ERES TODO LO QUE VEO [VIXX-LEO]

XXXIX

Ya es viernes. ¿Se preguntan porque no he hablado del miércoles y jueves, cierto? pues es simple, nada interesante paso en esos días. Con MinAh entregamos el trabajo práctico y al parecer nos ha ido bastante bien. El profesor nos entregará hoy las notas, con eso sabremos si nos hemos llevado Historia a diciembre. No he salido con TaekWoon pero continuamos con nuestras discusiones y charlas diarias, nada del otro mundo. Lo único que fue medio raro es que Hyuna se acercó a hablarme. Intenté prestarle atención pero cuando me di cuenta que lo que me decía se trataba sobre ella y TaekWoon acompañado con un "Aléjate de él"' dejé de escucharla, aunque también me pareció oír que TaekWoon la había invitado al baile pero hice oídos sordos a sus palabras. 

Me levantó el sonido del celular. Me vestí con lo primero que encontré y bajé a desayunar, MinAh me estaría esperando con el coche para ir a la escuela. Hoy se venía un día lleno de charlas. Estaba segura que no pararía de hablar sobre la fiesta de mañana. Todavía no sabía si iba a ir, no le había avisado a mi mamá, supongo que si le digo que tengo que ir a la casa de MinAh para que ella me lleve me creerá. Si iba, llegaría una o dos horas después. Sabía que era peligroso tomar el bus a las doce de la noche pero no creía que nada malo pudiera pasarme.

- ¿Qué tal?- preguntó MinAh mientras me sentaba en el asiento del copiloto-, hoy será un gran día.
- ¿Enserio, por qué?- rematé confundida-, es un día normal.
- Claro que no, dime... ¿irás a la fiesta?- Sabía que MinAh me preguntaría eso. Me estaba cuestionando lo mismo hace como cuatro días.
- No lo sé, supongo que si estoy aburrida o mis ganas de salir se encienden iré.
- Recuerda que el bus que está a tres calles de tu casa te dejará a cinco cuadras del boliche- me recordó-, tienes que ir. Esas fiestas se hacen una vez por año y son geniales.
- Lo tendré en cuenta.

Llegamos al colegio, por suerte no tuve que correr hacía mi casillero. Agarré los libros y me dirigí a la primera clase del día. Lengua. Al fin y al cabo esa clase se había vuelto una de mis favoritas, pero no exactamente por el profesor y los contenidos de la materia. Claro que no. Era una de mis favoritas porqué compartía asiento con la persona que me volvía loca; si bien no éramos los compañeros de banco más normales y TaekWoon no era el chico más gracioso, divertido o simpático del curso a veces la pasábamos bien. Me sorprendió el hecho de no encontrarlo allí. Había faltado, bueno no es raro en él faltar a la escuela pero quería verlo. Otro día más sin sus medias sonrisas que me ganaba al decir tonterias o sin sus frases raras llenas de cosas para pensar. 

La siguiente clase fue Geografía, lamentablemente no me tocaba con MinAh ya que ella se encontraba en la de Historia pero si no me equivocaba a ella ya le habían dado la nota del trabajo. A mí me la darían en la hora siguiente, solo deseaba haberme sacado más de un Aprobado para poder tener la materia adentro.

- Señorita _____-me llamó la profesora para entregarme el trabajo. Necesitaba una buena nota si o sí -, muy bien. Al parecer no nos veremos en el verano.

Me sorprendí al ver que la nota era un excelente. ¿Acaso MinAh y yo habíamos hecho magia? Jamás nos habíamos sacado una nota así en un trabajo práctico. Estaba segura de que ella se había sacado la misma nota que yo, ya que habíamos hecho el trabajo juntas. Al salir de la clase MinAh me esperaba afuera con el folio en la mano.


- ¡Aprobamos!- exclamó contenta-. ¡Aprobamos el trabajo! ¿Puedes creerlo? ¡Un excelente!
- Esto es genial- dije emocionada-, pensé que me sacaría un regular algo por el estilo.
- Alégrate-dijo ella con una sonrisa en el rostro-, ahora nuestras madres nos dejaran salir a todos lados. Estoy segura de que la mía estará orgullosa, jamás le he llevado un excelente y estaba empezando a preocuparle.

El viaje a casa lo tuve que hacer caminando. MinAh tenía que ir a buscar a su madre al médico ya que tenía que hacerse unos estudios. Cuando llegué a casa lo primero que hice fue mandarle un mensaje a mi madre, no le diría que me saqué ya que cuando lo hiciera tendría que decirle que mañana por la noche tendría que ir a una fiesta. Subí a mi habitación, la ordenaría un poco para perder el tiempo. Estaba tendiendo mi cama cuando mi celular comenzó a sonar. No podía distinguir si era una llamada o un mensaje ya que el tono era el mismo. Corrí hacía mi mochila y lo busqué. Era un mensaje, de un número desconocido.