La Dueña De Todo - [Golddy] [Finalizada]

Capítulo 2

La rubia comía con desgano su cereal, no tenía nada de hambre pero Verónica literalmente le rogó por que comiera algo. No podía negarle esa petición a Verónica, ella era como una hermana mayor con un actitud muy maternal. Jeffry se encuentra a su lado leyendo su agenda.

— Joven Golden, su abuelo me preguntó si ya eligió prometido — Jeffry la mira interrogante, la chica se atraganta con su cereal al escuchar aquello.

— ¡¿Que cosa?! ¡¿El abuelo esta loco?! ¡¿Ya le llegó la andropausia?!. — Grito enojada. — ¡Dile que no planeó casarme! Y que no se le ocurra nada, por que yo lo averiguare —

— Dudó que la andropausia tenga algo que ver con las decisiones de su abuelo, pero le daré el mensaje. — dijo tomando nota, en eso su teléfono empieza a sonar. — ¿Bueno? [....] — Jeffry hace un gesto de fastidio al escuchar la voz al otro lado de la línea. — Es para usted Señorita.

Golden toma el teléfono. — Habla Golden. —

[Hello doradita.~]

La cara se Golden se ilumina al escuchar no una, sino dos voces súper familiares que siempre le alegran el día

— ¡Osita! ¡Pastelito! ¡Que alegría escuchar sus voces!. — A Golden le alegra escuchar las voces de dos buenas amigas, rápidamente toma su café con leche y come tres cucharadas de cereal para alejar el plato y levantarse. Debía ir al ensayo de su banda.

[¡Ay querida! No hemos sabido nada de ti en días, vimos tu entrevista en la TV ¿¡pero cuando piensas salir con nosotras!? Ya casi no pasamos tiempo juntas.]

— Lo se, lo se... ¿¡Y si salimos esta semana?! ¡Vamos de compras! ¡Debo contarles algo súper cool!. —

[¡Omg! ¡Un chisme! ¡¿Escuchaste pastelito?!.

¡Ósea! ¡Claro que escuché! ¡Definitivamente debemos ir al centro comercial! Hay remates y liquidación]

— Me parece perfecto! Un segundo... — Golden ve a Jeffry. — ¡Jeffry! ¿Que día tengo disponible?. — habló emocionada

— El viernes de 3 de la tarde a 9 de la noche estamos libres Señorita. — Hablo mirando la agenda

— ¡Pues iremos al centro comercial! Así que ya no estamos disponibles ese día. — sonríe ampliamente para regresar a la llamada. — Chicas, el viernes por las tarde.

[¡Yay! Día de compras.

Sera fa-bu-lo-so, entonces nos vemos dorada]

— Bye bye chicas — Golden corta la llamada emocionada, dio un chillido y un pequeño saltó. — ¡Yay! ¡Día de compras! Por fin tendré ese lindo vestido blanco, y la blusa rosada, y las diez faldas de color pastel que vi. Sera increíble. — dijo emocionada.

— ¿Señorita Golden, por que se emociona tanto? Usted y sus amigas salen muy a menudo. — Verónica levanta los platos de la mesa, Golden fija su vista en el teléfono y sonríe nostálgica.