I Think I'm Crazy (2º Parte "Must Be Crazy")

Capítulo 31

¡SORPRESA! 

No os lo esperábais, ¿eh? :D

Hoy hay ración doble porque estoy de buen humor :3 (y porque es mi regalo de Navidad para vosotros xDDD) 

En realidad es porque las fiestas están cercas, y como sabéis en vacaciones es bastante difícil pasarse por aquí porque quieres hacer mil cosas xDDD Así que hoy vengo con doble capítulo ^^ Aunque esta semana habrá tres capítulos (o al menos eso espero D:). Si me da tiempo, para el miércoles hay otro capítulo :)

En este capítulo se cuentan muchas cosas, así que espero que lo disfrutéis tanto como yo a la hora de escribirlo ♡ 

Disfrutad~ ♡

PD: Siento si hay alguna falta de ortografía, pero es que la emoción me puede y lo más normal es que haya más de una ><

~♡♡♡~

[MAYA P.O.V]

Unas horas antes

Estaba decidida a ello. Tenía que enseñarle esto a mi tío. Era necesario que viera en lo que se había convertido su querida hija, la que tanto quería y protegía.

Me había llevado varios días siguiendo los pasos de mi prima. No estaba tan mal como aparentaba estar. La había pillado salir de aquel apartamento que un día había pertenecido a Kageyama y a ella, sola, pero no parecía tan afectada como lo aparentaba en los medios. Ella iba siempre con una mascarilla en la cara, para que nadie la reconociera.

La muy mala persona -por no empezar a insultarla-, seguía con una vida normal, feliz y saliendo a la calle como una persona normal... Y recibiendo el cariño y apoyo de aquellos que la creían inocentes; pero lo que ella no sabía es que yo tenía pruebas de que había engañado a todo el mundo, siendo ella realmente la mala de aquella película.

Cuando todo esto saliera a la luz, iba liarse muy fuerte, porque esta persona había hecho cosas que no eran normales. ¿Cómo se podía ser tan mala persona como destrozar la vida de alguien que alguna vez se interesó por ella?

Volví a aquella casa a la afueras, donde vivía mi tío, con unas pruebas que esperaba que le abriera los ojos de una maldita vez y se diera cuenta de la clase de hija que había criado durante estos 22 años.

El mayordomo me hizo esperar hasta que mi tio pudiera atenderme. Tuve que esperar durante cerca de 30 minutos en el salón de aquella casa, con una taza de té que me había ofrecido el mayordomo.

Cuando por fin pude pasar, mi tío me esperaba sentado tras su escritorio con cara de pocos amigos. Él sabía que cada vez que aparecía por allí era para enfrentarle por algo; pero esta vez tenía pruebas físicas, no solo palabras.

-Sobrina, ¿en qué puedo ayudarte?

Saqué mi pen drive del bolso y se lo ofrecí.

-Pon esto. Querías pruebas, aquí las tienes.

Se quedó mirando lo que le estaba ofreciendo con una expresión bastante seria, para volver su mirada a mi rostro, y ver la decisión en mi.

Deseaba que esta historia terminara de una vez y cada uno pudiera volver a tener su vida normal.

Shoyo no sabía nada de lo que estaba haciendo, ya que no quería que él fuera culpable de esta historia también. Esto me iba a traer muchas repercusiones y muchas broncas con mi familia, pero tengo que hacerlo.