Familia.

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Su relación no era un secreto.

El hecho de que aquellos dos fueran pareja no fue una sorpresa para el mundo.

Ahora podrían demostrar su amor sin barreras.

Pero aquello era diferente...

-¡Yurio calmate!

Él quinceañero lloraba desconsoladamente en un rincón de la sala, intentando ser calmado por un pelinegro.

Y un albino miraba todo con una sonrisa divertida.

Plisetsky los había encontrado en pleno acto.

Flashback

La habitación estaba llena de gemidos, palabras sin terminar, jadeos y el sonido sus pieles chocando.

Él rubio había salido, y aquello era una oportunidad perfecta para tener un poco de intimidad.

No contaban con que Plisetsky llegará antes.

-Cerdito, viejo ya lleg...

El silencio inundó el lugar.

E inmediatamente un grito para nada masculino termino con el.

Ambos amantes se separaron rápidamente. Yuuri soltó un gemido de dolor, Viktor salió de él de manera brusca.

-¡¡Par de pervertidos!! -él rubio tapó sus ojos con sus manos, saliendo de la habitación con el rostro ardiendo.

Viktor estalló en carcajadas.

-¡Imbécil no te rías!

Viktor dejó de reír al escuchar a su pareja hablar entre lágrimas.

-¡Lo siento mi amor!

End of flashback.

-¡Si te calmas iremos de compras! -Yuuri utilizo su último recurso para calmar al rubio.

Y funcionó.

Él rubio dejo de llorar para mirar al más alto.

Sus ojos brillaron emocionados, y sin poder evitarlo abrazo a Yuuri.

-¿De verdad?

-Sí... además -Yuuri se acercó a su oído para susurrarle- Viktor pagará todo, así que pide.

Ambos se miraron cómplices.

Y su mirada se dirigió a el mayor de los tres.

-¿Qué?

Una sonrisa maliciosa apareció en el rostro de Plisetsky.

-¡Vamonos! -él rubio salio emocionado de la casa haciendo soltar una risita a Yuuri.

Y ambos lo siguieron.

Bueno, Yuuri tardo un poco más, se le dificultaba caminar.

Después de 3 largas horas de compras, los patinadores decidieron comprar un helado, por capricho del más pequeño.

Tras llegar a la heladería más cercana y ocupar una de las mesas, decidieron aclarar las cosas.

-Ya te compré ropa y ahora un helado. La deuda esta saldada. -Nikiforov se apresuró a hablar, él rubio le había hecho gastar una buena suma de dinero.

Su cartera lloraba en silencio. Yurio no tenía límites a la hora de comprar ropa.

-Viejo, aún no. ¿Saben? Me hicieron sentir como un niño que acaba de ver a sus padres tener sexo. -él rubio hablo avergonzado.

Hasta que una idea extraña y divertida llego a su mente.

Sonrió malicioso.


-¿Deseas algo más Yurio? -él pelinegro habló de la manera mas tranquila que podía y con su rostro ardiendo, cualquier cosa con tal de no tener que soportar a un rubio dramático.

Y Viktor deseo que no fuera más ropa.

-Sí mamá.

Nikiforov estalló en carcajadas. Y su cerdito se sonrojo aún más.

-¡Yurio soy hombre!

-No me importa, a partir de hoy tu serás mi mamá y el viejo papá. -Yurio sonrió, no lo hacía con burla.

Bueno, tal vez un poco.

Pero realmente así se sentía con ellos algunas veces. Más bien desde que se mudó con ellos a Japón.

-¿Eso era todo hijo? -habló entre risas Viktor, aquello le halagaba y le divertía.

Yuuri suspiro.

-De acuerdo. Supongo que no será tan malo.

Plisetsky sonrió.

Aquella era su nueva familia.

Una extraña y divertida familia.

Pero familia, al final de cuentas.

¡Holo! ¿Cómo están?

Primer capítulo publicado. ✔

Lamento si quedo muy corto, pero eso fue lo que salió :c.

Trate de hacerlo con humor y de acuerdo a sus personalidades.

Espero les haya gustado ♡.

¡Nos leemos luego!

-Yos. ♡

Familia [Yuri On Ice]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora