I Think I'm Crazy (2º Parte "Must Be Crazy")

Capítulo 28

¡Hola! :D

Al final volví antes de lo esperado, pero es que no podía dejaros con la intriga (y más con lo corto que fue el capítulo anterior ><)

Este capítulo es largo, salseante y bastante interesante, así que espero que os guste tanto como a mi a la hora de escribirlo :3 La verdad es que es el capítulo más largo que he escrito de este fic, pero a partir de ahora creo que serán muy extensos porque hay salseo... e.e

Muchísimas gracias por los votos, los comentarios y por toooooooodo el amor que le dais a esto ♡ En serio, ¡me encanta! :D

Así que sin más dilación, aquí os dejo el capítulo 28

¡Disfrutadlo! ♡

~♡♡♡~  

[IWAIZUMI P.OV]

No podía parar el incontrolable llanto que me invadía. Necesitaba descargar toda la frustración que había estado guardando este fin de semana.

Había pasado estos dos días esperando por Wendy, esperando que la chica de mis sueños apareciera por esa puerta. Si lo hubiera hecho, hubiera actuado como si no hubiera pasado nada, como si no me hubiera dicho aquellas palabras.

Seguía sin poder creer que me hubiera dicho aquello; aunque me imaginaba que algo pasaba entre ellos, y más sabiendo lo cercanos que eran. Tenía la esperanza de que solo fueran buenos amigos, incluso Wendy me lo confirmó más de una vez... Pero esto... No quería creerlo.

"Kuroo es alguien especial para mi. Fue quién me ayudó a integrarme aquí, y gracias a él he conseguido unos buenos amigos, y una feliz vida... Y es algo que siempre le agradeceré; aunque no sé de que manera hacerlo"

Recuerdo perfectamente el brillo en sus ojos al hablar del antiguo capitán de Nekoma. La felicidad que irradiaba cada vez que me hablaba de él, o de las cosas que había hecho cuando yo aún vivía en Miyagi...

Muchas veces pensé que no había sido nada más que una molestia en el camino de Wendy. Sabía muy bien que ella seguía albergando sentimientos por mi... Algo que me dijo aquel día, y que no olvidaré.

FLASHBACK

Unos años atrás...

Me encontraba fregando todos los utensilios que se habían utilizado para cenar aquella noche, que no habían sido pocos.

Todo el mundo se había ido hacía unos minutos, y Mika y su amiga Wendy estaban arriba, en la habitación de Mika, donde mi hermana había invitado a su mestiza amiga a pasar la noche... Esa noche de sábado que siempre pasaban las dos juntas.

No iba a negar que tenía envidia de la relación de aquellas dos, la que en parte me recordaba un poco al idiota de Oikawa, pero a mejor. Puede que su carácter me causara nostalgia de mi mejor amigo, pero era mucho mejor para la vista, ya que ella siempre solía tener una bonita sonrisa coqueta en la cara que no me molestaba.

Me había acostumbrado a su presencia aquí, y eso no podría presagiar nada bueno, ya que sabía que ella coqueteaba conmigo, no escondiendo sus claras intenciones.

No podría hacer algo como aquello. Ella era la mejor amiga de mi hermana menor, una chica preciosa, y que no pegaba para estar con alguien como yo. Ella necesitaría a alguien que estuviera a su altura, que no tuviera el mal humor que yo tengo... Y que sobre todo no le importe la atención que ella recibe de los demás.