Por fin cruzó la frontera. Con ese atasco le costó llegar hasta allí, pero como se suele decir, lo que vale la pena nunca es fácil. Al pasar la frontera parece ser que todos esos coches que antes estaban acumulados en una misma carretera se dispersaron, cada cual camino a su destino. Entonces fue cuando se sintió perdida, cuando tuvo que parar en uno de esos restaurantes que están justo al lado de la carretera, cuando tuvo que buscar por el coche el mapa que ella misma había hecho. Se sentó en una mesa así como de picnic que había fuera del edificio, en medio de un bosque muy bien cuidado y verde, y sacó todo lo necesario para saber adónde debía dirigirse y situarse bien. Un mapa, una brújula, el móvil, una libreta pequeña de viaje y un estuche. Un poco más y ocupaba toda la mesa. Abrió el mapa y se fijó en esa carretera que estaba marcada con un rojo potente, esa era la que debía seguir para llegar a su primera parada. Luego buscó los puntos verdes que eran los restaurantes y las estaciones de servicio, como en la que estaba entonces, para saber dónde podía parar para almorzar. Ella era sencilla pero compleja, un poco difícil de entender. Con la comida, si le servían unos macarrones de primer plato y de segundo algo de carne, con eso ya la complacían. Pero para dormir necesitaba un sitio con un mínimo de comodidad y en la higiene y la ropa era más cuidadosa. Una vez tuvo lo básico controlado, cogió la libreta y un bolígrafo azul Bic y empezó a escribir. Escribía como había ido esa primera parte del viaje, describía todo lo que había a su alrededor junto con la gente que había conocido por el camino y finalmente su localización, fecha y hora y punto final (por hoy). A continuación lo recogió todo, lo puso en su pequeña pero grande mochila (ya que cabía todo eso dentro), compró un Chupa Chup en la tienda y volvió al coche para reincorporarse en el trayecto, que aún le quedaban unos cuantos kilómetros.
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Short stories
Short StoryDesde reporteros perdidos en medio de París hasta niñas pequeñas que tienen la suerte de visitar un circo. Mundos inexistentes, fotógrafas que hacen de guías, viajes en barco casuales. Desde romances en pequeños pueblos costeros hasta conversacione...