La Dueña De Todo - [Golddy] [Finalizada]

Especial: Monster 2

— No a venido... — dijo Freddy mirando el sendero que lleva a la salida del bosque

— Tal vez esta ocupada Freddy, su vida no es solo venir por las noches a vernos —

— Pero... —

— Ya se que a pasado una semana desde que la vimos, pero no podemos obligarla. Lo mejor es olvidarla —

Freddy miró al suelo, ¿sera que Golden se olvido de ellos? Se suponía que eran amigos

— ... Sera mejor que nos vallamos, si alguien nos ve por aquí sospecharan —

El ser de dos cabezas se dio medía vuelta para tomar rumbó a las profundidades del bosque

— No te pongas mal Freddy, era obvio que en algún momento nos dejaría — Fred intenta consolar a Freddy, pero aquello solo lo entristeció más

— ¡Freddy! ¡Fred! — se detuvieron al escuchar aquel gritó de la voz fácilmente reconocible

— ¡Golden! — exclamaron ambos para voltearse y ver a la rubia correr en su dirección, su cara muestra angustia, al estar cercanos la rubia toma la muñeca de ellos y los empezó a arrastrar

— ¡Oye! ¡Barbie mal teñida! ¡¿Donde cojones te habías metido?! —

— También te extrañe Fred — dijo Golden sin parar de correr, Fred se sorprende y desvía la mirada con una mueca de enojo, Freddy se ríe

Golden lleva sobre su espalda una mochila color azul, no llevaba aquellas típicas ropas costosas sino una sudadera café e un pantalón deportivo verde, su cabello esta atado en una coleta alta y ajustada.

— Golden ¿Que ocurre? — pregunta el castaño

— Mi abuelo en estos días me descubrió escapando para verles, me encerró en mi habitación y no había salido durante una semana, a la final no pude más y partí la ventana de mi habitación, mira — Golden le mostró la mano opuesta con la que los sujetaba, la mano derecha de Golden esta cubierta de sangré, uno que otro vidrio están clavados en su piel y estaba ligeramente hinchada

Freddy y Fred hacen un gestó de dolor, Fred se tapó la nariz pues la sangre tenía un olor muy fuerte tanto para el como para Freddy solo que el otro no parecía molestarle aquel olor

— ¿Y por que corremos? —

— Mi abuelo me esta siguiendo — apunta atrás, tanto Freddy como Fred giran sus cabezas para ver como una limusina los persigue

— ¿¡Nos persigue en una limusina?! —

— Obviamente no ira a pie —

La rubia seguía jalando al monstruo al interior del bosque, ella sabía que se arriesgaban bastante a encontrarse algún monstruo peligroso y que podrían morir –considerando que el de dos cabezas no tenía poderes o habilidades sorprendentes– pero era la única manera de perder a su abuelo