Rachell
Es viernes son las 2 de la tarde y Christian esta en el trabajo, estoy sola en casa, bueno no tan sola ya que mi bebe está conmigo, acaricio mi vientre suavemente sonriendo.
Antes no quería un bebe, por el miedo de ser mala madre, todavía lo pienso pero cuando veo a Christian muy contento hablando con mi bebe o acariciando mi vientre todo lo que pienso desaparece y espero que ya llegue el día para tener a mi bebe en mis brazos, y ver muy feliz a Christian.
Tomo mi celular y llamo a Sam que me contesta al segundo tono.
-Nena –dice alegremente.
-Sam –sonrió.
-¿Qué pasa nena? –pregunta.
-Nada, solo llamo para saber como estas, y si podemos salir por ahí –le digo.
-Mmm pues estoy bien, ¿quieres ir al cine? ¿A comer? ¿Al parque? A donde tú quieras –me dice.
-Quiero ir a comer –sonrió.
-Está bien nena, paso por ti a las 6 ¿está bien? –pregunta.
-Oh si –me levanto del sofá.
-Bueno nos vemos mas de rato eh, ponte guapa Mamá...-dice riendo.
-Oh claro que si –rio.
-Bueno te veo de rato, besos...
-Igual besos Samuelito –cuelgo.
Bueno todavía ni son las 3 así que puedo hacer algo, pero el problema es ¿qué puedo hacer? estoy embarazada, hablare con Christian sobre estar todo el día sola en casa, no me gusta, me siento sola, necesito hablar, reír con alguien, quisiera que Christian estuviera más tiempo en casa, hoy no vino a comer ya que tenía una junta, y llegara tarde eso dijo esta mañana que también se fue muy temprano.
Subo las escaleras, entro al cuarto y voy directo al baño donde abro el grifo para que la tina se llene, me quito mi ropa, cuando quedo desnuda me pongo mi bata, anudándola, tardara en llenarse así que llamare a Christian, salgo del baño y agarro mi celular que lo deje en la cama, marco su número, no me contesta así que vuelvo a llamar y nada, una tercera vez y tampoco, así que desisto dejo el celular en la cama y vuelvo al baño, me siento en la mesa del lavabo a esperar que la tina se llene.
Pasan como 10 minutos hasta que la tina esta casi llena, me bajo del lavabo me quito la bata y entro con mucho cuidado, me recargo cerrando los ojos.
Mmm...escucho un ruido, un sonido de alguna parte, abro mis ojos mirando a todas partes, estoy en la tina, me quede dormida, el sonido proviene de la recamara, así que me levanto con cuidado agarro la bata.
Tomo el celular que deja de sonar, miro que es una llamada de Christian, en ese momento vuelve a sonar así que contesto.
-Chris...
-¿Por qué no contestabas el celular? –dice casi gritando.
-Oye espera –contesto.
-Tengo llamadas perdidas tuyas y cuando llamo tu no me contestas –dice.- ¿Estás bien? ¿Necesitas algo? ¿Te sientes mal? –pregunta rápidamente.
-No estoy bien –me siento en la cama.
-Entonces ¿para qué me llamas? –dice.
-Solo quería escuchar tu voz –me siento mal por esto último que me dice.
-Estoy muy ocupado hablamos luego –dice.
-Si claro...–siento las lagrimas acumularse en mis ojos.
ESTÁS LEYENDO
Siempre junto a tí
RomanceLa historia de Rachell y Christian continua en la tercera parte Siempre junto a tí sigue leyendo esta historia y descubre que pasara siempre con sus vidas, si ya los van a dejar ser felices o les seguirán fastidiando su amor.