I Think I'm Crazy (2º Parte "Must Be Crazy")

Capítulo 20.2

Hola~

He vuelto más pronto de lo esperado ^^ Y me alegro por ello :3 Este fin de semana no tenía nada que hacer (y además estoy un poco resfriada... así que también me viene bien estar en casa), así que he decidido ponerme a escribir y compensaros la espera de la semana anterior D:

Aunque ha pasado un corto periodo de tiempo entre un capítulo y otro, ha tenido muy buenas reacciones y me alegro que os esté gustando ^^

Así que disfrutad de la 2º parte del capítulo 20~

POR CIERTO! Casi se me olvida... YA HEMOS LLEGADO A LOS 3K!! ♡♡♡♡♡♡ Muchísimas gracias de corazón por todo! ¡Sois los mejores! ♡♡♡♡♡♡

Un besazo enorme ♡♡♡

~♡♡♡~ 

[KAGEYAMA P.O.V]  

Cansado del duro entrenamiento que había tenido con mi equipo de la universidad, me dispuse a abrir la puerta de mi casa. Necesitaba dormir por días. Tenía demasiado cansancio, pero sobre todo cansancio mental. 

Aún seguía haciéndome a la idea de que Mika no quería saber nada de mi, y que estaba muy cansada de todos nosotros.

Pero yo seguiría luchando por ella... Aunque sabía que no estaba bien. Era egoísta por mi parte no darle su espacio y dejarle tener una vida lejos de mi.

Pero realmente necesitaba a Mika a mi lado. La necesitaba conmigo. 

Con un suspiro entré por la puerta. Para sorpresa mía, me encontré con unos zapatos que conocía muy bien, junto con otros que no sabía de quienes se trataban.

¿Qué estaba pasando aquí? ¿Ya era Enero y ni me había enterado?

Con cautela me dirigí hacia el salón, para confirmar de que todo lo que estaba viendo no fuera un sueño. Pero no lo era. Allí, sentada en el sofá junto con alguien que no había visto en mi vida, se encontraba Anzu. Por el aspecto de su acompañante, podría asegurar que era extranjero. Era alto -aunque no tanto como-, de complexión atlética; pelo rubio peinado hacia atrás, y ojos azules claros muy brillantes.

Cuando ambos se dieron cuenta de mi presencia, dejaron de hacerse las carantoñas que se estaban haciendo... Y no sé porqué no me sorprendía. Escuché tantas cosas de Anzu en este año en el que llevamos juntos, que hubo un momento en el que simplemente lo ignoraba. No quería saber si era cierto de que usaba a las personas a su conveniencia; al igual que no quería saber las cosas que hacía cuando yo no estaba con ella. Lo único que yo deseaba era que alguien me entendiera y me apreciara tanto como Iwaizumi Mika lo hizo en su día; que no huyera cuando mi mal humor salía a flote; y que empezara a quererme como la persona que era.

Aunque toda mi vida haya dado la imagen de chico solitario y de carácter frío que no necesita la compasión de nadie... En el fondo si la necesitaba.

E hice que esa persona que me entendía y no me temía, empezara a odiarme por no saber que es lo que quería.

Y todo por no querer estar solo.

-Kageyama-Kun...- habló Anzu con aquel tono de voz que tantas veces había usado conmigo. Ese suave tono de voz que ahora me parecía irritante.