... No fue difícil para el imaginar lo que había pasado, incluso aun podía recordar el grito de su prima al caer por las escaleras...

Me conto cada detalle. Me dijo que empezaron a llevarlo con un psicólogo y a tratar de ponerle más atención pero no funciono.

Unos años después lo internaron en el manicomio, al principio iban a visitarlo todos los días, pero luego poco a poco dejaron de ir. Fue muy triste escucharlo decir eso, con cada palabra su voz se quebraba más y más...

Llego la tarde y yo me quede dormida. A los pocos minutos, sentí un metal frio en el lado derecho de mi cadera, un escalofrió recorrió mi cuerpo, no sabía que era.

Luego escuche que Rubén me susurro en el oído:

Rubén: ______________. Necesito que me hagas un favor. Haz como si durmieras.
Tu: ¿Para qué?
Rubén: Para salir de aquí

No le conteste, no sabía de qué me estaba hablando, además no sabía que era aquella cosa de metal que traía en mis pantalones, pero estaba segura de que algo tenía que ver con Rubén.

Rubén: Por favor. ¿Podrías hacer eso por mí?

Suspire y asentí.

Rubén se movió de lugar en la cama, sentí como desato lentamente mis pies. Me sentía aliviada de que solo fuera a hacer eso. Al menos eso pensaba yo...
Tomo mis piernas y las separo poniéndose él, en medio. Se inclinó y beso primero mi mejilla y después mis labios. Se fue acercando más mientras besaba mi boca, fue subiendo sus manos hasta mis caderas.

Tu: Rubén... -Empecé a decir en un susurro mientras el besaba mi cuello- Por favor... No lo hagas

El me beso en los labios supongo que fue un "Silencio".

Subió un poco más sus manos.
Sentí como el metal que había en el lado derecho de mi pantalón se movió un poco. Rubén se detuvo. Bajo mis piernas cuidadosamente y levanto un poco el final de mi remera. Saco esa cosa de metal y volvió a bajarme la blusa. Se acercó a mí y me susurro: "Un último favor. Pase lo que pase. No abras los ojos, por nada del mundo abras los ojos _____________"
Rubén me desato las manos. Tuve ganas de golpearlo y seguir golpeándolo por lo que había estado a punto de hacerme. Pero él fue más rápido, tomo mis manos y las puso detrás de mi espalda. Yo empecé a patalear. Pero de nada sirvió. Después de que hubiera atado mis manos. Se puso de pie.

Rubén: _____________, por favor, cierra los ojos.

Yo negué con la cabeza.

Rubén: No te hare daño, lo prometo. Cierra los ojos. –dijo mirándome fijamente a los ojos, tenía las manos en la espalda, así que no podía ver que era esa cosa de metal que Rubén había puesto y sacado de mi pantalón. No sé qué cosa era, pero algo en la mirada de Rubén me suplicaba que cerrara los ojos. Resople y cerré los ojos, Rubén se acercó a mí y beso mi frente.

Unos segundos después escuche como la puerta se abría bruscamente. Cerré los ojos fuertemente, escuche varios pasos, forcejeos y después... Un disparo.